-Buenas noches, Buck.
El pequeño Chris se acercó hasta Buck para darle un beso en la frente y caminar hacía su habitación. El rubio estaba tumbado en el sofá de Eddie, viendo como este acompañaba a su hijo a la habitación. Una vez los ve desaparecer, alarga el brazo y mira su teléfono móvil. Abre la conversación con Taylor y suspira. Se queda unos segundos contemplando su foto.
-¡Cierra la puerta, Buck ronca mucho y muy fuerte!
Levanta la cabeza, ofendido por ese ataque y ve salir a Eddie con una sonrisa cerrando la puerta tras de sí. Se disculpa con los hombros antes de apartar los pies de Buck y sentarse a su lado.
-Tus ronquidos le gustan más de lo que parece, créeme.
-Eso espero, porque si no va la próxima vez no vamos al zoo.
Eddie suspira y se estira en el sofá después del día agotador que han tenido. Mira a su lado, a Buck, quien sigue contemplando la pantalla de su teléfono móvil con el ceño fruncido, como si esperase que sonase repentinamente con unas disculpas.
-Entonces... ¿Qué pasó?
El bombero rubio suelta un enorme suspiro y deja el teléfono a un lado. Se coloca una mano en la frente y pasa los pies por encima del regazo de su compañero.
-No lo sé. Dijo que quería centrarse en su carrera. Que estos meses habíamos estado bien, pero que ella siente que yo necesito otras cosas, y que sabe que quizás no pueda dármelas en mucho tiempo.-Hace una pausa para tragar saliva.-Yo... Le dije que podía esperar. Y ella aún así dijo que me estaba haciendo un favor.
-Y lo está haciendo Buck, solo que ahora no lo ves.-Eddie coloca una mano sobre la rodilla de su amigo, tratando de consolarlo.
-¿Qué clase de favor es dejar a una persona?
-Ella entiende que vuestros caminos son distintos, Buck. Te aprecia como amigo, y eso hace que ella sea incapaz de mentirte, aunque eso implique prescindir de... vuestra intimidad. No quería que esperases eternamente.
-Agh, cómo sea. A veces creo que simplemente mi destino es estar sólo.
-Tienes a Chris. Y me tienes a mi. Y dudo que Maddie, Chim, Hen o Bobby no te peguen si te oyen decir eso.
La mano de Eddie juguetea con su rodilla, y reconforta en algo a Buck, quien agradece tener el hogar de su amigo para esconderse cuando el resto del mundo pesa. Eddie tiene razón, siempre ha estado en las peores circunstancias, y ahí siguen, juntos, afrontando el mundo.
-Cómo sea, gracias por dejar que me quede, Eddie.
-Esta es también tu casa, Buck. Mañana tenemos que entrar a las ocho, así que deberíamos dormir.-Su amigo le lanza una de las almohadas que ha traído para él a la cara y Buck la recibe, sonriendo aún con tristeza. Eddie se levanta y se marcha rumbo a su habitación.
Buck se queda unos segundos plantados, notando el hueco de su amigo en el sofá. Repentinamente hacía más frío en el salón, y todo parecía tener un filtro azul.
-Bah...
Se levanta y va a su mochila sobre la mesa. Saca un pantalón gris de pijama y una camiseta vieja del 118 que utiliza para dormir. Se cambia el pantalón allí mismo, se saca la camiseta y se coloca la nueva. Toma su cepillo de dientes y camina al baño. Eddie está dentro, ya con el pantalón de pijama y sin camiseta, cepillándose los dientes. Buck se colocó a su lado, enseñando el cepillo y tomando algo de pasta.
Los dos, en silencio, se contemplan en el espejo hasta que Eddie no puede evitar reírse, a lo que Buck le empuja, sabiendo que el motivo de su risa es alguna burla sobre el bombero.
-¿Qué?-Pregunta tras escupir, mirando al moreno.
-Hen tiene razón. Eres como un golden.
-¿Por qué me veis así?
-Porque caminas como si todo dependiera de alguien más, Buck. Eres como un perro abandonado. Necesitas seguir a alguien. Hoy estabas super animado y mírate, ahora cuesta levantarte.
Eddie le recrimina aquello de manera que intentaba ayudarlo. Pero Buck no lo relacionaba aún como debía sonar.
-Bueno, tú actúas como si fueses el rey de hielo, que has roto con Ana y estás igual.
El bombero moreno abrió la boca sorprendido. Luego dejó caer la cara hacía un lado, notablemente ofendido. Intentaba buscar las palabras exactas, pero no parecía dispuesto a responder.
-Buenas noches, Buck.
Y pasó a su lado, golpeando su hombro con la mano y sin mirarlo directamente. "Mierda, Buck... La has cagado." Sin embargo se quedó allí de pie viendolo marcharse, y cerrar tras de sí la puerta de su habitación. Y lo único que quería hacer Buck ahora era ir a buscarlo y disculparse. Pero ya la había cagado demasiado. Apesadumbrado, volvió a su sofá y se acostó, cerrando los ojos y no pudiendo dormir hasta bien entrada la noche.
No se inmutó hasta que horas después, sobre las siete de la mañana, un ligero temblor empezó a sacudir la casa, escuchando la voz de Chris.
-¡Papá! ¡Buck!
Buck abrió los ojos. No era un sueño, ni su imaginación. El suelo temblaba, e iba en aumento. Se estaba produciendo un terremoto.
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Bad Day Face - Buck and Eddie Endgame (Buddie)
FanfictionLa vida en el 118 nunca ha sido fácil. La familia escogida es la única que parece capaz de hacer más llevadero el trabajo para los bomberos del equipo del capitán Bobby Nash. Sin embargo, el grupo amenaza con romperse debido a las tensiones que la v...