YOU, another YOU & ME - JinTae [Omegaverse]

❖ FINAL ❖

🐺🦊

La tarde había dado paso a la noche, dejando ver algunas estrellas en el manto nocturno, para cuando Taehyung regresó a casa. Subió al elevador, sintiéndose mucho más tranquilo que en la mañana, al salir de allí como un torbellino, lleno de problemas y preocupaciones.

Ahora, se encontraba con las ideas más claras, y la visita a su madre, fue el principal motivo de ello. La mujer, en su sabiduría, supo aconsejarle, haciéndole ver su error al encasillar a su alfa como lo hacía con su padre, aun cuando éste no lo merecía en absoluto.

También hablaron del cachorro y las cosas fundamentales que debía conocer, para sobrellevar el embarazo de la mejor manera. Taehyung escuchó obedientemente, y aceptó las palabras de su madre sin discutir, porque estaba determinado a dejar atrás sus miedos, para comenzar a vivir libre de los estigmas que él mismo se impuso inconscientemente.

Al llegar a su piso, alzó la tapa protectora y digitó la clave, hallando un escenario inesperado en el interior de su hogar.

Todo mundo se encontraba reunido allí, y el pelirrojo no tenía idea de porqué. Namjoon y Yoongi intentaban darle ánimos a un angustiado Seokjin que pasaba insistentemente su mano por el cabello, volviéndolo un desastre, mientras que Jimin tecleaba en su celular, llevando éste a su oreja para hablar. Incluso Hoseok junto a su alfa, Jungkook, estaban allí, haciendo llamadas al igual que Jimin.

Como nadie había notado su presencia, al estar sumidos en sus propios asuntos, Taehyung tuvo tiempo de caminar hasta ellos, frunciendo el ceño por las indeseadas visitas, como lo era su cuñado.

—¿Qué está pasando aquí? —preguntó, llamando la atención de todos, quienes voltearon automáticamente hacia él.

Seokjin, con sólo verlo allí, corrió a su encuentro, alzándolo del piso en un abrazo desesperado, como si el chico hubiera regresado de la vida. Taehyung soltó un chillido de la impresión, preguntándose qué demonios le pasaba a su alfa, para mostrarse tan cariñoso frente a los demás, sabiendo de sobra que él no gustaba de las demostraciones afectivas en público.

—Lobito, me tenías tan preocupado —dijo el alfa, una vez que lo regresó sobre sus pies, acunando su rostro e inspeccionándolo en busca de alguna herida o señal de daño. —¿Dónde estabas? —cuestionó, con sus ojos enrojecidos y brillando en lágrimas sin derramar. —Te llamé muchísimas veces, pero nunca respondiste... Y yo... no entendía qué pasaba, porque te sentí tan desesperado, que...

—Jinnie... —Taehyung sintió la angustia palpitar en su pecho, siendo recién consciente de lo mucho que lo que le pasaba a él, también afectaba a su esposo. —Nada pasó, estoy perfectamente —sintió la necesidad de tranquilizarlo.

—Cariño... —Seokjin pegó su frente a la del omega, respirando nuevamente, como si el no tenerle, le robara la vida, y el sentirlo entre sus manos, se la regresara. —Por favor, sé sincero conmigo... si hice algo mal... si, de alguna manera, no te sientes feliz conmigo, yo... puedo solucionarlo, te lo juro —dijo, desde su preocupación, sin comprender qué era lo que tenía al omega tan triste. —Pero, dímelo.

Con aquellas palabras, el pelirrojo se rompió una vez más, aunque, ésta vez, sus lágrimas no contenían miedo o preocupación. Él sólo estaba inmensamente feliz de que la Madre Luna, el destino o lo que sea que los había unido en sus vidas pasadas, hubiera puesto a un alfa como Seokjin a su lado. Sus brazos se aferraron con fuerza al cuerpo de su marido, enterrando su rostro húmedo en la curva de su cuello, sintiéndose cálido y reconfortado en su aroma.

—Estaba tan preocupado, que me imaginé lo peor al no tener noticias tuyas —detalló. —No te podía encontrar, y no cogías mis llamadas... —acarició su espalda de arriba abajo. —Hoseok me dijo que te habías ido temprano de su casa, pero no estabas en ninguna parte... Lobito, si te hubiera perdido, yo me muero...