nueve

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Cerrando las puertas de su casa detrás de él, Zayn se sacó los zapatos y arrojó sus llaves en la mesa de la entrada. Su casa no era pequeña bajo ninguna circunstancia, pero era pintoresca. Era la casa perfecta para él y su familia, y era incluso más perfecta cuando Niall estaba ahí.

Solo habían pasado doce días desde que Niall se había enterado del compromiso, en dónde Zayn se había enterado subsecuentemente, pero ya podía sentir algo cambiando.

No era dramático, ni un cambio grande, pero estaba ahí. La ligera variación en la actitud de Niall hacia Harry y los otros dos con quienes continuaba pasando bastante tiempo cada día en la escuela.

Seguro, los almuerzos aún eran exclusivamente de Niall y Zayn, al igual que las mañanas y las noches, pero podía notar como Niall ya no detestaba estar cerca de ellos. Sabía que tenían sus clases juntos mientras Zayn no compartía ninguna con ellos, y por mucho que confiara en Niall, sabía que esos tres debían estar planeando algo.

Niall no era confiado bajo ninguna circunstancia, pero podía llegar a ser ingenuo. Por más hastiado y cínico que fuera, podía ser ingenuo. Quería ver lo mejor en las personas, simplemente era el tipo de persona que él era. Caía en trampas fácilmente cuando venían de personas que él no esperaba. No caía en los trucos de su familia, pero estos tres muchachos estaban probándose a sí mismos fuera del negocio.

Estaban conectando con él en un ambiente normal, social y a nivel personal, así que Niall estaba rápidamente siendo cegado por ellos.

Y eso estaba matando a Zayn. Sabía que algo malo iba a pasar, simplemente no sabía qué con exactitud, ni sabía cuándo pasaría.

Solamente tenía que seguir mostrándole a su novio que estaban hechos el uno para el otro. Tres años y medio en total, a pesar de las partes malas, siempre habían sido tan buenos juntos. Incluso cuando intentaban mantenerse alejados, no podían.

Y Zayn solo tenía que mantener sus dedos cruzados y rezar que lo mismo no ocurriera con Niall y Harry.

Zayn no sabía quién era sin el muchacho junto a él. Ni siquiera sabría por dónde comenzar a reconstruir su vida si Niall se enamorase de Harry y decidiera continuar con el matrimonio.

Siempre se había enorgullecido de ser el tipo de persona que no necesitaba a nadie más que a sí mismo para vivir y disfrutar de su vida, pero luego Niall apareció y nada fue lo mismo.

Niall, quien estaba tan lleno de ira y emociones reprimidas que le tomó meses para poder siquiera sincerarse acerca de su situación en casa.

Niall, quien ni siquiera sostuvo sus manos por un año entero de ellos durmiendo juntos porque estaba tan asustado de dejar a alguien entrar que preferiría tener sexo a hacer algo tan pequeño e íntimo como entrelazar los dedos con los de alguien más.

Niall, quien tan solo tenía catorce cuando comenzaron a dormir juntos, mientras Zayn había cumplido los quince justo después, pero tenía suficiente rabia y dolor y odio por su vida que bien pudo haber sido un adulto. Ningún niño debería tener tanto embotellado dentro de él.

Niall, quien estaba tan avergonzado de sus padres que no quería que Zayn los conociera. Nunca.

Niall, que había robado el corazón de Zayn dentro de pocos meses, pero no se atrevió a dejar que el suyo perteneciera a Zayn durante un año.

Niall, con quien Zayn quería casarse con cada célula de su cuerpo.

No podía perder a Niall. No podía. Nunca creyó poder ir tan lejos como suicidarse si no tenía a Niall, pero la vida no valía la pena vivirse si no estaba con él.

contrivanceWhere stories live. Discover now