Cuando Llega El Amor [#2 Coincidencias Del Amor]

Capitulo 10. Sólo atracción.

Capitulo 10.

—¿Y?, ¿El bombón no era el encargado de traerte hasta qué te aprobaras el examen de conducir?—pregunta Bianca alzando una ceja, la desperté temprano para que me trajera lo admito, debe odiarme.

—Lo despedí de esa tarea—miento, salí corriendo apenas desperté, él es más puntual que yo, aún espero que aparezca por aquí con cara de pocos amigos. Estamos desayunando en la cafetería.

—Algo me ocultas—afirma entrecerrando los ojos en mi dirección—¿Algo que me querías contar?—pregunta, niego tomando de mi jugo.

—No,¿ y tú?—pregunto con una sonrisa inocente que no me creo ni yo.

—Dilo—exige.

—Bianca...—titubeo y me mira mal.

—¿Qué hiciste?—niega en modo drama

—Nada...—le hago un gesto con la mano.

—Exijo que me lo digas.

—Lo besé —admito, abrió los ojos como platos—Dos veces—concluyo.

—¿Y qué tal?—pregunta divertida—Detalles—se acomoda con apoyando la mano en su rostro concentrada en mi.

—No preguntes eso—me quejo, qué vergüenza.

—Tengo qué, ¿cómo quieres que no pregunte?—dice indignada.

—Bien.

—¿Bien?

—Bueno demasiado bien, tiene lo suyo—admito.

—Y nada más...—me hace un gesto que siga.

—Lo puse cachondo—me muerdo el labio para no reírme.

—Ay no, América acabó contigo—niega divertida

—Yo acabé con ella—río.

—¿Hoy tenemos canto?—pregunta alegre.

—Si y clase de actuación también.

—Así que escucharemos cantar al ruiseñor—habló esa voz que sea convertido en mi verdugo desde que llegue, Sergio—Buen provecho chicas—comenta sentándose a mi lado, y no viene solo, los acompañas sus tres confis; Elliot, Xavier Dante, (idiota) y...

—Bonito día—comento acribillándolo disimuladamente con la mirada, nadie lo nota, excepto Bianca que niega divertida.

Hoy mi look es más casual; sandalias negras bajas, vestido de tirantes con lazos, color mostaza a la rodilla de estampado de flores pequeñas, el cabello semi recogido con una pequeña cebolla en el medio, de esos peinados tumblr que están de moda, aunque me tarde para que me saliera bien.

—¿Que hiciste anoche luego de que me fui?—pregunta divertido, pervertido.

—Nada interesante, ¿tú?—lo miro con una sonrisa malvada, apretó los labios.