La Novia de mi Hermano

Capítulo 60

Pov Ema

-Hola cariño.- dijo Helena apenas me abrió la puerta de su casa.

-Hola Helena.- levante mi mano en forma de saludo.- ¿Puedo pasar?

-¡Oh Claro!.- se hizo a un lado para dejarme entrar.- toma asiento.- camine hasta su sofá para sentarme.- ¿Deseas algo?.- le negue con la cabeza.- ¿Que te trae por aquí?.- me miró expectante.

-Yo.... - comencé a hablar estaba nerviosa.- me gustaría saber si, ¿podría llevarme donde esta sepultado su esposo?.-hable rápidamente, ella abrió sus ojos sorprendida por mí pregunta.

-¿Pará qué quieres ir para allá?

-Me gustaría hablar con él

-Si te pregunto sobre qué, no me dirás, ¿verdad?

-Exacto.- le sonrió.

-Bueno, entonces no me queda más que decirte que si, encantada te llevaría.- le asentí.- ¿Cuando quieres ir?

-¡Ahm! Mañana por la noche.- ella abrió su boca ligeramente.- yo se que es algo repentino, pero me gustaría hacerlo, ya.

-¿Por qué tanta prisa?

-Se vienen algunos compromisos, no tendre oportunidad de viajar, así que quisiera hacerlo ahora.

-Vale, tengo que ver quien cuidara a Dereck.

-Se puede quedar con mi hermano, ya sabe se llevan más que bien.

-Claro, no tendría problema.- le sonrió.

-Bien.- me levanté del sofá.- tenga lista su maleta, nos iremos solo dos días.- ella asiente, camine hasta la puerta y antes de abrirla me gire para verla.- no le diga nada a Camila, por favor.

-Cariño estas muy misteriosa.- la mire algo apenada.- pero esta bien, no diré nada.- me regala una sonrisa cálida.

-Vale, nos vemos mañana.

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-Amor.- me llamo Camila, desde el umbral de la habitación.- ¿En serio debes viajar?.- la mire, justo en el momento que hacía un puchero.

-Si amor, es un viaje de negocios.

-Pero, tiene que ser, ¿mañana?

-Si bebé, sabes que después tendremos que ir a Miami, por el cumpleaños de mi papá.- levantó mi hombro.- si aplazó el viaje, no podre ir a Miami y mis tías me matarían, además extraño Ariel.

-Lo sé, tu sobrina es una ternura.- sonríe.

Deje de empacar mi maleta para acercarme a ella, rodé su cintura con mis manos y ella llevó las suyas a mi cuello.

-Solo serán dos días mi amor, luego regresaré y te daré millones de besos por esos dos días que no estaré contigo.- beso su frente.

-¿Sabes que serán más días, verdad?

-Son cuatro en realidad, lo sé.

-Como sea.- me besa rapidamente en los labios.- te veré el viernes y haremos el amor apenas llegues.- me sonríe coqueta.

-Haré lo que quieras.- me acerco a besarla, pero ella se aleja rápidamente.

-Termina de preparar tu maleta yo iré a darle de comer al cachorro.- le asentí.

Había pasado más de un mes desde que Camila se mudo conmigo, en ese mes pasaron tantas cosas como por ejemplo que adopte de manera impulsiva a un cachorro San Bernardo, Camila cuando lo vio casi me mata, porque sabía lo grande que sería.