El Reemplazo/FINALIZADA

~Capítulo 3~

Capítulo 3: Adiós virginidad
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Estoy acostada en el puff con las piernas abiertas, en verdad estoy asustada pero es la única forma de olvidarme de el. Te odio Fuutaro.

Izuku se para delante mio, quedando arrodillado entre mis piernas y desabrocha mis pantalones con una agilidad impresionante. Verlo así frente mio, sus ojos verdes esmeralda mirándome con excitación me quita el aliento. Me siento muy cómoda mientras me quita los pantalones lanzándolos a algún lado de la habitación.

Pasa sus manos por mis piernas desnudas y gime.-Me estás volviendo loco-,su voz ronca chocando contra mis oídos se siente increíblemente bien.

Lo jalo de los pelos trayendolo hacía mi, nuestros labios se unen en uno mismo. Su lengua roza la mia tentandome. Muerdo su labio inferior indicándole que es hora de que lo haga. En estos momentos lo deseo como alguna vez lo desee a el.

Desesperada, jalo el broche de sus pantalones para quitárselos. Él se levanta y deja que sus pantalones caigan al suelo con su ropa interior.

Díos, está desnudo y su cuerpo es perfecto, cada musculo, todo de el es perfecto.

El vuelve a acercarse a mi, besandome lentamente, besos húmedos llenos de pasión y deseo que me llevan al borde. Su mano viaja dentro de mis panties y el gime en mi boca y me parece el sonido más excitante del mundo.-Ya estas mojada pervertida-,su voz es hermosa, dios mio.

Puedo sentir su duro miembro contra mi muslo y muero por sentirlo en otro lado.

Sus dedos toman ese punto lleno de nervios y lo acarician en círculos, yo levanto mi espalda sintiendo pequeños escalofríos.-¡Oh dios, Izuku! Por favor-,lo deseo, es lo único que pasa por mi mente.

Necesito más.

Como si leyera mi mente, Izuku sube mi camisa hasta donde puede liberando mis pechos, atacandolos con su lengua, masajeandolos con su mano libre.

Esto es mucho, juro que es demasiado.

Queriendo más, lo tomo con mi mano y por un segundo, me asusta por lo grande que es pero las ganas son tantas que el miedo pasa por alto.

-Izuku, por favor-,ni siquiera se lo que estoy pidiendo.

El se separa tan solo un centímetro de mi, sus ojos mirándome el alma, sus dedos aún moviéndose dentro de mis panties.-¿Quieres perder la virginidad con un cualquiera?-,solo puedo asentir.-¿Quieres perder lo más preciado con un desconocido?-,nuevamente asiento.

Me muerdo el labio inferior mientras sus dedos me llevan a la locura.-¡Ah! Sí, quiero sentirte dentro de mí-,mierda, es la primera vez que soy sumisa con alguien. Pero hoy es un día muy especial.

Él se hecha hacia atrás y agarra algo del suelo, lo observo inquieta sacar un condón y ponérselo.

Oh mierda, de verdad haré esto con Izuku Uesugi.

En segundos esta encima de mi entre mis piernas, una ola de miedo me atraviesa pero el me besa alejandola y haciéndome olvidar mi nombre.

Él se posiciona y se separa de mí, mirándome a los ojos.-¿Estás segura?-,su pregunta me toma por sorpresa pero asiento rápidamente.

Izuku me besa y cierro mis ojos, perdiendome en sus suaves y ricos labios.

Pero entonces lo siento penetrarme lentamente, gimo de dolor y lágrimas salen de mis ojos.-Duele-,digo despacio.

El deja besos cortos por toda mi cara.-Shh, esta bien ya va a pasar-,entra un poco más en mi y arqueo mi espalda, siento como si algo dentro de mi se rompiera hasta que me penetra por completo y las lágrimas ruedan por el lado de mi cara.-Bésame-,dice él, está dentro de mi pero no se mueve. Sus besos son mojados, apasionados mientras sus manos tocan mis pechos con delicadeza distrayéndome, devolviendo la excitación a mi cuerpo adolorido.

El no se apura a moverse, solo se enfoca en excitarme aún más, tentando, besando, mordiendo mis labios, mi cuello, mis pechos. El dolof sigue ahí pero es cada vez menos y solo queda la molestia del ardor de que algo se ha roto.

Necesito más, necesito algo y necesito que el se mueva,  ya estoy lista para que se mueva.-Izuku-,gimo en sus labios.

Como si supiera lo que quiero, el comienza a moverse lentamente, el roce arde un poco pero estoy tan mojada que empieza a sentirse delicioso. Oh Dios, la sensación me sobrepasa, nada se ha sentido tan bien en mi vida entera. Dentro, fuera, dentro, fuera.

De pronto quiero que vaya más rápido, más profundo. Pongo mis manos al rededor de su cuello y lo beso con todo lo que tengo, gimiendo y sintiendolo completamente duro dentro de mi.-¡Izuku! Oh Dios, Izuku, más rápido-,gimo sintiéndolo cada vez más profundo.

Izuku sonríe en mis labios.-¿Lo quieres más rápido? ¿Tanto te gusta?-,me penetra profundamente antes de empezar a moverse más rápido.

-¡Oh por Dios!-,gimo sintiéndolo todo.

-¿Ya te olvidaste del aburrido de mi hermano?-,susurra en mi oído mientras me aferro en su espalda.-¿Te gusta sentirme dentro tuyo?-,vuelve a susurrar pero con una voz ronca.

-¡Si!-,puedo sentir el orgasmo venir y gimo tan alto que Izuku me besa para silenciar mis gemidos. Mi cuerpo estalla, olas y olas de placer invadiendo cada parte de mi. Izuku gime conmigo y sus movimientos se vuelven torpes y aún más rápidos. Él se viene y cae encima mio.

Nuestras respiraciones aceleradas hacen eco por toda la habitación. Los latidos de nuestros corazones se sienten claramente a través de nuestros pechos pegados.

Mientras los últimos rastros del orgasmo me dejan, vuelve la claridad a mi mente.

Él me besa y se acurruca al lado mio.-Buenas noches princesa-,dice para cerrar los ojos.