EL PESO DEL SILENCIO

CAPITULO 4- IZZIE CASPER

Tenia 7 años cuando pasé por un gran trauma que me dejó con algunos problemas y cambios de humor, no quería ir al colegio, comía sola, no salía de mi habitación, mamá comenzó a notar todo mi cambio y me llevaron con un psicólogo, con algunas terapias y un poco de tratamiento, lograron estabilizarse.

*Flashback *

Íbamos a gran velocidad, papa había tomado un poco de alcohol en casa de los abuelos, y mamá estaba molesta, yo estaba tan pequeña y tan indefensa, que desde el asiento de atrás con mi cinturón de seguridad, yo solo tapaba mis ojitos porque tenía miedo.

-Óscar baja la velocidad por favor- mamá gritaba enojada- tenemos a la niña y yo siento que el bebé se saldrá en cualquier momento.

Mamá tenía en su panzita un bebé, aunque yo quería niña, cuando me dijeron que era niño igual estuve feliz, pues tendría con quien jugar, anhela que el naciera, le habíamos comprado ropita, yo le hacía dibujos, eh hize que papá dividiera mi habitación de niña y niño para tenerlo junto a mi, yo cuidaría de él, ese mismo día mamá me había dicho que faltaban solo 62 días, los contaba para que llegaran rápido.

-No tengas miedo amor-decía papá con voz suave-vamos bien por acá no podemos ir despacio sabes que nos robar

-Pero solo un poco más suave-insistia mama- la carretera esta oscura y esta lloviendo por favor.

Papá intentó bajar la velocidad, por tanta insistencia de mamá, no sabía que pasaba,cuando solos escuché un grito de mama y una fuerte luz me hizo cerrar los ojos con fuerza, sentimos un golpe fuerte y el carro daba vueltas, no recuerdo más nada porque creo que me dormí, cuando volví a abrir mis ojitos me encontré en una cama con una aguja en mi brazo, papá a un lado de mi en un sofá, y con algo en su cuello y en el brazo, no sabía cuántos días había pasado pero según papá cuando le pregunté fueron varios.
-Despertaste pequeña-hablaba en susurro feliz-vamos ya el doctor te examinó y estas bien, es hora de volver a casa-dijo saliendo a buscar un doctor.
Mamá no estaba, y un taxi nos llevo a casa, cuando llegamos ella estaba en una silla de ruedas, un poco cabizbaja, y ya no tenía panzita, corrí a abrazarla y darle muchos besos, aunque mi cuerpecito dolía mucho y mi cabezita, no me importaba la extrañaba.

-¿mamá ya salió el bebé?-pregunte con emoción-porque ya no tienes panzita

Mamá bajo la cabeza y comenzó a llorar me tomó entre sus brazos y me abrazo tan fuerte, no sabia que pasaba,

-lo siento pequeña pero el bebé no vendrá-me decía llorando-el bebé se fue al cielo con Dios.

Ya sabía lo que eso sucedía, mamá me lo había explicado el día que había muerto la abuela, estaba muy triste, yo lo esperaba y lo necesitaba.

*Final del flashback *

Eran al rededor de las 3:00pm el sol estaba tan fuerte que quemaba mi piel blanca, había un poco de viento y mi cabello negro volaba en sentido a el,
Iba camino al psicólogo, ¡de nuevo! Aunque no me gustaban las terapias me toca, pues tenía rato sintiendo tantas cosas que ya era imposible seguir ocultandolo, o lidiando sola con todo, la Sra Amy me había traído la primera vez a esta clínica, estaba tan mal que solo me tocó acudir a la mamá de Lú, sabía que sería de buena ayuda y muy discreta, le comenté mi problema, no todo claro. Habían muchas cosas que no podía saber, ella intento ayudarme pero no se lo permite. No quería ocasionarle problemas, le dije que ya era mayor de edad y podia solucionarlo, que si se me salía de las manos acudiría a ella.
Ella lo respetó aunque dudaba,
Al entrar al gran edificio donde se encontraba el psicólogo, me encontré en recepción a la secretaria, era una señora sencilla de cabello ondulado en una coleta alta y ropa nada llamativa.