Nerdy Class ⋆ ¡Sungsun!

𖥻🚀 ˑ Capítulo Tres ˑ ֗ ִ

5:30 en punto, marcó el reloj en su mesita de noche.

Se apresuró a bajar de su habitación cuando estuvo listo con la mejor ropa que encontró en su armario y  por supuesto, se veía bonito. Es así como quería verse para Sunghoon, no quería dar una mala impresión.

Tenía tan solo treinta minutos para llegar puntual a la casa de Sunghoon como habían acordado un día antes y hubiese salido todo como lo planeó desde un inicio de no ser por su madre.

—¿Adónde vas tan misterioso y en silencio? —preguntó de brazos cruzados y una ceja arqueada en el umbral de la puerta de la cocina.

Sunoo detuvo su andar, apretando las correas de su mochila azul con broches de su cantante favorita; Avril Lavigne.

—Te he hecho una pregunta, Sunie —insistió su madre cuando no obtuvo respuesta y él simplemente se quedó en su lugar pensando la excusa perfecta.

—Yo...

No sabía que decir y la verdad no era una opción más viable. Si madre no era la persona más abierta de mente que digamos, era una mujer conservadora y era comprensible -al menos para Sunoo-, no era sencillo tener que lidiar y criar al único Omega de la familia.

Sunoo no quería ni imaginar la reacción de su madre cuando supiera que iría reunirse con un Alfa, mucho menos el motivo por el cuál iría.

Se giró para encarar a su madre. No se veía precisamente contenta por estar ocultándole una salida.

—Sabes que no es bueno que un omega varón salga sin un alfa por las calles, Sunoo.

Y ahí iba con ese tema otra vez.

—Mamá, ya lo sé. Puedo cuidarme solo, prometo que...

Su madre lo interrumpió con un largo y profundo suspiro—: Sunoo, ya hemos hablado de esto. No tengo ganas de discutir y perfectamente sabes las razones por las que no quiero que salgas.

—Mamá, por favor, regreso rápido. Lo prometo, llegaré sano y salvo —Sunoo insistió con una mirada suplicante y un puchero insistente en sus gruesos y rosados labios.

Su madre masajeó la zona de la cíen con sus dedos sintiendo ya el estrés aproximarse. Quería proteger a su hijo, pero sabía que privándolo del mundo exterior uno conseguiría nada.

Hasta que luego lo pensó bien.

—Está bien —cedió finalmente con un suspiro—. Pero te quiero aquí antes de las 8, ni un minuto más.

Pronto, Sunoo se acercó corriendo a darle un abrazo de felicidad y agradecimiento. Su madre lo apartó con una molestia disimulada entre sonrisas forzosas que Sunoo pudo notar, pero ya estaba acostumbrado a ello. Su madre nunca había sido tan cariñosa con él después de todo, y un pequeño acto que demostrara amor para él era tan inusual que solía ponerse nervioso y encogerse en su lugar.

—Tendré cuidado, lo prometo. No tardaré ¿Si?

Sunoo quiso acercarse a darle un beso a la Alfa pero esta lo distrajo para que no lo lograra.

—Ve, se te hace tarde.

El omega asintió contento y entre pasos cortos llegó lo más rápido que pudo hasta la salida para poder dirigirse hacia su destino.

«Espero que seas lo suficientemente inteligente como para que encuentres un buen alfa y así puedas irte de una vez por todas.» Murmuró la alfa al ver salir al chiquillo por la puerta, para luego girarse y dirigirse de vuelta a su habitación.

Sunoo caminaba apresurado por la calle hasta llegar a la parada de autobuses. Para su buena suerte, había bastante gente por lo que se sentiría más tranquilo rodeado de personas.

"¿Vendrás?" preguntó Sunghoon mediante un mensaje de texto.

Sunoo abrió sus ojos sorpresivamente cuando vio la hora en su pequeño teléfono con tapa. ¿En qué momento se hizo tan tarde?

"Estaré ahí lo más pronto posible" Respondió el mensaje lo más rápido que pudo. No quería que Sunghoon creyera que lo había dejado plantado.