Capítulo 46.

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Addison.

Simón me dejó en casa y ni siquiera recuerdo hacerme despedido. Baje lo más rápido que pude y entre a casa.

¿Como lo vería ahora? ¿Como si quiera voy a hablarle? Me había besado, me había tocado y... No se. No se que paso.

Creo que me deje de llevar por todo lo que dijo y me sentía tan mal que simplemente lo hice.

-Addison, preciosa. ¿Que te pasa? ¿Viste un fantasma? - preguntó Kane acercándose a mí.

-No, no. Solo que... No, no. No me pasó nada. - hice el intento de sonreír.

-Te estaba esperando. Tu hermana dijo que te habías ido con un chico. - Maldición, Sofía me vio.

-Oh, si, con Simón. - Dije y me sentí rara con tan solo pronunciar su nombre. - pero, ¿para que me esperabas?

-¿lo olvidaste? ¡Tu cumpleaños es el viernes! Tenemos que comprar muchas cosas.

No puede ser. Lo único que quería hacer era dormir y olvidarme de todo este desastre. ¿Ahora tengo que salir de compras? Genial. Bastante genial.

-Pues vamos. - sonrei.

Llegamos al centro comercial en menos de quince minutos. Entramos a la primera tienda y kane estaba bastante emocionado. Hace poco escuché a Kane decirle a mi madre que yo soy como la hija que jamás tuvo. Eso me hace feliz pero kane nunca va a reemplazar a mi padre. Ningún hombre en el mundo, de hecho. Este día ha pasado tan lento. Es increíble.

-entonces ¿estas saliendo con Simón? - me pregunto Kane.

-No. Tampoco quiero hablar de él.

-¿paso algo? - me mira.

-me beso. Me dijo que tenía que disfrutar el momento, que solo olvidara a Dixie por un momento y me deje llevar. - Lo solté tan fácilmente la verdad es que me encantaban los consejos de Kane.

Sé que no podía verla pero ya me
imagino la cara que hizo. Kane es
bastante comprensivo, ya sé por qué mi madre lo quiere tanto.

-Sólo que no me parece justo que
mientras Dixie la pase bien, yo sólo
llore por lo que alguna vez tuvimos.
-Seguí- Y yo también me quiero divertir.

-Es ese tu concepto de diversión?
Besar a otros chicos? -Preguntó.

-Cómo estás tan segura de que ella ya
te olvidó? -No quiero ilusionarme, no la estúpida de Madison. Hace más de un mes.

-Ha estado con chicas, incluso con la
no la veo, ni me llama, ni me manda un mensaje de texto. Es más que obvio que me olvidó.

Salí con los tres vestidos en la mano.
El primero no me gustó, el segundo es
lindo pero a mí se me ve horrible, el
tercero no me quedó.

-Addison, pienso que después de todo lo que le dijiste, no puedes esperar que te llame o te mande mensajes de texto. La culpaste, le dijiste que no querías nada con ella y que todo fue un error. Como crees que se habrá sentido? No puedes seguir culpándola. Si todo está así, es por ti. No por ella. Por qué tiene que buscarte ella? Si quieres recuperarla, búscala tú. Pídele perdón. Pero no esperes que todo lo haga Dixie.

-Ya es demasiado tarde, Kane. Ella ya
me olvidó. -Suspiré.

Cogí una bufanda color rosa y se la
entregué.

- Me puedes ahorcar con esto? -Dije y el rio.

Después de pasar horas buscando un
vestido, finalmente encontramos uno.
Era un vestido largo y negro que según Kane, estaba hermosa con el puesto. Dejaba mi espalda al descubierto y de la cintura para arriba, lo sostenía un pequeño nudo en el cuello. Era un vestido elegante y a la vez sexy.

Eres mía, rubia (dixison) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora