Capítulo 19

810 72 29
                                    

La sombra de un antiguo amor

🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸 🌸

—Listo, ya puedes levantarte, Sakura— Dio la orden cierta rubia de larga cabellera y grandes pechos retirando sus guantes de látex.

—Gracias, madrina.

—Y entonces, ¿Ya puede viajar?— Preguntó Mikoto con angustia en el hilo de su voz.

—Sí, ya está un noventa por ciento recuperada, puede llevar su vida normal y asearse como de costumbre, solo sin abusar de golpes o aplicación de fuerza en el área, eso es todo— Tsunade acarició el hombro delicado de su ahijada para después dar un leve respingo en su barbilla —Por cierto, ¿por qué tanta insistencia en salir de viaje? ¿Es por parte de la escuela de música?

—¡Oh, cierto! No se lo pude contar antes, Tsunade pero me tomé la libertad de buscar al mejor oftalmólogo del mundo y resulta que se encuentra en Suiza. Queremos llevar a Sakura hasta ahí para que valore su caso y nos diga si hay probabilidad de que pueda ver.

Tsunade no pudo hacer más que abrir sus ojos miel muy grandes, la noticia le caía de sorpresa y en segundos trataba de analizar cada palabra que soltaba la pelinegra.

La rubia sabía perfectamente que Sakura siempre había querido que Hazaku le hiciera la cirugía, era un tanto riesgosa pero confiaba totalmente en su capacidad como médico, el único problema era él mismo, el pelirosa siempre se rehusó a que su hermana pudiera tener el beneficio de la vista.

—Mikoto... No sé qué decir ante ésto, la verdad es que creo que lo más conveniente...

—Solo diga que sí Tsunade, discúlpeme por no haberle pedido autorización antes, sé que usted es un pilar importante en la vida de Sakura, prácticamente su segunda madre y debimos de haberle informado sobre nuestros planes, es solo que Sakura se ha convertido en parte de nuestra familia también y sus sueños son los nuestros, por eso le pido encarecidamente que nos permita llevarla a Suiza.

Tsunade seguía sorprendida, tantas palabras llenas de amor por parte de la matriarca de los Uchiha le daban confianza y mucho agradecimiento, pero no podía evitar preocuparse por Sakura.

Inmediatamente giró su rostro para ver los hermosos ojos verdes y un semblante nervioso, a pesar del pasar de los años, Sakura seguía pareciendo una niña pequeña que jugaba con sus dedos inconscientemente provocando una sonrisa en Tsunade.

—Sakura, ¿tú quieres ir? Sé que vas en buenas manos y no dudo en la elección de Mikoto, pero quiero saber si no sientes miedo.

El consultorio se quedó unos segundos en silencio, a pesar de no poder distinguir, Sakura sentía la mirada espectante de las dos mujeres maduras frente a ella, frotó sus manos al mismo tiempo que sus hombros se movían de arriba a bajo y suspiró.

—Sí tengo miedo madrina, pero le temo más a desperdiciar la oportunidad de que un especialista evalúe mi caso, hubiera querido que mi hermano lo hiciera pero siempre se negó, tú lo sabes, por eso estoy dispuesta a arriesgarme ahora que Hazaku no puede controlarme.

La rubia de grandes atributos miró atentamente a Sakura y pudo notar el brillo en sus ojos, su felicidad era muy grande pero también el miedo y ella tenía que encargarse de hacer que desapareciera.

✨ Mirándote con el alma ✨Where stories live. Discover now