Sun Hee deseaba recuperar el primer lugar de la escuela, el cual, ha sido arrebatado durante 4 años consecutivo por Zhong Chenle su nuevo vecino.
Lo odia, sin embargo, al aceptar la apuesta de su mejor amiga su vida dará un giro de 180 grados.
"S...
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Chenle se apresuró a ayudar Sun Hee, ya que, a pelinegra se le había ocurrido la grandiosa idea de entrar a su habitación por el balcón y aunque de pequeña competía con sus primos por trepar un árbol, actualmente se está arrepintiendo de su idea.
El castaño se había dirigido hace media hora a la sala, ya que la señora zhong había llegado. Por consiguiente, Sun Hee no quería salir, ¿Qué le diría a la señora Zhong? Prácticamente solo durmió y no hicieron nada malo, ¿se supone? Pero no quería darle mala impresión a la mamá de Chenle; seguramente si la viera salir de la habitación de su hijo pensaría negativamente y lo mal interpretaría, ¡¿cómo no pensar mal?! Técnicamente, esta siendo paranoica y aunque Chenle estuvo en desacuerdo con esa decisión, Sun Hee trato de convencerlo una vez que él volvió a su habitación y la vió concentrada en el balcón. ¿Cómo negarse a decirle qué no a Sun Hee?
La pelinegra suspiro aliviada cuando sus pies tocaron la cerámica contraria que se dirigiría a su habitación.
Sus ojos avellanas fijaron la vista hacia Chenle dando una gran sonrisa para luego decir.
-Gracias.
Él le devuelve la sonrisa mientras se acerca un poco para besar su frente- Sun, cuídate, te quiero- lo último no sabía si se abría apresurado a decirlo, aunque era lo que realmente sentía-
Sun Hee lo abrazó con dificultad ya que su estatura era de 1:60 cm y el pequeño miro que los separaba la hacia ver más pequeña - igualmente - susurro al separarse y entrar a su habitación.
Al estar al frente de la ventana, agradeció que ésta no la había cerrado el día anterior y prosiguió a entrar de inmediato. Una vez adentro corrió rápido y saltó hacia su cama mientras rodaba en ella.
(Sonido de teléfono)
Sun Hee reaccionó rápido al escuchar el sonido de su teléfono y vio la llamada: su madre.
- Sun Hee, ya son a la 1:00pm, ¿por qué no constatabas mis llamadas?- Gritó preocupada-
La pelinegra abrió los ojos al comprobar la hora.
- lo siento madre es que- trato de buscar una excusa - Me estaba bañando, mientras escuchaba música muy alta a través de la computadora.
- Oh, ya, pero no me preocupes así, de todas maneras llegaré a casa en 10 minutos, nos vemos luego.
- listo
Sun Hee corrió a la ducha, seguramente este era el baño más corto que se había dado en toda su vida, ¿Cómo no? Apenas sintió el agua fría en su cuerpo y recordó el desorden que tal vez había ocasionado el día anterior.
No seco su cabello, solo se apuró en cepillar sus dientes, secar su cuerpo y vestirse. En menos de cinco minutos salió de su habitación directamente a la sala.
