-Nico saca tu lo último que falta porfa
-Vale amor, ¿Chloe?
-Ha subido con mi madre que iba a arreglarse
Mira a las escaleras mientras hincha los últimos globos y sonrie al verlas bajar, con el mismo peinado, el mismo pintalabios, tienen hasta la misma peca en la barbilla pero cada una a un lado.
-Parece tu hija en vez de mía
-Si, pero en el carácter ya se parece a ti eh, con lo tranquilo que es tu chico
-Bueno mejor que si no me aburriré
-Calla anda, ¿ha llegado alguien?
-La tia Alicia, papá y Mateo espero que vengan porque si no menuda decepción se va a llevar Chloe
La ve nerviosa y se acerca a cogerle de la mano.
-Mamá tranquila
-No soporto que tu hermano me trate como si fuera su tia lejana o yo que se, es mi niño
-Algun dia se dará cuenta de la tontería que ha hecho con su madre
-Eso espero
-Voy al jardín
-Ahora iré
Va frente al espejo de la entrada y suspira. Nota una presión en el pecho que la hace ponerse más nerviosa aún.
Y su mirada se clava en el espejo al oir el timbre.
Coge aire y se acerca a la puerta, intentando parecer normal, que no tiene ganas de salir corriendo.
Abre y ve a Mateo, cada día más guapo, con su tupé bien peinado, sus ojos gigantes, ya más alto que ella.
-Hola mamá
-Hola cariño
No sabe ni que hacer pero se decide nerviosa a darle un abrazo y aunque un poco frio es correspondido.
-Voy a ver a Chloe
-Vale hijo, en el jardín
Sonríe como una tonta pero esa sonrisa se borra al volver a mirar a la puerta y ver a Luis clavando su mirada en ella.
Y mientras ellas no puede quitar la mirada de sus ojos el también esta paralizado ante su ex mujer. Parece que los años no hayan pasado, si, está más mayor, pero su pelo sigue siendo precioso, su flequillo, las ondas que siempre se hacía, ese gloss que tanto le resaltaba la sonrisa, por no hablar de lo bien que ha elegido el vestido negro de escote cuadrado y tirantes finos.
Y el tampoco a cambiado, sigue también en forma, se pone más camisas en su vida de diario sin contar el trabajo, y su pelo ya prácticamente es gris, al igual que la barba.
Ninguno sabe que decir ni que hacer.
-Papá-oyen a Lucía desde el salón-
-¿Puedo?-le dice a Aitana para que se aparte de la puerta-
-Si
Y sin más pasa a saludar a su hija antes de salir al jardín.
En cuanto puede con la excusa de fumar se aparta a un rincón del jardín, y es que realmente necesitaba ese cigarro, siente que esta con su familia sin serlo, se siente sola con los suyos.
-¿Tienes mechero?
Se tensa al oir su voz detrás suyo y se limita a asentir y dárselo.
-Nunca lo pudimos dejar eh
-No nos ha salido nada bien nos iba a salir esto
-Aitana yo-le toca el brazo y ella se aparta-
-No me toques
-Solo quiero pedirte perdón
-¿Pedirme perdón?-pregunta riéndose irónicamente-
-Aitana
-Que te calles, que solo de oírte me entran ganas de fumarme un paquete entero
-No me extraña que te hayas quedados sola
-¿Sola?-dice levantando la voz- Solo estarías tu, que siempre has sido un egoísta, que estoy harta de estar toda la vida girando en torno a ti y a tus mierdas
-Pues yo de tus tonterías ni te imaginas, loca
Le suelta una bofetada y se miran con las respiraciones agitadas.
-No te vale con haberme quitado a mi hijo verdad, tienes que venir a mi casa a insultarme
-Luis, Aitana, porfavor- se giran y ven a Alicia calmando las aguas, no es la primera vez-
-Alicia no somos dos crios-le dice su hermano enfadado-
-Chloe ha venido a buscaros y ha vuelto llorando porque os estabais gritando, la primera vez que vuestra nieta os ve juntos y hacéis esto, después queréis que vuestros hijos sean neutrales, se van todos y a Mateo lo llevo yo a casa, espero que llegues relajadito, y recuerda que es tu hijo, no tu colega ni tu psicólogo, y Aitana es su madre
Se va y Aitana saca otro cigarro de la cajetilla.
Pero antes de que lo encienda ve a Lucia acercarse.
-Gracias por hacer que el día de mi hija acabe así, sois mis padres y os quiero mucho y he sido muy feliz, pero a Mateo lo estáis jodiendo indirectamente haciendo que se posicione cuando el solo tendría que estar con sus padres y punto, y que Chloe lo pase mal por sus abuelos eso si que no os lo perdono, por cierto, me hacía ilusión que vinierais para deciros a todos que estoy embarazada, buenas noches
Se va y a Aitana se le saltan las lagrimas llena de rabia mientras enciende otro cigarro temblando.
-Joder
-¿Que hacemos? Es que no se que podemos hacer para arreglar esta mierda, para ser familia
-Yo no puedo verte y sentir indiferencia
-Dime una cosa
-¿Que?
-¿Me odia? Mateo
-Como te va a odiar, eres su madre, si erais inseparables
-No debimos de hablar nada delante de ellos, Mateo tenía 10 años, menos cuando empezó todo, nos pensamos que porque Lucia sea adulta el también
-Yo tampoco he puesto de mi parte para que se le pase el enfado a Mateo, solo pensaba en mi
-Como siempre
-Estas temblando
-Estoy bien, vete tranquilo
