Nuevo Objetivo - Kisaki x Lectora

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La noche era cuando venía la parte más agitada del día.

Caminaste entre la nieve que había quedado del día anterior, sumamente abrigada, caminando por las calles en silencio.

Para luego entrar a tu trabajo, el ambiente cálido, ruidoso, las personas platicando entre ellas, música para ambientar.

-"Buenas noches (T/n)" te saludaron algunos clientes recurrentes en el lugar cuando te vieron entrar

-"Buenas noches muchachos" dijiste en una sonrisa mientras te quitaste tu abrigo y lo dejaste colgado, ya tenías tu uniforme bajo este "Algo interesante de hoy?" le preguntaste a un compañero

-"Oh~ bastante interesante~" respondió este sacando un enorme ramo de flores y fue hacia ti "Un cliente dejó esto para ti~" rio levemente "Tienes alguien especial?"

-"Hum, no, no tengo a nadie. Quién las dejó?" preguntaste mirando el ramo, eran rosas blancas

-"Vino un sujeto alto, tenía unos lentes, y cabello con unos mechones rubios, muy guapo, dijo que dejaba este ramo a ti de parte de un amigo" respondió mirandote

-"No tengo idea de quien puede ser" dijiste devolviendole el ramo "No lo quiero"

-"Oye! No seas tan amargada" te dijo sujetando el ramo

-"Ni siquiera tiene alguna carta con su nombre, no acepto cosas anónimas, quien sabe que intenciones pueden tener" dijiste mientras empezaste a limpiar algunas copas

-"Al menos les puedo dar otro uso?"

-"Haz lo que quieras con ellas" dijiste

-"Ugh, pobre del tipo que te las envío" tu compañero rodó los ojos empezando a desarmar el ramo, para usar las flores como adornos en el mismo bar

Notaste que alguien sentado en una mesa alejada de la barra te quedó mirando, cuando él se dio cuenta de que lo viste, se levantó y se marchó del lugar.

Optaste por no darle importancia a aquello, simplemente fuiste a la mesa donde él estaba sentada, para llevarte la copa que había dejado, y limpiar la misma.

Cuando fuiste a este, viste una nota en la mesa.

"Eres demasiado dura, date un descanso"

Hiciste una mueca completamente fastidiada por esa nota, la tomaste y rompiste para tirarla a la basura.

Más allá de aquellas cosas, las flores y la nota, el resto de la noche prosiguió con bastante normalidad.

Algunos clientes te hicieron un poco de burla, y algunas bromas por las flores, diciendo que tenías que relajarte y darle alguna oportunidad a alguien.

A lo cual respondias con mucha tranquilidad que no estabas interesada en esas cosas por ahora.

No tenías tiempo para ponerte a pensar en ese tipo de situaciones, tener una pareja iba a ser algo que podía arruinar completamente el orden que tenía tu vida, y no querías eso para nada.

Quizás cuando tengas tu vida un poco mejor arreglada, pensarias un poco en eso.