Epilogo

335 52 20
                                    

Hoy se cumplen dos años desde que inició mi relación con Xiao Zhan, siendo un cambio tan drástico en mi vida que si me preguntasen en este instante no sabría dar una respuesta adecuada al momento.

Mi mano se encuentra enlazada a la de mi novio en este momento, habiendo pasado ya unos minutos desde que Fan Xing junto con su novio Pei Xin se ha marchado para tomar ese vuelo con destino a Corea del Sur donde pasarán dos semanas los dos solos, hospedándose en un apartamento vacacional que entre mi novio, el tío de Pei Xin y yo hemos conseguido, no siendo tan fácil convencerle para que permitiese que su sobrino viajase con Fan Xing.

— Yibo deberíamos irnos —me dice Xiao Zhan, apretando ligeramente su mano contra la mía —Fan Xing ya estará en el avión y este despegando, vámonos a casa por favor.

Asintiendo, quedándome solo unos segundos más quieto mirando en dirección a esa puerta de embarque, busco la forma de verle aunque no sea posible, siendo que ahora ya si estoy andando con mi novio, casi a su mismo ritmo, encontrándonos no en la salida del aeropuerto sino en el coche de Xiao Zhan, quien nos ha traído el día de hoy hasta aquí a los cuatro.

— Estará bien, ¿verdad? —miro a mi novio que se está abrochando su cinturón —es demasiado joven para viajar solo.

— Tiene diecinueve años y no va solo, va con su novio que le va a cuidar muy bien para que no le pase nada malo —trato de aceptar que es así —hoy te cocinaré algo delicioso para que no estés más tiempo enfadado amor. Ademas me muero de hambre y nos merecemos un respiro ahora que al fin tenemos la casa entera para nosotros solos.

Eso en palabras de Xiao Zhan se lo que significan porque desde hace cinco meses que vivimos en una casa que está a nombre de los dos, habiéndonos atrevido a dar ese paso de vivir juntos en una propiedad conjunta, con Fan Xing por supuesto, no ha habido un solo día que no hiciésemos el amor, siendo discretos por supuesto.

Zhan conduce con calma, escuchándole de un momento a otro cantar de pronto con la música de la radio de fondo, siendo que su mano se encuentra aún unida a la mía, moviéndose con un ritmo que hace que toda la tensión acumulada por la marcha de Fan Xing se esfume, incluso que sonría aunque no lo pueda parecer en un momento.

La distancia no es tanta a nuestra casa, aunque conduzca a la velocidad a la que vamos, llegando ya mismo, pudiendo entrar a nuestro hogar donde el silencio prontamente se siente de forma viva.

— Prepararé la comida, tu date si quieres un baño mi amor y te relajas.

Un baño suena de maravilla pero no es realmente lo que me apetece. Cerrando la puerta a mi espalda, dejando mis zapatillas de la calle a un lado guardadas en la misma entrada, me dirijo a nuestra habitación, quitándome la chaqueta que no se porque me he puesto si hace un calor agobiante. Dejándola bien colocada sobre la cama miro por toda la habitación.

Sentándome en mi cama, centrándome en un mueble en concreto, en mi mesita de noche teniendo Xiao Zhan la suya propia, abro el último cajón, apartando de forma cuidadosa para sacar el regalo de aniversario que hace días compré para mi novio, sonriendo con la confianza de que le gustará.

Mirando en dirección a la puerta de nuestra habitación, escuchando su voz nuevamente cantando de fondo, cierro el cajón, poniéndome en pie en este momento, yendo hacia la misma por la que ahora salgo, guardando su regalo en el bolsillo de mi pantalón, abrazándole por la cintura nada más llego hasta la cocina, dejando un beso en su nuca, su cuello, su mejilla, sus labios, tomando sus manos no tan limpias, cosa que no me importa, dejando un beso en estas al igual que nuevamente en sus labios.

— Mi amor se que este tiempo he sido demasiado terco con respecto a nosotros, incluso antes de que nuestra relación iniciase negando los sentimientos que tenia y tengo por ti —miro en todo momento a sus ojos —he pensado demasiado de forma negativa, me he perjudicado a mi mismo con el tema de la comida y gracias a ti he podido combatir y vencer en esa lucha tan peligrosa para mi salud, también para nuestra relación. Pudiste haberme perdido porque soy un completo imbécil y Fan Xing también, pero me alegra que no haya sido así y que estemos juntos, siendo hoy nuestro segundo aniversario, el cual por primera vez podemos disfrutarlo a solas. Se que eres malo con las fechas, no tienes que preocuparte por eso, solo espero que no olvides una que será aún más importante que esta en la que se cumplen dos años desde que iniciamos nuestra relación.

— ¿A que fecha te refieres? —habla claramente confuso —si dices tu cumpleaños se que es el..-

Interrumpiéndole me arrodillo, sacando previamente mi regalo del bolsillo de mi pantalón, abriendo la pequeña aterciopelada tapa de la cajita, mostrándolo de forma que sus ojos se abren cuanto es posible.

— Xiao Zhan a pesar de como he sido siempre, de ser tan idiota y de negar lo que era evidente has sabido quererme y soportarme y eso es lo que más me gusta de ti, la infinita paciencia que tienes —sostengo una mano tan solo de mi novio —¿querrás seguir soportándome por muchos años más y ser mi esposo?

— Si es un regalo de aniversario te has superado al del año pasado —ambos reímos —por supuesto que quiero casarme contigo idiota. Eres mi idiota, mi todo y yo también tengo un regalo para ti. Aunque no se si superará al tuyo, al menos lo intentaré de que así sea.

Antes de poder incluso colocar el anillo que tanto me ha costado encontrar así como también comprar ahorrando a escondidas de Xiao Zhan, mi novio se mueve por un momento, encontrándome nuevamente de pie, cara a cara con mi novio, siendo que en mi mano libre hay ahora un palo demasiado extraño, palo por así decirlo porque está claro que no lo es, siendo un aparato extraño, alargado, con una pantallita en la que salen tres caras que parecen de bebe.

— ¿Esto que es Xiao Zhan?

— Esto es mi regalo para ti mi amor —miro nuevamente a los ojos a mi novio —¿recuerdas cuando tu antiguo profesor le dio la sorpresa a su esposo en esa reunión en su boda? Pues mi forma no es tan concurrida pero es mejor así. Esto mi amor es el significado de lo mucho que nos amamos y que espero sepas cambiar pañales porque pronto tendremos un pequeño Yibo en nuestras vidas.

¿Un pequeño Yibo?

Pronto es que lo comprendo, saliendo del lapsus en el que he sido metido de pleno, besando en este momento a mi novio, a mi prometido más bien porque ha aceptado ser mi esposo, así como también al padre de nuestro futuro bebe, de esa pequeña vida que nacerá en unos meses y cambiará por completo la nuestra, afianzando por supuesto nuestro amor, no habiendo nunca más límites para amarnos, para mostrar cuanto quiero a este hombre y él a mi por supuesto.

— Seguimos superando los límites del amor —dejo un beso más en sus labios —tanto que ahora vamos a ser padres. Eres y siempre serás lo mejor que habrá en mi vida.

— ¿Eso me lo dices a mi o al bebe?

— A ti idiota —le subo con cuidado a mi cintura —a ti porque nunca más limitaré a mis sentimientos, te amo demasiado mi precioso Xiao Zhan.

Limits to loveTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang