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Capítulo 4

Supongo que cada quién carga con un recuerdo de su niñez que no quiere recordar o con alguno que le dejó una enseñanza de por vida. Digamos que mi situación es ambas .

¿Por qué?

Bueno, podría hablar de esto por horas así que resumiré la situación en la que me encontraba hace bastantes años cuando solo era una inocente e indefensa niña.

Como era de esperarse mi familia estaba lejos de ser una feliz, solo para aclarar, mis padres eran los típicos que se la pasaban peleando por absolutamente todo. Pero en aquel entonces no entendía por qué discutían tanto, más adelante me daría cuenta del por qué de todo...

Pero eso es otra historia.

En fin, aunque ellos peleaban casi todo el tiempo,ambos decidieron que para evitarse las molestias de que su adorable hija los viera pelear, me encerraban todo el día en mi habitación, la cuál no era muy colorida y más que nada, oscura...muy oscura.

Los ruidos y gritos de mis padres peleandose los escuchaba cada día desde aquella habitación, de la cuál no me permitían salir en ningún momento, incluso debía comer dentro de esta y como era de esperarse, no podía ir a la escuela.

Hubo un momento en él cual padre estaba tan molesto que golpeó a mamá, no pude hacer nada y tan solo permanecía encerrada en mi habitación, mientras abrazaba mis piernas sentada en un rincón,
dejando así las lágrimas salir todo lo que quisieran.

Todo esto esperando que sus gritos y peleas se terminaran... pero nunca ocurrió.

Cierto día, o más exactos, el día de mi cumpleaños escapé de casa, huyendo por no ser atrapada.

Estaba cansada de escucharlos discutir todo el tiempo, si no mal recuerdo en aquella epoca tan solo cumplía 12 años.

Sorprendentemente conseguí huir lo suficiente hasta llegar a un pequeño parque que se encontraba totalmente oscuro, de nuevo, debo repetir que odiaba la oscuridad.

El sonido de uno de los columpios moviendose me alarmó así que volteé a ver a aquel niño al cual no alcanzé ver bien por la oscuridad.

¿Recuerdan que dije que pasaba todo el tiempo encerrada?

Pues practicamente hacía bastante tiempo que veía a un 'niño' y mucho menos de mi edad, con razón estaba asustada.

Además de que a primera vista pensé que era un fantasma...

¡No me juzgen! ¡Era una niña!

Antes de que lograra reaccionar para irme corriendo de ahí lo más rápido posible, él habló.

— No eres de por aquí ¿Cierto?— Asentí levemente con la cabeza, su expresión cambió a una de confusión y duda—  ¿Acaso también te escapaste?—

¿Como demonios lo supo? Nunca lo sabré.

— S-Si—

Y fue cuando me di cuenta del pequeño detalle ¿'También'? ¿Él también escapó?

— No debes hacerlo, una niña como tú no debe escapar de casa, harás preocupar a tus padres.—

Me cruzé de brazos sobre mi pecho y le contesté,— Tú también te escapaste.—

Ahora el sorprendido era él.— ¿Como supiste?

Me senté en el columpio a su lado.

— Lo dijiste antes.—

Una pequeña risa salió de sus labios y después de un pequeño silencio hizo aquella directa pregunta que me provocó escalofríos.

— ¿Por qué te escapaste?—

❛La Chica Rebelde❜ ʲᵐ ┃Tᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀحيث تعيش القصص. اكتشف الآن