Limerencia | ᵀᴷ

⁰⁶ | Casa de muñecas.

Las apariencias siempre son una vil mentira.

Y Jungkook podía dar fe de aquello, ya que él y toda su vida se basaban en las apariencias, había aprendido a vivir de ellas desde que era un niño. Toda su vida era una farsa dibujada y pintada en el mismo lienzo roto y desgastado que se cubría tras el apellido Jeon. 

Su vida era "perfecta" o al menos eso era lo que se mostraba. Al venir de una familia adinerada, tenían que verse siempre "perfectos" e impecables, su apellido no podía tener una sola muestra de polvo, pero lo que el resto de ajenos no sabían, era que ese apellido estaba totalmente manchado por todos aquellos misteriosos conflictos que se escondían detrás del apellido Jeon.

Siempre mostraba una cálida sonrisa a todo aquel que se la creyera, su felicidad no era real y su sonrisa no era verídica, pero siempre tenía que recordar lo mismo; "sonríe, Jungkookie" se repetía incontables veces dentro de su cabeza cual tocadiscos descompuesto que no podía hacer más que reproducir sin parar, la misma canción. 

¿Qué es peor? ¿Ocultar el llanto o sonreír estando vacío por dentro?

Aparentemente se podría considerar algo similar o incluso lo mismo, pero Jungkook no tenía llanto que ocultar tras una sonrisa, no tenía dolor que esconder tras una carcajada, simplemente no tenía nada que ocultar tras esa aconejada sonrisita, su sonrisa estaba tan vacía que incluso la sentía mecánica, sentía como si unos finos hilos que se clavaban en sus mejillas fueran tirados desde el otro extremo provocando una sonrisa.

La gente cercana a su entorno familiar creía conocerlo, creía saber todo del "pequeño de los Jeon", pobres ilusos, basaban su teoría en lo que su familia aparentaba.

Ahora bien, permítame contarle un poco acerca de los Jeon.

Eran una familia muy bien acomodada, Jungkook no tenía abuelos puesto a que sus abuelos maternos habían muerto antes de su nacimiento y sus abuelos paternos murieron en su infancia, sus tres abuelos fallecieron debido a la edad, pero su abuela paterna fue asesinada por un ladrón, ese fue su primer encuentro cercano con la muerte, y no sería el ultimo.

Sus padres aparentemente lucían como la típica pareja cliché de las películas, aquellos que tenían una cena romántica cada fin de semana y viajaban por el mundo para vacacionar, sí, eso se mostraba, pero tras esa lujosa puerta de madera blanca, la realidad era otra. Su padre tenía múltiples amantes, una cada vez más joven que la otra y su madre era una adicta a las apuestas, al alcohol y a los antidepresivos.

Una hermosa pareja de ensueño.

Tenía un hermano mayor, un adolescente sin supervisión y con libre acceso a todos sus caprichos, un cuento que termino mal.

Y una lindísima tía que lo amaba con todo su corazón, que estaba dispuesta a dar su vida por el sí hacía falta, ¡Oh! lo olvidaba... Una lindísima tía que estaba dispuesta a dar SU vida a cambio de dinero.

Sí, esa era su tan "maravillosa" vida, una farsa, apariencias, lo que mostraba externamente de sí mismo hacia los demás, no hay una mayor profundización, ni un conocimiento de cómo era realmente la vida de Jeon Jungkook, simplemente era lo que se podía percibir desde afuera. Muchas de las veces las personas tienden a criticar o poner apelativos a una persona solo con lo que pueden percibir de ella por cómo se ve, su forma de vestir, su peinado, y cualquier cosa que se pueda observar a simple vista, pero sin detenerse por un momento a conocer realmente a la persona en cuestión.

La cruel realidad volvió a golpearlo como un frio ventarrón directo en la cara, se sentía cansado, su cuerpo se sentía pesado y el frio no era de mucha ayuda, podía sentir sus pies helarse aunque tuviera calcetines y zapatos cubriéndole, eso no era suficiente, el frío congelando sus pies estaba pasando factura al causarle ese terrible dolor, era como si estuviera caminando sobre cuchillos.