𝐂𝐚𝐫𝐧𝐢𝐯𝐚𝐥 •𝙀𝙣𝙝𝙮𝙥𝙚𝙣•

Rumor

"Los rumores son la clave para encontrarte... no hay nada que puedas hacer"

—Si hacen el favor de retirarse— Dijo Jake, que era el único chico que a estas alturas había mantenido la compostura.  Mientras se iban yendo se podía ver al fondo a Sujin con cara de sorpresa y confusión. Los chicos la miraban tratando de descifrar de quién se trataba pero era en vano, no la conocían de ninguna parte.
—Srta. Yaebin— Dijo mientras se iba acercando a su amiga.
—Sujin...—
—¿La conoces?— Le dijo Jungwon a Yaebin a lo cual ella asintió.
—Es mi mejor amiga, tengo que irme—
—¿Por qué empiezo a creer que eres muy cercana a ellos?— Dijo Sujin.
—Para nada, sólo son cosas de reinos, ya sabes— Le dijo Jungwon.
—En realidad no lo sé, soy de Millertown—
—Oh, lo siento— Dijo apenado.
—¿Por qué no estás tan sorprendida como las demás linda?— Le dijo Jay a Sujin.
—Me sigue sorprendiendo, pero por qué le daría tantas vueltas al asunto a algo que no me incumbe. Yo sólo quiero que mi amiga esté bien y este chico bonito calmó las aguas—
—Te agradecería que no hablaras de nosotros— Dijo Heeseung.
—No lo iba a hacer, a menos que le hagan algo malo a Yaebin—
—¿Y por qué haríamos eso?— Dijo Jake.
—Más les vale—
—Antes de que te vayas... tenemos que hablar— Jake se puso al lado de Yaebin.
—¿Ahorita?—
—Claro— Dijo con una sonrisa.
—Pero Sujin...—
—Adelante, si quieres me voy— Dijo su amiga.
—Pero...—
—Te tomaré la palabra, muchas gracias—Dijo Jake llevando a la chica dentro y que cada chico tomara su rumbo.
—Nos vemos Sujin, te encargo a Pinky—Dijo en un grito para que la chica la escuchara.—¿Qué pasa Jake?— El presente se quedó en silencio, no sabía exactamente cómo empezar a hablar, o qué decir. Muy pocas veces se quedaba sin palabras y este era el caso.
—¿No ibas a decir nada? o si me quieres preguntar por aquél chisme falso déjame decirte que no es lo que parece—
—Yo sé por qué lo hizo... lo ví todo— Dicho esto Yaebin abrió los ojos con sorpresa.
—¿Estabas...—
—Estaba buscándote, pero no quise interrumpir. Creo que ahora puedo conectar algunas cosas, sabía que podías escuchar una voz, más no sabía que se trataba de mamá Yang—
—¿Lo viste todo?— Jake asintió.
—Jungwon tiene todo el derecho de no contarme lo que pasa, no es asunto mío a fin de cuentas pero la verdad se la tendrás que decir tú antes de que Heeseung lo haga y las cosas se pongan tensas—
—Lo sé, me estoy cansando de tantos secretos—
—Debemos contar lo de las voces, esa bruja tal vez tenga algo que ver y hay que estar al pendiente por si algo raro ocurre—
—Puede transformarse en un zorro, Heeseung la vió—
—Hablando de él... ¿Podrías conseguirme aquellas notas de las que tanto habla?—
—Jake de verdad lo siento, no sé dónde podrían estar, además, no quiero que por mi culpa dejen de hablarse—
—Tienes razón, quisiera pedirte una cosa más...— La miró directo a los ojos.
—No harás algo anormal conmigo ¿verdad?— El chico hizo una sonrisa algo burlona e inmediatamente se volvió a poner serio.
—No tranquila lo que quiero decir es... No te acerques más a Heeseung—

Jungwon.

Aprovechando que los demás estaban en sus actividades habituales y Jake estaba hablando con Yaebin fui camino a la habitación de Heeseung hyung, pues quería saber más acerca de aquellas notas.

—Hyung— Dijo mientras entraba a la habitación, el mayor estaba de nuevo con el mismo libro de siempre.
—Dime— Dijo mientras no quitaba sus ojos de su lectura.
—Vine por las notas— Heeseung interesado en lo que el menor dijo, dejó a un lado aquél libro y fue directo hacia su pequeño estante de libros, tomó uno y en las primeras páginas sacó unas viejas notas asegurándose que la de nombre "Lia" no saliera.
—Aquí están— Se las entregó.
—Perfecto— Se sentó en el escritorio de su hyung.
—¿No te irás?—
—Claro que no, no quiero levantar sospechas—
—No es como que nosotros dos pasemos mucho tiempo juntos—
—Sólo déjame quedarme, no me digas que no tienes curiosidad—
—Curiosidad y miedo, no sabes con qué te vas a encontrar— Tendieron todas las notas viejas en donde varios títulos sobresalían, uno de ellos era "house lust".

"House Lust"

Sabían que algo especial y único se avecinaba y no dudaron en declarar la guerra a los nuestros. El único problema, era que no estábamos listos y Heeseung aún no tenía tanto conocimiento como mi esposo. Ese día, en el que nos enfrentamos de nuevo ante Jung vio a aquél joven y víctima que iba a recordar en adelante como uno de sus enemigos. Todo iba mal, pues la familia Lim no podía hacer mucho ya que corrían riesgo.

—No entendí—Dijo Heeseung.
—Decía tu nombre, ¿no recuerdas algo?¿alguna pista de lo que pudo pasar?—Dijo Jungwon.
—No lo creo...—

[...]

—Señor, por fin lo hemos encontrado— Una mujer muy joven y de vestimenta oscura aparecía algo feliz.
—¡¡Por un demonio, te he dicho que toques la puerta!!—
—Lo siento mucho señor, fue la emoción— Hizo una reverencia.
—Habla antes de que pierda la paciencia contigo— Hizo un movimiento con su mano indicando que hablara.
—Aquél joven del año 1934, lo hemos encontrado—
—¿De qué joven hablas?— Dijo mientras bebía de su elegante copa.
—De su víctima señor—
—Querida... he tenido más de quinientas víctimas en un año, ¿cómo carajos me voy a acordar?, quieres que te expulse ¿no es así?—
—No, no es así señor— Dijo con nerviosismo.
—¡¡SEÑOOR!!— Un chico de estatura alta y con un atractivo inigualable apareció a toda prisa.
—¿¡Cuándo van a aprender a tocar la puerta par de imbéciles!?—
—Lo siento señor, pero mire— Caminó hacia el escritorio de su amo y le enseño aquella foto.
—¿Cuál es tú nombre joven?—
—Choi Soobin señor— Hizo una pequeña reverencia.
—Bueno Choi Soobin te felicito, después de años por fin puedo coincidir con aquél bastardo que se fue con los Yang— Dijo Jung con una sonrisa maliciosa.—Por cierto, llévate a la chica, ya no nos sirve— Dijo sin importancia.
—Claro señor, lo que ordene— Soobin agarró a la chica de los hombros, al principio fue algo fácil, hasta que captó cuál sería su paradero fue que empezó a poner fuerza e intentar zafarse. 
Soobin no se iba a dar por vencido ahora que había recibido un cumplido de parte de su jefe, no se iba a dar por vencido. Llevó a la chica a cuestas al famoso cuarto de fuego, nombre que el Sr. Jung le puso y donde descansaban los restos de aquellos vampiros calcinados.
—¡¡NO POR FAVOR!!— La chica gritaba con todas sus fuerzas mientras que los demás vampiros de sus alrededores miraban la escena tristemente sin poder hacer nada ya que la regla era no sentir pena por ellos. Soobin empujó con todas sus fuerzas a la chica y luego de cerrar la puerta abrió las compuertas donde el fuego salía desenfrenado dentro de aquella habitación. Los gritos eran tan desgarradores que algunos preferían irse o pasar de largo ante tal escena.
Después de lo sucedido en todo house lust se escuchaba la voz del amo Jung, como solían llamarlo, dándoles órdenes de investigar nuevamente el lugar que siempre estuvieron buscando, que al parecer, tras tanto tiempo de búsqueda tenía como nombre Bloodwood.