Capítulo 28

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||Louis||

—¿Estás lista? —le pregunté. Ella desvió la mirada.

No había sido difícil encontrar su información, soborné a uno que otro trabajador del orfanato, al principio negaron poseer cualquier tipo de información, pero con dinero terminaron por ceder.

Estuve muy tentado a ser el primero en saber quienes fueron los padre de Camille o por lo menos quien fue la persona que la entregó. Sin embargo sabía que ella merecía ser la primera, yo solo le había ayudado pero no tenía ningún papel en esto.

Lo único bueno que logré descubrir es que el nombre que esté aquí escrito, es la madre de Camille, eso lo confirmo Madelaine, aquella maestra que cuido mucho de Camille.

Tuve una plática con ella, no fue mucho, pero comentó cosas nunca me había puesto a pensar sobre mi novia. Camille es muy insegura, hay una diferencia entre penosa e insegura, también es reservada, y su fruta favorita es el plátano o el durazno.

No fingiré que no mal pensé.

—N-No lo sé —susurró.

No debíamos hacer mucho ruido. Sus madres se encontraban afuera, ahora estábamos ella y yo solos en la habitación con la maravillosa excusa de que teníamos un trabajo en equipo, y bueno, verme con papeles se las hizo creer.

Rose se entusiasmó demasiado al verme, parecía que desprendía flores y algodón de azúcar, Juleka en cambio solo me examinó con la mirada.

—Aquí está la información —le recordé— Esta bien si no la quieres abrir ahora, puede ser mañana, dentro de una semana o dentro de un año. Es tu decisión.

—Es solo que...—se abrazó a sí misma.— El pensar que el nombre que esté escrito ahí es la persona que me abandonó es extraño. ¡No tengo rencor ni nada! Y al leer el nombre...no quiero tenerlo.

—Está bien sentirlo —musité acariciando su mano, deposité un pequeño beso en esta— Tus emociones son validas, sufriste mucho en el orfanato y así fuera por una buena razón por la cual te abandonó, tú puedes sentirte defraudada o simplemente entender, eso depende, cielo.

Ugh, soné cursi.

Ella asintió, respiró profundamente. Me quitó la carpeta y comenzó a sacar los papeles, cerró los ojos.

—¿Podemos verlo juntos? —preguntó.

Yo asentí colocándome a su lado. La primera hoja venía con su fecha y lugar de nacimiento.

—¿Ya cumplí años? —preguntó sorprendida— Oh...

—¿No sabias tu fecha de cumpleaños? —ella negó— Yo creía que ya habías cumplido los dieciocho.

—Según aquí, ya los cumplí, desde hace seis meses —se sorprendió— Hey, soy mayor que tú.

Reí.

—¿Cómo celebrabas tu cumpleaños?

—Elegimos que el veinte de Agosto era mi cumpleaños —rio— Solo escogimos ese día y ya.

—No naciste aquí —señalé— Naciste en...¿Italia?

—¿Soy Italiana? —jadeó.

—Pues...—la tomé de la quijada y giré su rostro varías veces—¡Mamma mía, tienes cara de espagueti!

—Que gracioso, Agreste —rodó los ojos riendo— Entonces si nací en Italia, ¿Por qué me entregaron en Paris?

—¿Lista para pasar a la siguiente página? —pregunté. Ella comenzó a mover su pierna, se mordió la uña. Decidido tomé su mano con la mía para así ambos poder tomar la hoja— A la cuenta de tres, retiraremos la hoja y leeremos el nombre de tu madre, ¿Lista?

More than just a friend [MLB] #2 ✔︎Where stories live. Discover now