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Habia pasado casi una semana del encuentro de Jessamine con su padre y el planteamiento a Thomas, casi una semana en la que ella había decidido entregar a Thomas tal como su padre le pidió, aun no estaba del todo segura pero de algo estaba segura es que Thomas solo la cuidaba porque el podía obtener un beneficio de ella, y en el momento en que ya no le sirva, el solo la descartaría como había hecho con tantas personas. Por ese motivo había considerado que pasarle información a su padre sobre algunas cosas de Thomas, no estaría mal, o eso quería pensar para autoconvencerse de que no estaba haciendo nada malo. Pronto Hermes tendría otra carrera y Thomas le había pedido a Jessamine una lista con lo que ella pensaba que el caballo podía necesitar. Y ahí se encontraba ella, caminando a la oficina de Thomas, con un papel en las manos y con la vestimenta que usaba para entrenar al caballo , al llegar respiro hondo y golpeo la puerta esperando una indicación para entrar, y así fue. 

Abrió la puerta lentamente y cerro la puerta detrás de ella con la vista en la hoja, al levantar la vista pudo ver a Thomas sentado en su sillón y sobre el tenia a Lizzie sobre sus piernas, Thomas la miraba sin expresión alguna y la mujer sobre el tenia una sonrisa burlona dirigida a la joven. 

Oh...yo-lo siento. Traigo la lista que me pediste sobre las cosas que necesita Hermes.-habló rápidamente dejando la hoja sobre el escritorio.- Lamento interrumpir.-se disculpó para irse casi corriendo de la oficina.- 

Al cerrar la puerta detrás de ella soltó una bocanada de aire, su mente rápidamente comenzó a trabajar como si fuera su enemiga, se comenzó a preguntar por que siempre recurría a Lizzie, era la única mujer que siempre frecuentaba, tal vez ella era su pareja, esa idea hizo que el estomago se le revolviera, entonces el problema no era que no quería tener nada serio, sino ella era el problema. El no quería tener nada con ella. Eso había golpeado directo su ego, el que no sabia que tenia. 

Ahora se encontraba molesta y se notaba solo con ver su comportamiento físico, camino hacia el establo donde se encontraba Hermes junto a Charlie, paso de largo sin dirigirle la mirada a ninguno, tomo una silla para montar y la coloco sobre el caballo sin decir palabra alguna.

¿Alguien esta de mal humor?-preguntó Charlie prendiendo un cigarrillo y mirando a la joven que consideraba como una hija debido al tiempo que pasaban juntos.- 

Solo estoy cansada de la gente.-dijo mientras se encogía de hombros y aseguraba la silla al lomo del caballo.- La gente es idiota.

¿La gente o Thomas?-preguntó Charlie como si nada mientras se sentaba en un pequeño banquito a un costado del establo.-

No se de que hablas.-habló intentando ocultar su nerviosismo lo cual no funciono ya que comenzó a hacer movimientos torpes con sus manos.- 

Solo un idiota no notaria la tensión que hay entre ustedes dos. Quiero a Tommy como si fuera mi propio hijo, pero créeme, por el cariño que te tengo a ti también, debes alejarte de el, nada ni nadie que el haya querido ha terminado bien.-dijo soltando humo por su boca.- 

El no me quiere, solo me ve como un estúpido juguete, solo me usa para divertirse. Nunca estuve en esta situación, soy mucho mas chica que el y siento que se aprovecha de eso, me trata como una niña tonta, cada vez lo odio mas. No me malinterpretes, no estoy enamorada de el, solo me gustaría que me tome como una mujer de verdad y no como una niña.-Hablo sincerándose mientras apoyaba su frente en la del caballo y suspiraba.- 

Lo conozco de toda la vida, el no te ve así, solo no sabe como manejarse en estas situaciones, nunca lo supo y ahora tampoco.-Dijo dándole otra exhalada a su cigarrillo.- 

¿Manejarse con que?-Iba a seguir hablando cuando pudo ver a Thomas prácticamente en la puerta del establo, estaba rogando que no haya escuchado la conversación.- 

《Born To Die》 Thomas ShelbyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora