30 días de la OTP [Jercy] ⚡🌊

Día 23

Discutiendo

Había pasado dos semanas, dos semanas en las que Percy se sentía sólo y abandonado, no era por exagerar, pero su bro siempre estaba con él y que de la nada lo dejara de lado no era una sensación muy linda.

Desde que terminó la guerra con Gea ellos dos habían estado muy unidos, incluso Percy le había ayudado a construir los altares de los dioses, pero cuando menos se dio cuenta ya lo había dejado de lado ¿acaso había hecho algo malo?

Percy soltó un largo suspiro, esperaba estar equivocado y que Jason le diera una buena explicación de lo que había estado haciendo, si es que llegaba, ya llevaba esperando en la playa casi una hora.

"¡Jefe!" escucho la voz de Blackjack, el pegaso negro descendió a su lado.

—Hola, blackjack. Si quieres ir a dar una vuelta e ir por unas donas de una vez te digo que estoy esperando a Jason —el de ojos verdes miró a su pegaso, no se movería de allí hasta ver al chico.

"Bueno, Jefe. Creo que el chico rubio no vendrá, lo vi junto a Nico" el pegaso ladeó la cabeza.

—Es Nico ¿que tiene eso de malo? Tal vez estaba viniendo y se distrajo.

"No quiero sonar aguafiestas, pero no es la primera vez que los veo juntos"

—¿Dónde están?

"En el lago"

Y sin más Percy se monto en el pegaso, pidiéndole que lo lleve hasta el lugar, tenia que hablar seriamente con Jason.

El hijo de Poseídon no lograba comprender porqué se sentía de esa forma, Jason siempre había sido sincero con él, nunca le había ocultado cosas y la mayor parte del tiempo estaban juntos ¿por qué de la nada le hacía eso? ¿Por qué lo dejaba de lado justamente como Annabeth lo había hecho?

Percy estaba molesto, pero más que eso se sentía solo y abandonado.

—¡Jason Grace! —grito desde lo alto, antes de que Blackjack aterrizará.

—¿Percy? —el de ojos azules volteo hacia dónde venía aquella voz, viendo cómo el chico baja del pegaso y se acercaba a él.

—Te dije que no era buena idea ignorarlo —le susurro Nico, para luego desaparecer, no quería meterse en problema de parejas.

—¿Por qué? Si estabas tan ocupado viendo a Nico ¿por qué no me lo dijiste? Somos amigos, hubiera entendido si querías estar con él ¡no era necesario que hagas eso! —lo miro molesto, con los ojos aguados, mientras que el lago se volvía turbulento.

—Percy, dejame explicarte las cosas, calmate —el hijo de Júpiter lo tomó de los hombros, intentando calmarlo de alguna forma.

—¿Qué es lo que me vas a explicar? ¿Que has preferido estar con Nico y dejarme de lado justo como ella lo hizo? ¿Que me remplazaste porque soy un monstruo y me tienes miedo? ¿Que es lo que me vas a explicar?

Y en ese momento Percy rompió en llanto, se sentía horrible, no sabía que hacer.

Jason se quedó callado ante las palabras del chico, ¿debía decirle la razón de su comportamiento? Si, definitivamente tenía que hacerlo.

Lo abrazo con fuerza y comenzó a hablar.

—No te deje de lado por nada de eso, Percy. Simplemente quería que las cosas fueran especiales y que reaccionarias bien ante lo que iba a decirte, no estaba seguro de si sentías lo mismo que yo y aún así quería arriesgarme.

—¿De que hablas? —el de ojos verdes se alejo, mirando al rubio sin comprender.

—De qué me gustas y yo solo quería declararme, Nico me estaba ayudando con eso.

Percy se sintió un completo idiota al escuchar eso, no merecía eso, no merecía el amor de Jason Grace, después de todo Annabeth tenía razón, se había vuelto muy inestable desde que salieron del tártaro, maldita sea, lo había arruinado todo.

—Y-yo... Lo siento —se dio la vuelta y antes de que el rubio pudiera detenerlo, monto a Blackjack y se fue.