Fate: Sword Order

Capítulo 12 - La Pucelle: Parte VI

Ritsuka aún tenía que decidir sobre la naturaleza de su más reciente Servant, Sieg, pero no había duda de que estaba comenzando a desarrollar un cierto nivel de curiosidad. Por supuesto, cualquiera podía ver cuán diferente actuó Sieg alrededor de Jeanne hasta el punto de que Romani especuló que los dos podrían conocerse por sus leyendas. Por supuesto, no encontraron datos sobre figuras históricas con el nombre de Sieg que vivieran en Francia.

Realmente fue un misterio.

En cualquier caso, Ritsuka no dudaba de sus Servants, y Sieg parecía absolutamente seguro de que la dirección hacia la que estaba llevando a todos los llevaría al Cazador de Dragones en esta ciudad.

Ritsuka decidió contener su curiosidad y confianza en las intenciones de su Servant a quien Jeanne y Mash ya estaban siguiendo.

"El Cazador de Dragones debería estar allí en ese edificio", dijo Sieg, señalando una estructura en ruinas que se asemeja a lo que una vez fue una ciudadela fortaleza de Lyon. Sus cimientos de piedra estaban agrietados y carbonizados por el calor del fuego. Los alrededores cercanos, nada más que ruinas.

Jeanne asintió, avanzando mientras Ritsuka se tomaba un momento para recuperar el aliento y Mash lo sostenía.

"Tenemos que darnos prisa", advirtió Mash, con los labios fruncidos mientras sus ojos se movían de izquierda a derecha en busca de signos de muertos vivientes o wyverns. "Este lugar no es seguro para el Maestro."

"Tienes razón, Mash," el tono solemne de Romani sonó con un pitido de la línea de transmisión de Chaldea. "Se han detectado numerosos hostiles alrededor de su ubicación. Me gustaría ser más preciso, pero estoy haciendo todo lo que puedo por mi cuenta ya que las manos de Da Vinci están demasiado ocupadas monitoreando las cosas en el lado de la Directora. Solo tengan cuidado y salgan de allí tan pronto como hayan terminado".

"Entendido," respondió Ritsuka mientras empujaba a Mash a su lado y se ponía valiente por ella. "Estaré bien. Necesito que estés allí con los demás para ayudarlos en caso de que pase algo."

Mash intentó protestar, pero Ritsuka también la golpeó con fingido vigor a pesar de su cansancio. "Estaré justo detrás de ti."

Los labios de Mash se crisparon en evidente descontento y preocupación de que estuviera poniendo a los demás antes que a sí mismo, pero ella asintió, los mechones de su cabello rozaron su rostro y luego los empujó detrás de la oreja mientras corría hacia adelante.

Con Mash ya no mirando, Ritsuka permitió que la fatiga de tanto correr se mostrará, pero aun así logró mantenerse al día con su fuerza de voluntad.

Parada directamente frente al edificio especificado, Jeanne respiró hondo, tomó una postura con las piernas firmes y lo golpeó con el asta de la bandera, rompiendo la pared de piedra y creando una entrada. Mash habría aplaudido y elogiado en cualquier otro momento, pero desconfiaba de crear cualquier ruido que pudiera atraer enemigos, y derrumbarse en una pared no era la mejor idea en retrospectiva.

Mash se tensó junto con todos los demás, y al menos, Jeanne parecía mortificada por un error tan descuidado.

"Lo siento," Jeanne volvió su atención a sus pies cuando Mash comenzó a hacer pucheros, sus mejillas se sonrojaron antes de que ella se recuperará, ya que no era el momento. Jeanne tosió en su mano. "Démonos prisa", dijo antes de caminar penosamente hacia la ciudadela.

"La energía de un Servant ha sido detectada a partir de los escaneos, pero es muy débil", señaló Romani en su informe desde una transmisión. "Diríganse a la izquierda en ese pasillo, y debería haber una habitación en el extremo más alejado de un pasillo roto. Debería ser una mazmorra o celda de detención".