Bullying (BaeHun) CIX

🥀Capítulo 66🥀

—Maldita sea, SeungHun, lo que hago por ti — Jadeó.

HyunSuk siguió trepando con ayuda de la cuerda hasta llegar a la ventana de la habitación de SeungHun, respirando agotado. Él hacía ejercicio, claro, pero una cosa era hacer ejercicio y deportes y otra muy diferente era escalar hasta el primer piso de una mansión.

En definitiva no pensaba hacerlo de nuevo.

—Al menos no estás en el último piso, por allá por el cuarto, porque habría sido peor — Bufó.

Sacó un estuche que contenía varios destornilladores de su mochila, revisando cuál de ellos encajaba con los tornillos de la ventana de SeungHun. No podía ver nada dentro de la habitación ya que las cortinas tapaban cualquier cosa dentro de ella, así que solo se dejó guiar por su olfato - que le decía que SeungHun estaba ahí.

Con cuidado, quitó una de las ventanas, adentrándose en la habitación para luego dejar la ventana en el suelo. La habitación estaba en total oscuridad, apenas y podía ver algo, pero logró notar un bulto sobre la cama, por lo que supuso que ahí estaría SeungHun.

—Maldición, Hun, todo esto apesta a tristeza agria, nunca había olido que dejaras salir este tipo de olor.

Jaló las sábanas que cubrían al omega del exterior, abriendo la boca al encontrarse con algo muy extraño.

—¿Eso es... un nido?

Nunca había visto uno en persona, él solo estaba con omegas para follarselos y ya, nunca tuvo que lidiar con la parte sentimental, así que esto era nuevo para él.

SeungHun tenía la mirada pérdida, acomodado entre sus propias sábanas que formaban un nido, todavía tenía la misma ropa del viernes, y estaba seguro que apenas y había ido a baño a hacer sus necesidades básicas, pero estas al parecer no incluían una ducha.

—Hun, ¿qué diablos? Vamos, sal de ahí.

Acercó su mano para intentar tocar a SeungHun del hombro, pero la mirada que le dirigió el omega le hizo entender que estaba metiéndose en su espacio personal - y que no era de su agrado que hiciera eso.

Les habían enseñado que los nidos de los omegas eran algo muy delicado, que a menos que el omega lo permitiera, no debían acercarse o las cosas podrían resultar muy mal, así que retrocedió un paso, alzando ambas manos.

—Vale, vale, no me acerco ni te toco.

La mirada de SeungHun volvió a divagar, por lo que no le quedó de otra que buscar una silla para sentarse al lado del omega, manteniendo una distancia prudente.

—Supongo que no quieres hablar, ¿verdad?

Como esperaba, no tuvo respuesta.

—Uh, le dije a los chicos que vinieran más tarde, tienes que animarte de algún modo, SeungHun, no es sano que estés así.

Esperaba que SeungHun no se pusiera a la defensiva cuando vinieran sus amigos más cercanos en unas horas, había llamado solo a unos pocos, no quería incomodar a SeungHun con tanta gente, pero igual creía que su amigo debía compartir sus sentimientos y no guardarse todo.

—No voy a darte un reproche de que todo esto está mal o decirte que odio al imbécil de JinYoung, prefiero que te despejes un poco la mente. ¿Te importa si abro las ventanas? Este olor me está mareando.

Aunque no tuvo una afirmación, tampoco tuvo una negación, así que supuso que no importaba tanto, por lo que se levantó, echó hacia un lado las cortinas y abrió la ventana que se mantenía en su lugar, ya que la otra seguía en el suelo.

La luz natural entró a la habitación, lo que hizo que SeungHun gruñera y girara su cuerpo, dándole la espalda a la ventana.

Tomó la silla y la arrastró hasta el otro lado, sentándose de nuevo al lado de su amigo.

—¿Prefieres que te hable yo?

Aquella mirada distante seguía ahí, lo que le preocupaba mucho.

—Bah, voy a hacerlo de todos modos. ¿Sabes? Creo que las cosas con YongHee podrían ir bien, no sé, al que no le agrada mucho la idea es a ByoungGon, pero eso ya me lo esperaba, igual YongHee dijo que le explicaría las cosas.

Estuvo un buen rato hablando con SeungHun - bueno, él hablando y SeungHun en un sepulcral silencio - hasta que dio la hora del almuerzo, le abrió la puerta a DongYoung, quien quiso lanzarse a abrazar a SeungHun, pero se contuvo.

—Gracias por esto, HyunSuk.

—No te preocupes, es mi mejor amigo después de todo — Sonrió, llevaban tantos años de conocerse que los Kim le permitían a HyunSuk hablarles informalmente —. Algunos de los chicos vendrán más tarde, creo que eso podría animarlo.

—Uh, mi pobre bebé se ve mal... ¿y eso es un nido?

Incluso siendo un omega, DongYoung nunca había visto uno, nunca tuvo que hacer uno, pero que sabía en qué consistía uno y por cuáles razones un omega hacía un nido.

Tragó saliva, entregándole la bandeja con el almuerzo a HyunSuk.

—Has que coma, por favor.

—Sí, claro.

HyunSuk cerró la puerta con el pie, caminando hasta llegar a la silla donde había estado sentado, colocando la bandeja sobre sus piernas.

—Bien, esto puede ser fácil o difícil, pero de que vas a almorzar un poco, lo vas a hacer. Ahora, ¿comerás por tu cuenta como un chico grande, o tendré que darte yo mismo la comida haciendo soniditos de avión?

—No tengo hambre — La voz de SeungHun salió rasposa, casi que en un roto susurro.

—No me mientas de esa forma tan descarada, sé que no has comido nada desde ayer, o hoy en la madrugada, no lo sé, pero el punto es que ya pasó mucho desde que comiste, así que no tienes excusas. Vamos, a comer.

Luego de estarle insistiendo por, al menos, quince minutos, finalmente logró que SeungHun aceptara comer un poco, por lo que le dejó la bandeja en la cama con mucho cuidado de no tocar ni un poco el nido.

SeungHun comió más de la mitad del almuerzo con HyunSuk regañándolo de por medio para que se comiera todo, luego volvió a acostarse, envolviéndose en una fina sábana, dejando solamente su cabeza al descubierto.

—Te dejo pasar el que no te comas  todo por tu estómago necesita acostumbrarse a comer de esta forma de nuevo, pero en la cena tendrás que comer un poco más, ¿eh?