3 Personas, 2 Metros y 1 Oportunidad

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Antes de que los últimos segundos de la canción acabaran, Manuel detuvo rápidamente el Walkman para así dejar consigo un ligero pero no muy grande tiempo de intervalo con la siguiente canción a grabar; este se encontraba en un viejo escritorio de madera, con ligeros roces de color caramelo y un escuche de cassettes donde se veían escritos distintos nombres de autores y mezclas personalizadas

Atento... despacio...- se repetía una y otra vez aquel joven quien se le notaba totalmente concentrado para no arruina ni un solo milímetro de su grabación, era tal la perseverancia y delicadeza que había hecho un tipo especial de "Sala de Grabado", y en todos lados se encontraban listas con nombres de diversas canciones junto a su tiempo exacto de duración

Todo bien señor locutor?- Pregunto aquella mujer de tez morena y de edad intermedia- Ño quiero que arruines tu pequeña grabación por mi

No mamá-Respondió en niño- estoy acabando una grabación, ya en un rato grabaré la siguiente, solo preparo todo

Muy bien- Dijo la señora abrazando al chico de la espalda dándole besos en la nuca mientras esté la intentaba abrazar cariñosamente- Cuando acabes podríamos escucharla

-Claro que si- Respondió el chico entusiasmado- solo debo ir a comprar más baterías mañana y listo

Mientras el joven Manuel baja de su silla y se dirigía al sanitario, su madre, con una mirada de pesadez y de tristeza sacó de su bolsillo un pequeño bote de píldoras, del cual sacó un gran puñado para poder tomarlo con una botella de licor que igualmente guardaba en su gabardina

Mamá, ya puse la película diaria- Gritaba Manuel, llamando a su madre para estar juntos

Voy- está respondió con un tono desanimado pero forzado, era claro, su sentimientos ya no eran normales, y su mente ya había dejado de lado su amor por su hijo, en pocas palabras... estaba destrozada, y desde que había dejado de ir al psicólogo su mente solo se sumergía más en la enorme tristeza de la cual ni ella misma quería salir... ya no podía, su hijo debía de seguir, pero ella ya no...

Capituló 3

El viejo molino de viento, situado ahora en medio de dos casas algo modernas y protegido por un vallado, en una ocasión sirvió para moler granos y crear masa de tortillas, pero ahora era un mero adorno mal cuidado, en este siempre se tenía la idea de que un viejo perverso vivía sin que nadie lo alimentara o siquiera cuidara, su nombre se presumía era Carson, que venía del norte del país y era ex-militar de las fuerzas especiales, pero todo este mito al final del día era mentira, nadie vivía o vivió en mucho tiempo en ese lugar, pero era una tradición macabra conservar esa vieja y absurda leyenda, lo demasiado fuerte para atraer la mente curiosa de los niños y chicos

Por aquí Carlos, ten cuidado- Comentaba Manuel mientras que con su amigo entraba a las ruinas aún estables del molino, en este ya había una historia en donde los 3 chicos habían construido una especie de guarida en un pilar a lo más adentro del campo donde se encontraba, ahí solían encontrarse o si quiera hablar un rato mientras jugaban o simplemente se miraban

Espera, me puedo cortar y mi mamá dijo que era peligroso y me podía dar una enfermedad y me podía infectar y me podía...- Mientras Carlos comenzaba con su ansiedad ante todo, Manuel simplemente se encontraba serio, sin ganas de contra debatir a su amigo, que ya era una situación normal entre los dos, pero hoy no quería...

M-mira, llegamos!!!- Exclamo Carlos haciendo que Manuel saliera de su transe de ideas, viendo así su pequeño lugar secreto; era un ligero hueco en el pilar de más de 1 Metro de grosor, en este había uno que otro dibujo o garabato hecho de gis color blanco, un pequeño banco de madera y una vela a mitad de consumo

VALLE VERDE🌳Where stories live. Discover now