Incondicional - SeroMina

Capítulo 2

Mina lo miraba muy sorprendida. Sero nunca le había dado señales de que sintiera algo por ella. Lo apreciaba mucho, pero no sentía algo romántico por él.

—Oh —dijo al fin— Yo... me siento halagada, pero no puedo corresponder tus sentimientos. Perdón.

Sero sonrió, aunque esa sonrisa no se veía en su mirada.

—Ya me lo esperaba, pero igual quería que sepas de mis sentimientos. Todavía podemos ser amigos, ¿no?

—Eh, sí. ¿Vas a estar bien con eso? —Lo miraba un poco preocupada.

—Sí, me gusta mucho tu compañía.

—Ok.

Se sentía un poco rara recibiendo ese tipo de comentarios ahora que ya sabía acerca de sus sentimientos. Sero podía decir que todo estaba bien, pero ella sentía que las cosas ya no iban a ser lo mismo.

Para la tranquilidad de Mina los días posteriores transcurrieron con normalidad. Sero la trataba como si no hubiera pasado nada y ella lo agradecía en silencio. Se había sentido muy incómoda recordando el momento que tuvieron a solas.

Pero como si estuviese metida en una novela de romance, cosas raras empezaron a pasarle y Sero siempre estaba ahí para salvarla. Parecía que el mundo se había conspirado en su contra.

Un día estaba en el comedor caminando junto a Toru, llevando una bandeja con su almuerzo. Iban charlando con tranquilidad cuando pasó un chico que tenía un don de super velocidad. Al pasar tan rápido golpeó su bandeja y le tiró encima un vaso de jugo que llevaba. La camisa de su uniforme quedó empapada y se le pegó al cuerpo marcando su figura.

Gritó avergonzada y se tapó como pudo. Toru se giró para gritarle al muchacho que había pasado corriendo mientras agitaba su brazo. Al escuchar los gritos todos se dieron vuelta a ver qué pasaba. Mina estaba encorvada tratando de esconderse. Maldecía internamente por no llevar su blazer.

En cuanto vio lo que pasaba Sero se levantó de su silla y le ofreció su propio blazer. Ashido le agradeció con una sonrisa y él hizo un esfuerzo por no hacerse ilusiones.

Un par de días después casi muere aplastada durante los entrenamientos de la tarde. Kirishima y Midoriya estaban en la parte alta del gimnasio golpeando la misma pared de roca. Mina estaba debajo intentando nuevas maneras de lanzar ácido.

No se dio cuenta cuando la pared se empezó a desmoronar. Uraraka vio lo que pasaba y le gritó para que se mueva, pero en lugar de correrse miró hacia arriba. De repente sintió como algo la envolvía y la jalaba hacia atrás.

Un montón de rocas cayeron justo donde ella estaba parada. Un poco conmocionada miró qué era lo que tenía envuelto alrededor del cuerpo. Eran las cintas de Sero que reaccionó rápido al verla en peligro y ahora se acercaba preocupado preguntándole si estaba bien. Parpadeó intentando salir del shock y respondió de manera afirmativa.

Parecía que le había llegado el karma por todas las cosas malas que había hecho en su vida, porque le seguían pasando cosas insólitas.

El último día se clases de esa semana se rompió la falda de su uniforme. Más precisamente el cierre. Para seguir sumando puntos a su mala suerte, no había nadie cerca a quien pudiera pedirle ayuda. Dado que no podía estar con el cierre roto, porque se le caía la falda, decidió ir hasta los dormitorios para poder cambiarse.

Iba caminando rápido, sosteniendo con sus manos la pollera. Sero que también se dirigía al aula, se dio cuenta que iba caminando raro. Aprovechó que el timbre todavía no había sonado y se acercó a ella para preguntarle si le había pasado algo.

—Ashido —La llamó antes de alcanzarla. Mina se dio vuelta enseguida— ¿Estás bien? ¿Por qué caminas así?

—Es que tuve un problema con mi uniforme y estoy yendo a cambiármelo. Se me rompió el cierre de la falda.

Lo dijo muy tranquila, no le daba vergüenza hablar de algo así con un amigo. Era un accidente que cualquier persona podía tener. Sin embargo, Sero sí se sintió avergonzado. No pensó que quizás podría tener algún problema femenino. Hubiera sido mejor avisarle a alguna de las chicas para que le pregunten en lugar de él. Pero ya estaba ahí y tuvo una idea.

—¿Querés que te dé un poco de cinta? Al menos vas a poder asistir a clase. Mi cinta es muy resistente —dijo con una sonrisa arrogante, tratando de alejar el nerviosismo que sentía. Mina se rio, contenta de que su amigo se tomara a bien la situación y no se pusiera nervioso ante algo tan común como un cierre roto.

—Eso sería genial, así no tendría problemas con Aizawa por ausentarme.

Sero cortó un pedazo de cinta y se lo ofreció. Ashido se encargó de pegarlo a su falda y sonrió feliz al ver que efectivamente, la cinta era muy resistente.

Luego se encaminaron al aula antes de que el profesor llegara, charlando sobre la próxima clase.

Mina pensaba que era muy extraño como esa semana habían pasado cosas tan raras y Sero siempre estaba ahí para ayudarla. Cualquiera pensaría que el chico la miraba todo el tiempo para estar al pendiente de lo que le pasaba. Pero ella no había notado ningún cambio en su relación desde que él se confesó y ella lo rechazó. Al principio estaba preocupada de que su amistad se arruine, pero ahora estaba tranquila al ver que Sero se había tomado las cosas con calma y que todo seguía igual que siempre. Quizás Sero solo estaba confundido. De cualquier forma, estaba feliz de tener un amigo como él.

Hola, ¿cómo va la cosa? Acá estamos con el capítulo 2. Tardé mucho en actualizar porque el capi anterior no tuvo ningún voto y me bajoneó un poco eso. Entonces centré mi atención en otras historias. Pero este fic me gusta mucho, así que, aunque nadie lo lea o lo vote, voy a seguir actualizando 💪

Bueno, espero que te haya gustado este capítulo. Hice un gif bonito, si querés que haga un tutorial explicando cómo hacer uno igual podés decirlo en los comentarios. Es super fácil 😊

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Nos vemos la próxima.