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Malec abrió sus ojos mientras se levantaba pensando en preparle el desayuno a sus amigos, aún pensaba en la otra noche, aquel tal Adam había sido tan amable llevándolo personalmente a su casa en taxi... Él y el chico habían caminando un poco luego de que Maly lo soltara, miró de perfil a Adam, era lindo. Mucho más que Thomas a decir verdad, Adam tenía una nariz recta y perfecta, una piel lisa y brillante sin granos ni arrugas y sus cejas eran más oscuras que su cabello color rubio caramelo. Sus rasgos eran delicados, le sacaba casi dos cabezas y se veía cómo esos modelos que veía en su teléfono en pinterest. Malec pensó que se sentiría ser así de lindo por un día, se lo veía tan seguro de sí mismo... Tan... perfecto.

Se miró al espejo, él apenas llegaba al metro sesenta y ocho, era bajito para ser un chico y su cuerpo era algo rechoncho debido a su gran culo y barriga abultada... Y su piel, bueno le gustaba su piel naturalmente bronceada, su cabello siempre era de algún color estridente aunque ahora lo llevaba de verde menta, pero en general sus rizos siempre le habían gustado... Sus ojos eran lindos, aunque demasiado de chica, tenía largas pestañas negras tupidas y labios rechoncho muy poco masculinos debido a su madre latina.

Miró a su alrededor, un chico así cómo Adam debía vivir en un lugar moderno y sofisticado, Malec tenía su habitación lleno de plantas y un estilo hippie, con telas colgadas de sus paredes...

Escuchó muy lejos a Britney Spears, casi imperceptible, Demi debía estar ya despierto, a diferencia de Berey y él, Chase y Demi si podían escuchar, asique a menudo ponían música y hacían a Chase que apoyara su mano contra el parlante e intentará moverse al ritmo.  Caminó hacia el baño topándose con Chase saliendo de él ya listo para ir a la fábrica, su amigo apenas le sacaba unos centímetros y su cabello era naturalmente rubio, sus ojos eran cafés y su piel rosada. Era delgado y su figura lo hacía ver más bien cómo una mujer. Este le sonrió y lo saludó bajando las escaleras.

Luego de cepillarse los dientes y arreglar su cabello bajó para ver a Berey riendo de Demi que bailaba cómo una diva. Barey era el más masculino de los cuatro, tenía grandes músculos y su cabeza estaba casi rapada, su cara era tosca y de mandíbula fuerte, a diferencia de los otros tres, era bisexual y había terminado hace algún tiempo una relación de tres años, aún extrañaban a la chica a veces, era divertida y también era sorda...

Barey y Chase tenían veintiseís años ambos y  Demi era el más mayor con casi treinta y uno. Demi era alto y delgado con grandes lentes redondos cayendo por su nariz, de cabello ondulado y negro atado siempre en su nuca, era florista y se encargaba de decorar toda la casa con plantas y flores de estación.

Barey y Chase se callaron cuándo entraron y ambos lo saludaron y comenzaron a hablar en lenguaje de señas.

<< Buenos días abejita, ¿ya vas  a decirnos quién era aquel chico?>>

Maly rodó sus ojos, se encogió de hombros y caminó hacia la cocina para hacerles  su desayuno. Ambos lo miraron curiosos, mientras preparaba té y café suspiró.

<<Ya les dije, es el ex-novio de Thomas, Adam...>>

<<¿Él que te regaló la ropa?>> Barey alzó una ceja sorprendido.

<<Sí, me lo encontré en el distrito dónde comienza Villa Marie...>>

<<Vaya, debe tener dinero... ¿Qué hacías ahí?>>

<<Pensé que quizás podría conseguir algo por la zona...>>

<<¿Hablaron? ¿Sabe lenguajes de señas? >> Demi mordió su labio sonriendo.

<<No, pero usé mi libreta... >>

<<¿No intentaste hablar...?Maly te dijimos debías intentarlo...>>

<<No lo haría delante de un desconocido...>>

Siguió cocinando mientras Demi y Barey se miraban, Chase apareció luciendo enojado mientras suspiraba mirando su teléfono.

<<Mi estúpido jefe quiere vaya ahora mismo a la fábrica, al parecer quiere urgente unos trajes>>

Chase y su jefe se llevaban realmente mal, su jefe era el dueño de una de las fábricas más famosas pret a porter de Canadá, obviamente ignoraba la existencia de uno de sus tantos patronistas que era Chase pero desde luego el chico lo aborrecía por completo, aunque siempre Malec había pensado que quizás lo que sentía era otra cosa...

Sirvió el desayuno a sus amigos mientras preparaba la masa de sus galletas, había pensado que sería una buena idea vender galletas en algunos parques cercanos a la hora del almuerzo, hoy haría un día cálido asique le vendría bien caminar dejando curriculums y de paso vender algunas galletas.

Incluso quizás si juntaba el suficiente dinero podría hacer una cena especial el fin de semana.

Todo era posible, incluso soñar con tener un trabajo bien pagado.




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⏰ Última actualización: Sep 11, 2022 ⏰

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