Y En El Medio Tu (Vondy)

Capitulo 50

No tardé más de veinte minutos en ducharme, vestirme y arreglarme, antes de salir para volver al lado de Chris. Al bajar las escaleras, me asomé primero en la cocina buscándolo. Al no encontrarlo, lo busqué en la sala principal y en el despacho sin suerte. Volví a subir a la parte de arriba, para ver si había entrado en alguna habitación. Al no encontrarlo tampoco, me dirigí hasta el jardín, dónde lo encontré sentado en compañía de mis papás. Christopher se levantó rápidamente del asiento al verme aparecer. 

 

- Hola... -Me saludó casi en forma de susurro con una sonrisa. Me olvidé por completo de la presencia de mis papas al toparme de nuevo con la sonrisa de Chris-

- Hola -Le devolví la sonrisa mientras él volvía a sentarse. Lo eché para atrás, para poder sentarme sobre sus rodillas. Miré a mis papás para saludarles con un gesto con la mano- Buenos días

- ¿A qué hora te dormiste al final? 

- Tardísimo... No podía dejar de dar vueltas en la cama 

- La conciencia... -Mi papá se burló provocando una tímida risa de Chris que se escondía detrás de mí. Giré la cabeza mirándolo tratando de no reírse-

- Que chistositos los dos, ehh -Volví a mira hacia delante mirando divertida a mis papás, mientras sentía las manos de Chris sobre mi espalda-

- ¿A qué hora tienen que irse? -Mi mamá me preguntó para cambiar el tema-

- Pues... A la que queramos

- Cómo, ¿se van en auto? -Asentí. Chris puso su cara pegada a mi brazo para poder ver a mis papas-

- Es lo más cómodo, porque mirad. Tardamos creo que... unas nueve horas o así. No es un viaje excesivamente largo, los dos manejamos, podemos hacer relevos cuándo nos cansemos...

- Pero perderán casi un día entre la ida y la vuelta -Mi papá me interrumpió-

- Claro -Mi mamá lo apoyó- ¿Por qué no os vais en avión?

- Yo compré los boletos -Chris colocó su brazo sobre mi cintura para poder levantarse lo justo para sacar los boletos del bolsillo trasero de su pantalón. Cuando volvió a sentarse me los ofreció para que los agarrara. Lo agarré, volviendo a sentarme sobre sus rodillas- 

- ¿Cuándo? -Volteé para mirarlo. Él sonrió encogiéndose de hombros-

- Anoche antes de venir para acá -Le acaricié la mejilla antes de volver a mirar hacia delante, checando los boletos- 

- Estás en todo Christopher -Mi papá lo alabó, dándome unos golpecitos en la pierna para que tomara ejemplo. Sentí como Chris apoyaba la cabeza sobre mi espalda riéndose antes de volver a asomarse para contestarles-

- Nada que ver... -Le quitó importancia- Sólo que... Conozco a Dul 

- Pero salimos en poco más de dos horas -Miré a los tres rápidamente. Chris asintió colocando sus brazos sobre mi cintura, a la vez que pegaba su cara a mi brazo-

- ¿Lo tienen todo preparado? -Mi mamá sonrió al ver como Chris me abrazaba, mientras preguntaba-

- Yo sí, ¿tú? -Chris levantó la mirada preguntándome. Asentí sonriéndole- 

Rápidamente, nos levantamos para ir a por las cosas. Mientras Chris llamaba al taxi, aproveché para despedirme de mis papás. Ambos me aconsejaron que disfrutara aquellos días y los disfrutara con él. Cuando volvió Chris para avisar de que el taxi nos esperaba, tanto mi mamá, como mi papá, se despidieron de él, dándole hasta la bendición para que no le cansara mucho. No sé, hasta que punto me hacía gracia que se burlaran de mí, pero tenía que reconocer que me encantaba ver cómo habían respetado al menos mi relación con él. Él salió de casa con sus lentes y un gorro para dirigirse a su auto. Yo me puse mis lentes antes de montarme en el taxi. Chris me aviso que seguiría al taxi de lejos para no llamar la atención. Al llegar al aeropuerto, el señor del taxi me ayudó a bajar las cosas mientras Chris dejaba el coche en el estacionamiento. Él me esperaba dentro, antes de la sala vip de embarque. No quisimos tentar a la suerte y nada más juntarnos de nuevo, enseñamos los boletos para poder pasar a la sala. Por ahora nadie nos había reconocido, pero aún así evitamos agarrarnos de la mano o caminar demasiado pegados. Una vez en la sala de embarque, nos sentamos juntos esperando a que llegara el avión.  Una vez montado en el avión, aprovechamos para dormir un poco. Antes de que ambos cerráramos los ojos, Chris pasó su brazo sobre mis hombros, para que me recostara sobre él. Cuando llegamos, fuimos lo últimos en bajar del avión. Agarramos nuestras cosas y nos montamos en un taxi, dándole la dirección de la casa para que nos llevara. Al llegar, Chris pagó el taxi mientras yo avancé hacia la puerta. Chris se acercó hacia donde estaba poniéndose sus lentes sobre la cabeza.