Capitulo 16

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Descargo de responsabilidad: no soy dueño de Harry Potter.

Después de hacer una parada rápida en la Sala de los Requisitos para recoger la Diadema de Ravenclaw, Harry se acercó a la Choza de los Gritos para encontrarse con Sirius.

"¿Womtail ha vuelto?" Sirius fue directo al grano.

Harry asintió. —Creo que sí. De todos modos, se ha abierto la Cámara de los Secretos y la señora Norris estaba petrificada.

"¿Sra. Norris?" Sirius parecía confundido. "¿Ese es el nuevo gato de Filch?" Al asentir de Harry, Sirius sonrió. "Excelente. Supongo que no es del todo malo, después de todo. Quiero decir, todavía lo atacaré en cuanto lo vea, pero al menos tengo esto para mitigar la traición."

"Te das cuenta de que Pettigrew está poseído por Voldemort, ¿verdad?" Preguntó Harry. "Así que realmente petrificó a la Sra. Norris".

Sirius parecía especulativo. "Sabes, nunca pensé que diría esto, pero tal vez Voldemort no es-"

"Oh, ni siquiera vayas allí", interrumpió Harry. "Y además, la despetrificé casi de inmediato".

Sirius parecía estupefacto y no poco horrorizado. "¿Por qué harías algo tan atroz?"

Harry puso los ojos en blanco. "Mira, Sirius, entiendo que no te gusta Filch ni ninguno de sus gatos-"

"Ese es el eufemismo del año", murmuró Sirius. "¡Son pura maldad!"

"Pero míralo desde mi perspectiva. Compré bastantes pociones de mandrágora durante el verano y si no probaba que funcionaban con el gato, nadie más habría confiado en mí para usarlo en ellos dado que pensaban que era el heredero de Slytherin en ese momento ", señaló Harry.

"Supongo que veo tu punto", dijo Sirius de mala gana. "Pero Merlín, Harry, sólo Lily estaba tan preparada para abastecerse de curas para posibles desastres".

Harry resopló. "Para ser justos, pasó períodos prolongados de tiempo contigo y tus amigos".

"Detalles, detalles…" dijo Sirius con desdén. Sus ojos se agrandaron. "Espera ... ¿ pensaron que eras el heredero de Slytherin?" Harry asintió. "¿Como si ya no lo hicieran?" Otro asentimiento. "¡Detalles! ¡Detalles!"

"Simplemente los convencí de que habría encontrado alguna manera de comercializar mis poderes de petrificación si realmente tuviera alguno y aparentemente he pasado tanto tiempo con Lockhart que me creen", explicó Harry, encogiéndose de hombros. "Y déjame decirte, realmente me encanta todo esto de 'no ser sospechoso de atacar a los nacidos de muggles a pesar de que mi madre y mi mejor amiga son hijos de muggles'".

"Eso es ... no hay palabras para eso", dijo Sirius, sacudiendo la cabeza con asombro.

"Lo sé, soy increíble", dijo Harry con aire de suficiencia. "Pero a los negocios: recuperé el Diadem Horrocrux de la Sala de los Requisitos; ¿puedo asumir que has dominado Fiendfyre?"

Sirius hizo una mueca. "En la mayor parte."

"¡Sirio!"

"¿Qué? No me malinterpretes, definitivamente puedo destruir los Horrocruxes con él y más o menos apuntar, solo me toma un poco de tiempo apagarlo."

"Dios mío," dijo Harry, un poco molesto. "¡Has tenido tres meses!"

"Eso es un gran progreso; no creo que aprecies lo difícil que es dominar Fiendfyre", se defendió Sirius.

Recordando la primera vez que lo vio en acción en un movimiento que de repente destruyó uno de los Horrocruxes de Voldemort, le costó la vida a Crabbe e hizo que Draco estuviera siempre en deuda con él, Harry negó con la cabeza. "No, tienes razón. Lo siento; es solo ... ¿un incendio incontrolable en los terrenos de Hogwarts? Esto suena como una muy mala idea."

¡Oh Dios, no otra vez! Where stories live. Discover now