Capítulo 11

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-Ese imbécil estuvo jugando doble desde que nos fuímos a Europa. - dice Zabdiel, pero mi mirada sigue fija en aquellas cuatro fotos

En dos de ellas, estaba Javier junto con la mano derecha de Perlongo... Con Pedro. Las otras dos, sólo lo muestran entrando al bar, lo que me es suficiente para confirmar lo que decía Zabdiel.

Miérda, al instante puedo sentir como un fuego se va a mi cabeza. Mientras que unas inmensas ganas de matarlo con mis propias manos aparecían con la velocidad de una flecha, mi mano va empuñando aquellas fotos. No esperé esto de ese imbécil; carajo si aún sigue con vida es porque Jade me lo pidió... ¡¿Quién miérda se cree?!

-¿Desde cuándo sospechabas esto? - me levanto del escritório y tiro las fotos en el suelo

-No desde hace mucho. Samuel me había informado que ese hijo de puta estaba muy extraño... Preguntaba de más, quería ser participe en cosas que no eran de su incumbencia; quería saber de los negocios, y eso obviamente ya da muchas sospechas. - su mandíbula se tensiona - Ese cabron sabe perfectamente donde están las casas, el armamento, cuanta gente tenemos... ¡Si se le hubiese dado la gana ya estuvieras bajo tierra!

Alza la voz.

Intentaba calmarme, ahora mismo sólo quería partirle la cabeza en mil pedazos... Pero tenía que pensar. Ese imbécil sabe que Jade está aquí, miérda no la puedo poner en peligro.

-¡¿Qué carajos vamos a hacer?! - pregunta Zabdiel desesperado - Nos pueden atacar en cualquier momento

-Ya lo hubiese hecho... - hablo, para luego mirarlo fijamente - Es probable que Perlongo ya sepa que estoy de vuelta, y si habló de más, también debe saber que Jade está conmigo

-Vuelvo y pregunto, ¿Qué carajos vamos a hacer? - su ceño se frunce

-Triplica la seguridad, compra más armas; carajo, necesito que nuestra gente este forrada hasta los huevos... Por ahora, la prioridad es tener a salvo a Jade. Manda a vários hombres para que vigilen su habitación, otros que alisten los autos por si tenemos que salir de aquí... Y sobre todo, busca a ese imbécil, tenemos que callarlo de una maldita vez

-Perfecto. - asiente y sale rápidamente de la habitación

Esto no podía estar pasando ahora; todo estaba fluyendo de la mejor manera, tengo a Jade nuevamente junto a mí... Carajo, este era el peor momento para comenzar esta maldita guerra.

Pero eso no significa que vaya a quedarme quieto, si ese hijo de puta se acerca a Jade... Yo mismo lo hago ir al maldito infierno aún estando con vida. Sabe muy bien que soy capáz de joderlo, así que tiene muy claro con quien se metió. Si Perlongo ya está enterado del embarazo, estoy completamente seguro que quiere joderme por ahí. Pero si se va en contra de mi familia, que tenga por seguro que tendrá la cabeza de su madre frente a la maldita puerta. Porque no pienso dejar que acabe conmigo, no voy a permitir que se acerque a mi gente.

Saco rápidamente el telefono del bolsillo de mi pantalón. Allí busco un número telefónico, y le llamo a quien estoy seguro que me ayudará.

Llamando a Richard C.

-¿Qué pasa? - contesta al otro lado de la linea

-Sé que habíamos quedado en que atacariamos en unas semanas. - digo sin rodeos - Pero esta miérda va a explotar en cualquier momento

-¿Qué carajos pasa? - pregunta confuso

-Necesito mi parte del trato... Necesito tú ayuda con esta guerra que se me viene encima. - mi mandíbula se tensiona

El Diablo || 1,2 TEMP Where stories live. Discover now