Xenoblade Chronicles DxD

Capítulo 9: Tratado de paz y... ¡¿DE VACACIONES AL INFRAMUNDO?!

En el capitulo anterior...

Vali: Sea como sea, nos retiramos. Nos volveremos a ver.

Cuando terminó su frase, el Dragón Emperador Blanco desapareció en la oscuridad junto con El Rey Mono Sun Wukong.

Issei: -suspirando y su armadura desaparece, junto a Mekonis, cayendo de espaldas, pero es atrapado por la mano de Yaldabaoth- Por fin se ha terminado.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Tras la aparición de Bikuo, o el Rey Mono Sun Wukong y la retirada de este y Vali, nuestro protagonista perdió su armadura y cayendo de espaldas, pero fue atrapado por Yaldabaoth, mientras suspiraba cansado, mientras que Rias, Akeno y Miki se acercaban.

Rias: ¿Estas bien, Issei?

Issei: Si, estoy bien. Un poco cansado por tanta energía, pero estoy bien.

Akeno: Menos mal. Pensamos que te habríamos perdido por la locura que hiciste con el poder del Hakuryuukou -mirando al castaño-.

Egil: De eso no tenéis de que preocuparos.

Miki: ¿Por qué, señor...?

Egil: Mi nombre es Egil, habitante y líder de Mekonis y miembro de la gente de Meyneth-sama.

Rias: ¿Egil? ¿Pero ese no era el nombre de...?

Issei: Del líder que quería destruir Bionis hace muchos años atrás.

Akeno: Pero se supone que estaba muerto -mirando al hombre mecánico, un poco asombrada-.

Issei: Con respecto a eso -se levantaba, apoyándose en la espada- En las semanas que se estaba preparando la reunión, Meyneth y Zanza me enseñaron como hacer mákinas, los habitantes de Mekonis. Claro esta, que al no dominar de todo su poder, usando sus fuerzas para traerlo de vuelta. Por eso no hablaron en la reunión.

Miki: Asombroso. Pero... ¿Por qué dijo que no tenía que preocuparme?

Egil: Muy sencillo, señora Hyodo. Monado manipula el éter de todo. Es por eso que, gracias a Monado, pudo manipular el éter del Dragón Blanco y así poder acceder a su poder, sin riesgo de perder tiempo de vida.

Rias: Entonces... ¿No te ha pasado nada? -abrazando al castaño-.

Issei: No... Pero pasará algo si me sigues abrazando así de fuerte -quejándose-.

Todos empezaron a reírse de la situación, mientras que los demás estaba observando la escena, pero... Uno de ellos decide acercarse, y ese era su padre, haciendo que nuestro castaño lo observe.

(Reproducir)

Issei: Papá...

Gorou: Hijo... Yo...

Issei: Si vas a disculparte... Te digo lo mismo que a mamá. Vamos poco a poco, ¿vale? -sonriendo-.

Gorou: Hijo... -sonriendo, con una pequeña lágrima- Claro.

Después de las mentiras y falsedades, creadas por su propio hermano, puede que ahora tenga unos momentos de felicidad, mientras todo eran observados, haciendo que todos se ponga felices.