𝑭𝒐𝒓𝒃𝒊𝒅𝒅𝒆𝒏 𝑳𝒐𝒗𝒆 ♡ || Madelaine Petsch And You ©

Episodio 03

POV MADELAINE
Entre a la mansión, y fui directo a la sala, donde encontre a Vanessa, sabia a que venia, y juro matar al infeliz de su novio. Me acerque a ella y le tape los ojos.

Mads: ¿Quién soy?- dije tratando de imitar una voz mas gruesa, pero al parecer no me salio ya que ella rió.

Vanessa: Madsy -dijo riendo y volteó, la abraze y me senté a su lado, estábamos en el sofá.

Mads: se porque estás aquí- dije seria, mirándola fijamente, ella agachó su cabeza.

Vanessa: me engañó de nuevo, lo encontré con otra- dijo con su voz quebradita, me acerque y la volví a abrazar.

Mads: juro que matare al infeliz de...- no terminé ya que me tapo la boca.

Vanessa: no lo nombres, vine aquí para olvidarme de todo y divertirme, necesitaba contártelo porque eres mi mejor amiga, y por eso vine antes de la hora que dijimos que nos juntaríamos- explicó, yo sonreí y asenti.

Empezamos a conversar, Papá estaba con Travis y creo que mi Mamá estaba viendo algo de la empresa, nuestra empresa es de moda por cierto, una de las mas famosas.

POV TN
Estaba con Magdita, conversando sobre cosas que le gusta hacer y lo que me gusta a mí, se estaba riendo por algunos chistes que decía. Creo que había pasado mucho tiempo ya que estaba dando la hora de bajarla para que todos almuerzen.

TN: Magdita, tiene que tomar su pastilla- dije y ella hizo una mueca, yo reí.

Magdalena: no es necesario, sigamos conversando, esas pastillas no sirven, parece que me quieren volver drogadicta- dijo, mientras yo reía.

TN: tiene que tomarlas, para que esté bien, ya no puedo consentirla más, le tenía que leer la Biblia y salí contándole chistes- dije mientras sacaba sus pastillas, ella río bajito.

Magdalena: niñita, me encantaría que fueras mi nieta, ni siquiera Mads me hace chistes, no cuando le dicen que me lea la biblia, no me gusta, llevo muchos años haciéndolo.- explicó, yo le di una sonrisa y le extendí la pastilla junto al vaso con agua.

TN: seré su nieta, no de sangre pero quizá de corazón- le dije, ella sonrió mientras asentía- ahora, tome su pastilla que tenemos que bajar, ya es hora de almorzar.

Magdalena: está bien- dijo y se tomó la pastilla -sería lindo que tú y mi cerezita fueran amigas, o algo más- susurró lo último pero lo escuché.

TN: em, la señorita Madelaine es como mi jefa también, no podríamos ser amigas- dije y ella negó.

Magdalena: se que lo serán, y las mejores, bueno, amigas no, hermanas, con tu humor y su sarcasmo, ustedes se llevarían muy bien- dijo sonriendo -hasta podrían ser pareja, eres una buena niña.

TN: creo que la falta de comida la hace alusinar Magdita- dije riendo.- no podríamos ser nada, ni pareja, ella tiene novio, y yo soy una simple empleada de esta casa.

Magdalena: creo que sí leeré la biblia, pero para comunicarme con dios y pedirle que sean parej...- no terminó ya que tape su boca, con cuidado claramente.

TN: nada de pedirle a Dios esas cosas, Magdita, si lo hace le leeré la biblia hasta que duerma, pretende utilizar la invocación para juntar a su nieta y a mi acaso- dije y, rápidamente me arrepentí, creo que le di una idea.

Magdalena: no sería mala idea, podría hacerlo.- dijo y reí negando.

TN: vamos, tengo que llevarla con los demás para la cena - dije cargandola y posicionandola en su silla de ruedas.

Sin más, baje, no por las escaleras, tuve que ir por un pasillo especial para que Magdita pueda pasar con su silla de ruedas. Al llegar a la sala, pude ver a una chica morena, muy linda por cierto, sin darme cue ya crucé mirada con ella y la mini Petsch.