Capítulo II

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Brittany:

Habían terminado las clases y estaba esperando a Sophi para ir a mí casa, pero primero pasaríamos por su casa a buscar algunas cosas que necesita, ya no quedaba nadie en la escuela solo yo y los pasillos desolados, si no me estuviera alguien "persiguiendo" me sentiría más cómoda, ya que me gustan los lugares tranquilos.

Decidí colocarme los cascos para escuchar música, sonaba Bad Habits de Ed Sheeran, es una de mis favoritas, está en el top uno de mi playlist, sumergida en la letra ví una sombra pasar por el pasillo, me exalté.

-¿Hola, hay alguien ahí?- se que es la típica frase que se pronuncia antes de morir pero fue lo que mi boca pudo articular.

No sé porqué razón Sophia se demora tanto, ya debería estar aquí le voy a hacer una llamada.

Silencio tras el celular, me da apagado, y si le pasó algo por decirle lo del asesino, tengo que ir a ver. Me armé de valor que no se de donde lo saqué y me encaminé al estacionamiento, al llegar estaba Sophia pegada al capó de su coche hablando animadamente con un chico, de lejos no sabía quién era pues estaba de espaldas.

-¡Sophia me te ibas preocupada!- parezco una madre preocupada, pero no me importa.

-Tranquila amiga solo hablaba con Nolan, es un amigo que va a clases de historia-hizo una pausa- Brittany Nolan, Nolan Brittany-nos presentó.

Yo estreché mi mano con la de él y en un intento de sonrisa amable, me salió una mueca, pero que más da no lo conozco.

-Bueno Nolan, creo que ya debo irme, nos vemos mañana en clases- se despidieron con un beso en la mejilla

-Hasta mañana chicas- dijo y yo hice un gesto con mi mano en forma de despedida.

Ya dentro del carro de Sophia me dediqué a mirarla mal.

-¿Por qué me miras así?- me dijo graciosa.

Imité su voz y ella río libremente.

-Sabes que estoy asustada después del asesinato, y me dejas sola en el medio de la escuela que ya no había nadie- le dije algo enfadada haciendo puchero.

Ella encendió la radio y emprendió el camino a su casa, no dijo nada al respecto, pues yo tenía razón, cuando no la tiene ella solo se queda callada porque le da vergüenza, pocas veces en los 10 años que llevamos de amistad he escuchado a Sophia decir un lo siento, le cuesta, es una persona algo cerrada en ese aspecto, y dice que pedir lo siento sin sentirlo no vale la pena que prefiere quedarse callada en su lugar.

Llegamos a su casa en unos 15 minutos y su mamá Emilia, nos recibió de lo más alegre y nos dió algo de merienda, después Sophia se fue a dar una ducha y a preparar sus cosas y a la hora nos encaminamos a mí casa, como era de esperarse la casa del vecino estava rodeada de cintas amarillas que pertenecían a la policía, sentía mucha pena por ese hombre no merecía un final así, siempre estaba alegre y saludando a todos, me acuerdo que cuando era más pequeña mes regalaba caramelos cada vez que me veía, va a ser dificil acostumbrarse a no verlo más por aquí.

-Brittany disculpa por lo que te hice en la escuela- sabía que lo decía de corazón- No te lo dije antes porque sabes lo que me cuesta decir lo siento.

Mejor que yo nadie sabe eso así que solo sonreí y me lancé a sus brazos para envolverla en un abrazo.

-No pasa nada Sophia, con que estés aquí a mí me basta, así que vamos a olvidarnos de ese asunto- le apreté sus esponjosos cachetes y nos pusimos a hablar durante un rato.

-Sube a ducharte que yo preparo algo para comer- me dijo cuando ya nos aburrimos de hablar.

-Si mamá- bromeé y mientras subía las escaleras me lanzó un zapato.

El Secreto de Charlie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora