Capítulo 34: Límites Y Disculpas

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Bilbo sacó el último limón del árbol y luego se volvió hacia Gani. Mientras lo hacía, vio a Kíli y Legolas a través de los árboles, donde debieron haber pensado que estaban escondidos, besándose contra un árbol. Bilbo sonrió y decidió definitivamente tener una charla con el enano en su camino de regreso al castillo.

"Gani", dijo Bilbo. "Necesito que vayas adelante o detrás de Kíli y yo en el viaje de regreso".

Gani miró por encima del hombro y luego pensó por un momento. "Iré detrás en caso de peligro".

Bilbo puso los ojos en blanco, pero respiró hondo en lugar de molestarse con Gani. Decidió esperar hasta poder desahogarse con Thorin ya que ese enano era el que realmente se lo merecía. "Muy bien."

Tan pronto como Bilbo y Kíli se sentaron en la parte trasera de sus ponis, Bilbo miró al enano y sonrió.

"¿Qué?" Kíli preguntó lanzando miradas a Bilbo mientras se abría camino fuera del bosque.

"Quería hablar contigo", dijo Bilbo con una sonrisa, "sobre Legolas".

"¿Qué hay de Legolas?" Preguntó Kili a la defensiva.

"Quiero saber qué está pasando contigo", dijo Bilbo. "Sé que no le has dicho a Thorin y a tu madre y dudo que Fili sea de mucha ayuda, así que quería ver qué habéis decidido hacer vosotros dos. Quiero decir, obviamente, no tienes que decirme nada, pero solo quería asegurarme de que no ibas a salir lastimado ".

Kili detuvo su caballo y se volvió para mirar a Bilbo con el ceño fruncido. "¿Te preocupa que pueda lastimarme?"

"No sé cómo hacen las cosas los elfos", dijo Bilbo. "Sé que te gusta, mucho, y solo quería asegurarme de que te trataría bien".

Kili comenzó a reír y Bilbo frunció el ceño ante la extraña reacción. "¿Qué?"

"El tío Thorin se preocuparía por mí", dijo Kili cuando finalmente logró controlar la risa, pero dejó que su pony tuviera suficiente plomo para pastar mientras hablaban. "Gritaba y echaba humo y me prohibía volver a ver al elfo nunca más. Todo sería porque está preocupado y no confía en los elfos, pero nunca vendría a decirme que está preocupado. Fili se ofreció a destriparme. A Legolas le gusta un pez y deja sus entrañas a los pájaros, pero nunca me diría que solo quiere que yo sea feliz, aunque sé que eso es verdad y mamá. Bueno, mamá se preocuparía porque ha perdido mucho, más que incluso el tío. Thorin, creo, y ella estaría preocupada de que me lleve, pero nadie me haría a un lado y me diría que se preocupaban por mí y que no querían que me lastimara porque un elfo jugaba conmigo sexualmente.

Bilbo de color rojo brillante. "¿Lo estás… quiero decir, ya?"

Kíli se rió. "No, parece que los elfos son aún más reacios a tener sexo casual que la mayoría de los seres ... gracias a Dios por los enanos masculinos con los que me he acostado o todavía sería virgen y nada podría ser peor".

Bilbo sintió que todo su cuerpo se calentaba y bajó la mirada al apretado agarre que tenía en las riendas. Se recordó a sí mismo que tenía a Thorin y que no había prisa y ... no había ninguna razón para que hubiera algo malo en esperar y luego recordó la expresión de alegría en el rostro de Thorin cuando se enteró de que nadie más había tocado a Bilbo como él. llegaría el enano.

Recuperación, redención y romance [TERMINADA]Where stories live. Discover now