Capítulo Uno

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Izuku amaba anidar. No había nada más reconfortante que llegar después de un largo día de clases y meterse de lleno en su cómodo nido. Era simplemente perfecto...o lo fue hasta que durmió en la habitación de su amigo de la infancia.

Días antes

Como ya es usual en él Izuku se había estado sobreexigiendo para los entrenamientos y exámenes reduciendo su tiempo de descanso a casi cero.

Como era de esperarse esto fue notado por todos en la clase, pero por más que sus compañeros expresaron su preocupación ante su clara falta de atención a sí mismo el peliverde alegaba que después de los exámenes finales descansaría.

Después de dos largas semanas de evaluaciones el peliverde tenía ojeras casi tan marcadas como las de su amigo Shinso, por eso cuando el viernes finalmente llegó no se pudo salvar de la intervención de sus amigos.

- Enserio chicos, estoy bien no tienen que preocuparse. Ya les había prometido que después de los exámenes finales descansaría-dijo Izuku tratando de arrebatar su mochila de las manos de su mejor amiga.

- Lo entendemos Deku-kun pero en verdad te ves como que necesitas tomar ese descanso ahora mismo. -respondió Uraraka ignorando los esfuerzos de su amigo por recuperar su mochila. Enserio estaban preocupados, el pecoso se veía como zombie y la castaña simplemente quería quitarle un peso de encima. Y vaya que era pesado, si no hubiera usado su quirk probablemente no hubiera podido la mochila de su lugar- Por cierto que tanto llevas en tu mochila?

- Ah? Lo básico para la clase. Libros, lapiceros, textos, pesas, mi libreta de apuntes...

- ¡Midoriya, ¿llevas pesas en tu mochila?!- exclamó Denki desde atrás, pues había escuchado la conversación casi sin querer- hombre, ¿por qué?

- Uh...para entrenar durante los intermedios de clase- respondió el pecoso dándose la vuelta encontrándose de frente con todo el autodenominado Bakusquad

- Tch, no importará que entrenes tanto si vas a desfallecer en pleno campo de batalla nerd- Katsuki respondió con hastío cruzando los brazos tratando de ocultar cualquier rastro de preocupación en su voz.

- Bakugou tiene razón Midoriya, parte de ser héroe es saber cuidar de ti mismo - dijo Iida moviendo las manos robóticamente- deberías ir ya mismo a descansar a los dormitorios.

- Si, aún tienes mucho tiempo para el examen del lunes. Deberías tomar un descanso por hoy-conincidió Todoroki empujando al pecoso en dirección a los dormitorios.

El mar de feromonas preocupadas mareaba al omega por lo que tratando de librarse del agarre del alfa dijo lo primero que se le vino a la mente- Está bien chicos, pero All Might pidió verme hoy. Así que después de hablar con él iré a los dormitorios ¿de acuerdo? - dicho eso se soltó por fin del agarre del bicolor y con la confusión, tomó su mochila de las manos de la beta y escapó en dirección a la sala de maestros.

Sus compañeros suspiraron en resignación y reanudaron su camino a los dormitorios, sin embargo Katsuki no se dejaba engañar. Desde su pelea en Ground Beta ambos se habían vuelto cercanos, al punto que Bakugou podía entablar una conversación con el pecoso sin explotarlo, lo ayudaba con su entrenamiento y también estaba presente en sus reuniones con All Might, por eso sabía perfectamente que su profesor no había llamado al peliverde hoy y fue solo una excusa para librarse de su grupo de amigos e irse a seguir sobreesforzando en alguna parte.

Ese maldito nerd Sin poder evitarlo el Alfa dio media vuelta en dirección a la biblioteca donde sabía que encontraría al de ojos esmeraldas.

- Hey Bakubro! ¿A dónde vas? - Kirishima inquirió inmediatamente se dio cuenta que Katsuki ya no iba con ellos.

- Qué te importa pelos de mierda- respondió Bakugou tan mordaz como siempre.

Dulces SueñosWhere stories live. Discover now