Why did you do it? [YIZHAN]

f σ u r

—Podemos solucionar esto, somos un equipo ¿recuerdas? —recitó aquella pequeña frase que fue parte de sus votos, tomando la gran mano de Yibo entre las suyas, creyendo así que podría sublevar esa idea de la cabeza de su aún esposo.

—Dije que se me había pasado por la cabeza, no que me quiero divorciar de ti, te amo, eres el amor de mi vida, pero no podemos desconfiar tan a la ligera el uno del otro, porque así como yo tuve confianza en ti quiero que tú la tengas en mi y que volvamos a ser ese equipo, debemos trabajar en reforzar la confianza, juntos —pese a lo que creyó Yibo entrelazó sus dedos sobre la mesa.

>>— Me han llegado invitaciones a entrevistas con grandes televisoras, he negado cada una de ellas porque no quiero que las mismas personas que me acusaban ahora aboguen por limpiar mi imagen con entrevistas innecesarias, no necesito darle explicaciones a nadie —a pesar de que aquellas palabras no fueron dichas con mala intención, Zhan se sintió mal por no haber confiado en él, tenía todo en contra suya y la única persona en la que se refugio también le dió la espalda. Se sentía una completa mierda.

—Es la mejor decisión que puedes tomar ahora Bo-di, ellos solo quieren aumentar el morbo entrevistándote, todo lo que se tenía que decir ya se dijo en la audiencia. Cambiando de tema hay alguien que estuvo muy emocionado toda la mañana mientras lo vestía —Yibo dirigió su vista hacia el pequeño cochecito junto a su esposo del que Xiao Zhan tomó a su bebé, quien tenía los ojos muy abiertos de manera graciosa como si analizara todo el lugar atentamente - Nuestro Suǒ estaba emocionado de ver a papá, ¿cierto cariño? -el pequeño bebé en sus brazos soltó algo parecido a un tierno gritito mientras movía rítmicamente sus piernitas derritiendo el corazón de sus padres.

—Nuestro hijo es precioso igual que tú —habló el azabache mientras se ponía de pie para sujetar ahora él a su hijo provocando un sonrojo en su esposo, quien a pesar de los años que llevaban juntos aún lo sorprendía con sus reacciones a los halagos que le decía —Mi pequeño ¿Estás siendo amable con papi Zhan? Espero que lo hayas dejado dormir, esta noche iré a casa y cuídaré de ambos, de mi hermoso esposo y de mi pequeño hijo —la sonrisa que se formó en el rostro de ambos al conectar su mirada era tan brillante que sería capaz de competir con la intensidad de la luz del sol.

—¿Hoy irás a casa? ¿En serio? —la emoción en su voz era evidente.

—Claro que si cariño, he estado ya mucho tiempo lejos de ustedes, me perdí de mucho —el tono afligido que usó para decir aquella hizo que Xiao Zhan supiera que se refería al nacimiento de su hijo.

—Aún faltan más cosas de las que podrás ser parte, como su primera palabra o sus primeros pasos. —Zhan se acercó y abrazó a su esposo, quien aún tenía a su hijo en brazos produciendo así una tierna escena para todos los comensales que los veían.