APRENDIENDO A AMAR

Parte 75

poche

los meses transcurrieron de lo mejor, Dani y sus antojos seguían igual de noche, pero no me importaba ir por ellos, últimamente está muy sensible y todo la altera, trato de ser paciente y respiro contando hasta diez para calmarme, sé que es por los bebés y la entiendo aunque tenga momentos donde temo por mi vida y por la de mi pene porque ella amenaza con cortármelo para no volver a embarazarla y se pone peor cuando le doy otras alternativas, sigo sin entender cuando debo mantener la boca cerrada, puede parecer aterrador pero me encanta y amo todas su facetas.

Por otro lado está German que logró lo que tanto quería, grité por toda la cuadra tal y como él me lo pidió, Laura estuvo presente y cumplió su promesa ella no me grabó ya que contrató a un camarógrafo para que lo haga, Daniela quiso asesinarla, pero ella se aprovechó que podía correr y escapó ante las carcajadas de todo mundo, lo bueno es que recibió su merecido porque Dani habló con paula para castigarla con lo que más le gusta según sus propias palabras, no quise investigar más a fondo de lo que se trataba por mi bien.

Vele está de novia con mateo al perecer la chica a la que quería invitar era a ella, pero vale nunca le respondió, ahora llevan una relación a distancia, aunque vale viaja seguido a verlo, no lo traslado para aquí porque lo necesito en la sucursal, es un gran chico y mi papá también está feliz por ellos.

_ mami, Dani está llorando

_ ¿Qué fue lo que pasó? - pregunté asustada ya que solo le faltan una semana para la llegada de los bebés.

_ se vio al espejo - dijo riendo y yo le sonreí

_ ¿otra ves? - dije ya algo acostumbrada a esto, según mafe soy un ángel por soportar tanto drama, pero a mí me gusta este tipo de escenas porque se pone súper tierna y quiere que le haga mimos por horas y eso me encanta. Le pedí a Emi que juegue algo mientras yo voy a calmarla y el obedeció.

_ ¿saco el helado de chocolate? - preguntó mientras subía y yo asentí para luego subir a la habitación, donde Dani estaba llorando sobre la cama.

_ mi amor ¿Por qué lloras chiquita?

_ mírame poché estoy gorda - dijo tirando un vestido que estoy segura trato de ponerse, pero no le gusto como se veía.

_ eso no es cierto mi amor, estas igual de hermosa que siempre y te amo ¿lo sabes no? - dije sentándome al lado de ella.

_ pero estoy gorda y seguramente en tu trabajo hay muchas chicas lindas que no dejan de coquetearte

_ para nada mi amor yo solo tengo ojos para ti y si me coquetean les digo que estoy casada y solo se van - dije riendo

_ pero aun no nos casamos - dijo haciendo su hermoso puchero

_ pero como si lo fuéramos amor, estamos semi casadas ¿recuerdas? Y no te fallaría nunca, eres el amor de mi vida Daniela calle y escúchame bien - dije sujetando su rostro - no hay nadie en este mundo ni en otros que pueda hacer que mi amor por ti se acabe, nadie - ella se aferró a mí y no perdí oportunidad de hacerle mimos y llenarla de besos.

_ amor ¿crees que si como un poco de helado voy a engordar?

_ para nada mi chiquita ¿quieres que te traiga un poco? O prefieres bajar y así comemos los tres mientras el enano me gana en el play - ella lo pensó un poco y terminó aceptando bajar.

_ ¿me podrías ayudar a ponerme este vestido? - dijo recogiendo el que tiró hace apenas unos minutos.

_ lo que quieras princesa - ella ya tenía una sonrisa en el rostro y con solo eso ya me tiene a sus pies. Le quité la ropa que traía puesto y luego la ayudé a ponerse el vestido, se veía hermosa y no entiendo que fue lo que no le gustó cuando se lo probó sola.