Amor De Lobo (Clawdeen X Draculaura)

No pierdas la fe

Ya había pasado un mes después de todas las cosas locas en mi vida, todo estaba mas calmado, espero aun que siga así. Deje mis cuadernos en el casillero mientras buscaba otra cosa, de repente como precipitado vino un olor raro, no le di importancia al momento, estaba muy concentrada, en un segundo sentí que me halaron con una fuerza descomunal, tenían el rostro cubierto, me taparon la boca, abrí los ojos con temor, todo lo que veía era oscuridad, no veía nada, cuando de repente vino el primer golpe, no pude diferenciar que era, me dejo sin aire, me ardió, no entiendo porque me golpeaban, hasta que escuche otro golpe al lado mío, Toralei venia no solamente amordazada sino totalmente amarrada, en eso intento acercarme, pero claro mas golpes vinieron a mi, al principio trate de no soltar tantos quejidos, pero era imposible, el olor que aseguro también que Toralei olio me hizo revolcarme, era muy fuerte, mas que mi dolor de cuerpo, mi sentido del olfato ardía, todo había pasado tan rápido que no entendía mucho.

Pude escuchar sus risas, estaban gritando varias cosas, pero mi shock no me permitió entender claramente lo que decían, solo esperaba que esta tortura terminara, por mi mente pasaban varias cosas, hasta que solo paro, se fueron sin antes reventar un tipo de vidrio contra el piso.

Mis manos trataron de descubrir mi boca, pero me ardían, lo siguiente fue el segundo sarpullido del olor en mi nariz, -intuyo fue lo que golpearon en el piso- no veía nada, podría imaginar que esto era específicamente para dañar nuestros olfatos, en una movida rápida destape mi boca, di varias arcadas, después vomite así sucesivamente, cerré mis ojos tratando de no seguir vomitando pero lo hacia, mire a Toralei que estaba en un peor estado que yo, su cuerpo tanto como su rostro estaba hinchado, podia ver como había sangre, mas no determinaba muy bien lo demás, como pude me arrastre para desamarrarla, fue difícil, todo me ardía y cualquier otro pensamiento me enfocaba en el olor horrible, ella me miro antes de vomitar también, no me queje, mi primer intento de levantarme fue fallido, era como si algo hubiera perforado mi hueso, no se como describir ese dolor que me atravesó todo el cuerpo, me hizo caerme de bruces al suelo, sabia que me dolía, la primera palabra salió de mi boca en mucho tiempo, la chica gato que me acompañaba soltó unas pequeñas risas, no sabia si era por lo que había dicho o mas bien era sarcástica, escucho como se levanta.

— en mis años que estuve encerrada en el reformatorio jamás me habían golpeado tan fuerte, menos por algo que de verdad no quise cometer con intension de molestar a alguien — sus palabras irradiaban odio puro — levantate lesbiana dos o vas a dejar que ellos nos humillen — entendí un poco a que se refería, pero aun tenia ganas de vomitar, nada de esas sensaciones se quitaban, me levante pero no pude apoyar muy bien la pierna, todo estaba oscuro, apenas reconocía objetos, pero Toralei pareciera ubicarse mejor.

Cuando salimos a la luz el pasillo largo se me hizo un infierno, Toralei llevaba cara de rabia, mas en algún momento note preocupación, medio nos cargábamos mientras tratábamos de no vomitar tanto, los pasillos se me hicieron eternos, cuando encontramos uno muy concurrido la primera que se desplomo fui yo, Toralei ando unos pasos mas para caer, el ardor no disminuía, los monstruos cuando nos vieron se alteraron.

— Clawdeen, sabes ¿Dónde están Draculaura y Cleo? — la chica gato hablo entre tantos murmullos, su preocupación es notable, intento levantarme de nuevo, pero esto va en aumento.

— ¡no lo se! — respondí con desespero a lo cual soltó la misma risa que había escuchado anteriormente.

No se cuanto tiempo paso para que nosotras fuéramos atendidas, para que el dolor disminuyera, entre tanto ella y yo no dejábamos de preguntar por ambas chicas nadie nos decía nada, solo quería intentar salir corriendo, que por lo visto no podría, yo jamás pensé estar tan desesperada en mi vida sin exagerar, Draculaura solo me culpo a mi por ser quien soy, de nuevo no debería pedirte perdón, pero solo es miedo, el que recorre mi piel mientras tratan de vendar todo, solo quiero que todo esto termine, tu papá me pidió que te cuidara, mas soy tan patética, no quiero pensarlo, mi ego me lo impide. perdoname.

Me quede dormida no se porque, pero cuando abro los ojos estaba Draculaura mirándome fijamente, esperaba que no fuera un sueño, su mirada seria parece como si todo ese tiempo hubiera peleado con su consciencia, trato de decir algo pero me siento terrible, ella me sonríe un poco.

— empezamos con la pata izquierda el día ¿no? — suelto algo así como una risa.

— ojala fuera solo la pata izquierda, casi me dejan sin nariz también, como podría olerte — ella me mira con una pequeña sonrisa igual, pero me duele la nariz siendo sincera ese es el peor aspecto, todo me huele igual.

— no saben quien lo hizo, pero creen que podría ser por solo el hecho de pertenecer y liderar el club, están contra nosotras por amar, no solo fueron por ti y Toralei, Frankie se llevo también una mano fuerte, yo me salve por ir con Cleo, Deuce no salvo — sonríe un poco — esperemos que todo salga bien —

— odio todo esto, no merecemos este trato solo por ser así, Frankie no tenia la culpa de nada, solo quería un espacio en que todos los monstruos fuéramos nosotros ahora no se si en verdad el sufrimiento de otros vale el esfuerzo de ser libres no es justo D— estaba cansada, cerré mis ojos mientras ella se sentó, empezó a cantar algo bajito para que yo solo la escuchara, perdí otra vez todo recuerdo, pero mis sueños eran muy sangrientos, tal vez se juntaban con la realidad por el dolor.

El regreso a casa fue tortuoso Draculaura me ayudo, también pude ver a Cleo que por lo visto si lloro a mares, Toralei estaba peor que yo, esa mujer en muchas ocasiones me sorprendía, podia ser fugaz, tal vez Cleo si estaba en las manos correctas, era la gata después de todo jamás estaría aburrida, triste, incluso si a veces la desesperaba, Cleo ella era muy egocéntrica, pero ambas eran complementos tan perfectamente raros que incluso un ciego se daría cuenta. Por eso a nosotras nos golpean, humillan, por querer, solo que no quería ver mas odio, recibirlo, en ningún momento pensé merecerlo, pero ellos espero que paguen, por todo el dolor emocional y físico.

Buenas, quise subir estos capítulos ya que los tenia algo listos, perdón las demoras vuelvo a reiterar, gracias por el apoyo y los votos, normalmente me hacen sentir mejor, mas porque simplemente yo hago esto por arte por mi, solo saber que a alguien mas le gusta mi arte me alegra, me despido, muchas gracias.

Att: la autora Villalobos.