Tu a Yunmeng, Yo A Gusu Lan (Versión WangXian)

Extra II

Nota: mención de somnofilía (que se siente placer o exitación al intimar con una persona dormida) no estoy tratando de romantizar ni normalizar temas como estos, es solo un fanfic, no a la doble moral.

Wei Ying sentía flotar entre nubes de placer y cansancio, era pasada la media noche y junto a su esposo estaban jadeando por sus recientes acciones. Finalizando su tercera ronda, Ying cerró sus ojos y se dejó arrastrar por la bruma del sueño quedándose dormido en cuestión de minutos, seguido por un mimoso Wangji que acariciaba su espalda y cabello.

Como todas las mañanas, Wangji se despertó puntualmente a las cinco de la mañana. Lo normal hubiera sido levantarse para bañarse y arreglarse, desayunar junto a sus hijos y hermano, trabajar un rato hasta las nueve de la mañana en su despacho, regresar a su habitación para bañar y arreglar a su esposo, dejarlo dormir una hora más mientras prepara su desayuno para luego subirlo a su habitación y tomarse al menos veinte minutos despertando a Wei Ying quien entre besos haría caso, se lavaría el rostro y dientes para desayunar y luego arreglarse el mismo para ir a trabajar. Si, esa era su mañana de todos los días, pequeños actos de los cuales estaba feliz y satisfecho de compartir –aún si su esposo estaba dormido más de la mitad del tiempo– pero hoy no sería así.

Hoy al abrir sus ojos contempló el techo de su habitación, sintiendo el peso sobre su pecho y la pausada respiración ajena en su cuello. Con sus manos acarició la espalda baja y cintura de Wuxian un rato para después levantarse con la intensión de empezar su rutina, pero al levantarse jalo las sábanas que cubrían a su esposo, dejando a la vista toda esa piel desnuda marcada y amoratada con su entrada y muslos desbordando su simiente. El desordenado y salvaje cabello de Ying regado por las almohadas y sábanas como un halo.

Sin poder evitarlo sintió la hinchazón y levantamiento de su miembro ante la vista, normalmente no se fijaría en el desnudo cuerpo de su esposo hasta el momento en donde lo bañaba, aún así siempre se contenía sabiendo lo cansado que estaba por las atenciones dadas la noche anterior, pero esta vez, esta vez no pudo mantener arraigado su autocontrol y refinamiento.

Volviendo a la cama, acaricó las dos voluptuosas nalgas de Ying, apretando y masajeando, disfrutando de la suavidad y firmeza de los músculos, con extremada delicadeza giró el cuerpo del doncel hasta dejarlo boca arriba, disfrutó acariciando los pequeños montículos rosas en su pecho, pellizcando y jalando con brusquedad hasta dejarlos hinchados y rojos. Acercó su rostro al pecho ajeno para lamer y succionar su pezón, mordió y remarcó los chupones de la noche anterior siempre viendo al rostro dormido de su esposo. Sabía que Wei Ying no despertaría, tenía el sueño pesado, así hubiera un incendio o un temblor.

Se levantó y se hincó entre las largas y magulladas piernas, las separó dejando a su vista la todavía hinchada entrada manchada de su semen frío y seco. Masajeó su erección dándole fuertes tirones para después entrar de golpe en el apretado y resbaladizo interior de su esposo. Llevó su vista al rostro del durmiente viéndolo arrugar su entrecejo y murmurar palabras inequívocas.

Llevando sus manos a las caderas ajenas empezó a embestir una y otra vez, disfrutando del caliente y asfixiante calor, los fluidos de la noche anterior manchando su gorda longitud y creando sonidos húmedos.

Extasiado, observó cómo la estirada entrada roja e hinchada de Wei Ying, tragaba desde la cabeza gorda hasta el tronco venoso de su erección para después apretarlo al salir como si no quisiera que lo dejara, animado por corrientes de placer aumentó el ritmo de sus embestidas haciendo que la cama golpeara la pared y rechinara levemente.

La idea de correrse y dejar el interior de su amado escurriendo lo hizo ponerse más duro, que su esposo se notará a sí mismo goteando todavía, asumiendo que era de la noche anterior y dejándose consentir por el lo tenía al límite. Siguiendo penetrando al cuerpo inerte bajo él bajó su cuerpo hasta estar pecho contra pecho rozando sus erecciones entre sí, con una mano abrió la boca ajena teniendo acceso libre para introducir su lengua, besando y mordiendo todo, sus dientes chocando por el desordenado beso, tomó la rosada lengua entre sus labios para chuparla hasta que sintió dos manos tomando su rostro entre ellas y su beso ser correspondido.

Embistió con más ganas sintiendo dos piernas enrrollarse en su cadera y la entrada que lo recibía apretarse a su alrededor, separándose, jadeó por los excesivos movimientos escuchando a Ying gemir lastimero como gato maullando.

-¡Lan Zhan! Anoche me tuviste... ¡Ah! ¿No estabas satisfecho? ¡Oh! -su espalda se arqueó al sentir el tirón de placer recorrerle-

Al no obtener respuesta acercó sus labios a la sonrojada oreja de Wangji.

-¿Te pone hacerlo mientras duermo gege? ¡Ah...!

-Lo siento -murmuró besando su pulso en el cuello-

-No lo estés -gimió- ¡Gege! ¡Esposo! -gritó al correrse fuertemente dejando salir tiras blancas de su erección en medio de ellos dos, un par de brutales embestidas más y sintió a Zhan correrse dentro de él- Jamás imaginé... Qué te gustaría hacer algo así

-...

-¡Aw! ¡Te sonrojaste! -molestó riendo- no te preocupes Lan Zhan, lo disfruté totalmente, en realidad había pensado en despertarte con una mamada pero nunca estas en cama cuando despierto así que has dado el primer paso dijo picoteando los labios ajenos varias veces- Er-gege

-¿Mh?

-Te amo

-Te amo -besó su frente sintiéndose complacido por sus palabras y feliz por la aceptación de sus acciones –aún cuando sabía que estaba mal– Te adoro, solo tú -recordó las palabras que había dicho en sus votos cuando se casaron-

-¡Aw! ¡Lan Zhan! -se colgó de sus hombros en un aplastante abrazo- ¡Esposo mío!

Un reinicio que parecía iría más que bien...

Nota: Espero hayan disfrutado de este fic tanto como yo lo hice escribiéndolo. Gracias por leer 😊