Hasta la muerte Moonflower

Capitulo 16

__• Jungkook •__

Jungkook aún sonrojado dirigiéndose a su habitación pensando en lo que acaba de ocurrir, preguntándose así mismo si debía ir a la casa de Taehyung o no.

Mientras ponía sus pensamientos en claro, de ¿por qué Taehyung lo confundía mucho? Aún con el sueño retumbando por todo su cuerpo, ya que él no había dormido, no quería sentirse triste, pero le ganó el sueño tan plácidamente.

Soñó lo que más temía

Uno:

__Taehyung__ Jungkook pronunció suavemente, inclinándose un poco
__Tengo que decirte algo__

Llevó sus labios cerca de la oreja de Taehyung y cerró sus ojos, sintiendo el sutil y perfecto roce de su piel contra sus labios, alejándose de repente, no sabiendo lo que
estaba haciendo.

Excepto que Taehyung lo agarró de la cintura, acercándolo un poco
más.
Lo sostenía con tanta fuerza y estaba tan cerca, tanto que sus narices se rozaban y
Jungkook casi dejó salir un gemido. __T-Taehyung__

__Shh, mi amor__ Taehyung susurró __Déjate llevar__.

Dos:

Creo que está teniendo un infarto. ¡V-Verónica llama a la ambulancia!

R-respira, respira para mí, Tae __tartamudeó Jungkook, y Taehyung tocó alrededor de su camisa, respirando inestable y tembloroso.

Tres:

__Vete. Por favor, solo v-vete__ Jungkook soltó de repente, sin saber lo ruidoso o silencioso que estaba siendo, sin saber si Taehyung lo había escuchado, sin saber si podía respirar.

Taehyung se fue.

Jungkook se quedó solo, tirado en el suelo, gritando a todo pulmón, llorando,
sollozando, lágrimas cayendo sin parar, su garganta ronca por los gritos que soltó ante las circunstancias que arruinaron el único amor que había sentido.

Cuatro:

__Tú. Tú eres esa florecita del club. __ Dijo el otro hombre.

__Enfermo de mierd__ Uno de ellos lo cortó antes de darle un puñetazo en el estómago.

Jungkook gritó de dolor y se tambaleó hacia atrás. __¿Q-qué?__ intentó decir, pero el otro hombre lo atrapó y lo levantó.

Le dieron un puñetazo en el costado. Jungkook levantó los brazos, pero lo
tiraron hasta que cayó al suelo.

Jungkook gritó pidiendo ayuda. Lloró hasta que su garganta quedó ronca.

__Ayuda, ayúdenme, por favor que alguien los detenga__ Jungkook sintió una patada tras otra contra su costado, golpes
contra su estómago, un golpe de dolor absoluto que lo lastimaba por razones desconocidas.

Cinco:

__el doctor ya está en camino, mi amor__

__Quédate conmigo. __ Suplicó Jungkook.

Taehyung miró sus ojos que estaban llenos de nada más que amor. Sabía que le había dicho que se quedará por ahora, pero tenía la intención de quedarse para siempre.

Taehyung lo besó en los labios.

__Lo haré, mi amor. Mi angelito. __ Taehyung dijo, y Jungkook chilló en el beso.

__Mi precioso ángel, oh, te amo tanto. __
Jungkook asintió contra sus labios, alejándose por un segundo.
__ ¿Me amas? __

__Te amo tanto. __

Despertó

Jungkook despertó gritando __ ¡No, ¿Por qué?!__sudoroso y llorando por todo lo que había visto en esa noche, ojalá jamás lo hubiera soñado, lo único que quería es abrazar a Taehyung en ese momento. Lo necesitaba

Sentía un vacío en su pecho, no conteniendo las lágrimas siendo aún más cargadas en su pecho hablando para el mismo
__¿Por qué te sueño, p-por qué?__ sentado en su cama sintiendo únicamente el sonido de su llanto en la silenciosa habitación a la luz de la luna.

Ante los gritos, Susy fue a la habitación desesperadamente, abriendo la puerta rápidamente y encontrándose únicamente a su hijo llorando con las piernas en su pecho abrazadas con sus brazos.

__mi amor ya estoy aquí__ su madre abrazándolo de inmediato __mamá, ya está aquí__ añadió

Jungkook abrazándola desesperadamente sintiendo el cálido abrazo de su madre y calmar el llanto que tenía.

__solo fue una pesadilla__ su madre acariciando su cabello levemente dándole cariño.

Jungkook se sentía más tranquilo respirando levemente ante el cálido abrazo de su madre y quedando dormido otra vez.

Susy al percatarse que su pequeño hijo quedó dormido lo recostó suavemente con la almohada y cubriéndolo con la manta hasta sus hombros, dándole un beso en la frente al ver a su pequeño hijo con las lágrimas resecas que se formaban en sus ojos, retirándose dejándolo dormir otra vez.