EL CICLO

Parte 5

Entre y ya ansiaba escuchar los gritos de mi marido pero, sorprendentemente, solo se oian unos golpes a lo lejos. Le había dicho que luego de ir a buscar el auto iba a pasar por esa salida que le debía a Nerea, una amiga. Al parecer solo eso basto para que se tomara el atrevimiento de meter una mujer en mi cama. Desde lejos observe un poco el paisaje. No sabia si era la misma de esa vez que cometio el error. No sabia si era una nueva, si era de hoy, si era la mujer del mecanico quizás. Estaba borracha. Solo me subi al auto y volvi a el ultimo lugar en el que había estado.

Lo llame y salio, me invito a pasar, pero la realidad es que yo no quería nada de eso, no buscaba venganza, ni una noche de olvido ni nada de eso. Entro de nuevo y salio con otro vino y unos manies.

No sabia que hacer, me explico que su plan de tres meses no era tan exacto, el original era de 1 mes, solo que el no había podido cumplir y se le estiro, le daba miedo que a mi se me estire a 10 años, con respecto a mi personalidad dependiente.

El vino, le dejaba la boca brillante, no había comido un solo mani, se había puesto un joggin, una remera blanca y cuando se reia movia la sonrisa a un costado como si no le gustaran sus dientes. Pero eran tan lindos.

Poco me había servido pensar tanto todo, si se me terminaba cayendo todo en pedazos, estaba triste angustiada, no pensé mucho el instante que me subi encima de el y comenze a besarlo.

Me tomo por mis caderas fuerte, apretaba mi espalda, mi cola, estiraba mi pelo, tenia tanta ropa y yo solo quería que me tocara desnuda, acariciaba todo mi cuerpo suave, pero decidido. Me pasaba la lengua por el recorrido del cuello hacia mi oreja, metia toda su boca en la mia, yo no podía respirar de la necesidad de anhelar que me tenga de espaldas metiéndome todo el pene hasta el fondo, que lo haga muy muy rápido, y solo en la tercera vez que me cojiera lo empieze a hacer despacio, que me frote, que me toque todas las partes del cuerpo y que solo asi me hiciera suya.

Meneaba mi cuerpo encima de su joggin sintiendo de golpe como su pene se ponía firme debajo mio. Me saco de un solo movimiento, todo lo suelto y abrigado que llevaba encima, enseñándole que no traía corpiño. Comenzo a lamer entre mis pechos y al llegar a la punta mordisqueaba muy despacio, lo repetia en las dos, como si se tratara de un helado.

Me decía que no podía mas, que lo que mas quería desde la primera vez que me vio, era ponerme en cuatro, en el asiento trasero de mi auto y penetrarme todas las veces que pudiese hasta acabar. Fuimos a la parte de atrás, baje mis pantalones y ropa interior, y cuando le presté atención todavía no se había sacado nada. Corrio todo lo que pudo el asiento de adelante, se sacó la remera, muy lentamente para mi placer, se arrodillo y comenzó a lamerme, muy despacio de una manera insoportablemente rica. Los costados, y el interior de mi vagina, acercándose y haciéndolo mas rápido a medida que iba de a poco a mi clítoris. Alli freno, volvió a hacerlo muy despacio, y rápido después, con sus manos masajeaba mi cintura, y me miraba a ver como respondia a cada uno de sus movimientos. Asi lamia, de vez en cuando salivaba un poco desde lejos, para que yo pudiese ver. Cuando al fin tuve mi orgasmo, el no paro, pero si volvió a hacerlo muy lento, con sus manos me tocaba el cuerpo.

Cuando al fin se saco el pantalón y la ropa interior me dejo mirar su pene, se sento en el asiento y me asegure de chuparlo bien. Me lo metia hasta el fondo de la garganta, y cada vez que podía lo escupia, pasaba mi lengua por sus testículos y volvia.. Los vidrios estaban todos empañados, no haya luz desde afuera y los arboles nos tapaban un poco de las personas que podrían llegar a pasar. Pero el ruido no, el gemia cada vez que metia su pene hasta el fondo de mi garganta, y yo grite todas las veces que me dio un orgasmo. Ya no podía mas cuando al fin me subi ensima de su pene todavía erecto, y comenze a saltar ensima de el., primero muy despacio y después tan fuerte que el tenia que frenarme las caderas para no acabar adentro mio. Despues me colocó en cuatro y cumplio su deseo de poseerme muy fuerte de espaldas, me agarraba muy fuerte el pelo y me lo tiraba para atrás, pero como su pene era grande era mas el dolor del su golpe al fondo de mi vagina, que el de mi cuero cabelludo. Entonces acabo de nuevo.

Descansamos un poco en esa parte de atrás, me recosté ensima de su cuerpo desnudo, y lo acariciaba con la punta del dedo. Luego de unos minutos de calmar nuestras respiraciones, su pene me golpeo de nuevo en el abdomen, subi un poco, y lo hicimos mas acostados, apretados, mi cuerpo muy encima de el y su cuerpo casi absorbiendo el mio, ahora podíamos besarnos, su lengua acariciaba la mia, pero paró, para darme vuelta, que su pene ingrese en mi, y sus dedos froten mi clítoris, fue entonces, que con el penetrándome de espaldas y sus manos tocándome, tuve otro orgasmo y van....