𝓜𝓲𝓵𝓪𝓰𝓻𝓸

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Ruri llegó al lugar del reino científico y se sorprendió más de lo que imaginaba. No era un lugar con muchas chozas, como estaba acostumbrada a ver, sino más bien un lugar lleno de "artesanías" que jamás había visto en su vida. Todo esto le pareció como un viaje a lo desconocido, como si fuera un niño entrando a un museo. La curiosidad la invadió, y sus ojos se posaron en cada cosa que pasaba, observándolo todo con detalle. Chrome notó su asombro y se puso a explicarle todo lo que le llamaba la atención.

— ¡Ruri! Mira, estos son frascos que nos han ayudado a mezclar muchas cosas bien sorprendentes — dijo Chrome con entusiasmo, sorprendiendo a Ruri. Kohaku miraba feliz a su hermana, hacía tiempo que no la veía sorprenderse así.

— Chrome, te encargo a Ruri. Iré a preparar el Ramen para mi hermana — Kohaku salió disparada como un águila.

— ¿Ramen? — preguntó Ruri.

— Es la comida más deliciosa que he probado en toda mi vida — respondió Chrome, sintiendo un leve rubor en las mejillas.

— Estoy ansiosa por probarlo — Ruri sonrió, causando que Chrome se sonrojara aún más.

— ¡Muy bien! Hasta entonces, te mostraré todo lo relacionado con el reino científico.

Durante una hora, Chrome le mostró todo lo que él y su amigo Senku habían creado: tubos de ensayo, matraces, varios químicos, el horno de manos, el mini generador de luz y, sobre todo, la bombilla, que Ruri denominó como "la cosa más brillante que jamás había visto". Se encontraba muy bien, y casi había olvidado que estaba enferma. Sin embargo, comenzó a toser gravemente. Chrome, sin dudarlo, la llevó a Senku cargándole en su brazos provocando un sonrojo a Ruri.

— ¡Senku! — gritó Chrome con todas sus fuerzas.

— No grites, ¿no ves que...? — Senku vio a Ruri toser y sacó rápidamente varias cosas de su bolso — Déjala en este lugar y me encargaré del resto.

— Pero se ve muy mal, debo avisar a...

— No te preocupes, la medicina está empezando a surtir efecto. Ahora su sistema inmunológico debe estar combatiendo la neumonía, por lo que es normal que la paciente presente este tipo de reacciones — explicó Senku mientras miraba a Chrome, quien no entendía nada — Solo déjala descansar aquí y tráele algo para que coma después, ¿quieres?

Chrome dejó a Ruri en una camilla que Senku había preparado para ella y corrió hacia Kohaku para contarle lo sucedido y terminar de preparar el ramen. Senku, por otro lado, tocó la frente de Ruri con la mano para medir su temperatura. Estaba caliente, pero no demasiado. Luego, preparó un agua medicinal para ella con algunas hierbas que había recolectado en algunos de sus exploraciones, y después de que Ruri la bebiera, la tos comenzó a calmarse después de un tiempo.

— Finalmente, lo peor ha pasado — Senku mojó un trozo de tela con agua tibia y la colocó en la frente de Ruri — ¿Cómo te sientes ahora?

— Mejor... — Ruri alzó la vista hacia Senku — Gracias por cuidar de mí, te debo mi vida...

— No es necesario que lo digas. Prometí a tu hermana que te ayudaría, y eso es lo que estoy haciendo — Senku volvió a tomar su temperatura — Tu temperatura ha bajado...

— ¿Mi temperatura? — preguntó Ruri.

— Olvida lo que dije. Ahora estás mucho mejor. Descansa, yo cuidaré de ti hasta que te recuperes por completo.

— Entiendo... — sin darse cuenta, Ruri tomó la mano de Senku, quien se sorprendió — Gracias, Senku — Ruri se dejó llevar por el sueño y sin darse cuenta su mano permaneció en la de él, como si fuera un peluche en manos de una niña.

Ridículamente absurdo el amor [SenKu x Kohaku] o [Senku x Ruri]Where stories live. Discover now