Arthur

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_ ¿Le contaste sobre nuestra boda a Obi-Wan? _ la cara de incredulidad de Padmé fue sustituida por una radiante sonrisa _ ¡Eso es maravilloso! Oh, Ani. Sé lo importante que es para ti Obi-Wan y...

_ Lo perdí _ la sonrisa de la dama fue borrada de su rostro _ Él le dirá al Consejo sobre nuestro matrimonio. Me expulsarán de la Orden y su esfuerzo habrá sido en vano.

_ ¿Él te dijo que nos delataría?

_ No lo hizo, pero estoy seguro que lo hará. Él es tan recto, tan fiel a la Orden, jamás consentirá nuestra unión si continuo siendo un Jedi. Debí ser más cuidadoso, no tenía porqué llamarte sabiendo que él entraría en mi habitación en cualquier momento.

_ Quizá sea lo mejor. Ani, que dejes la Orden no es el fin. Podríamos vivir en Naboo, sin ocultar nuestro amor. Tendrías una vida normal, puedo recomendarte como piloto y mecánico con algunos conocidos.

_ Si, eso suena bien _ contestó sin emoción alguna _ ¿Pero te imaginas? ¿Yo, viviendo una vida normal mientras mi maestro lucha por esta guerra que parece no tener fin? Él no sobreviviría, es tan terco, siempre peleando sin pensar en él. Me necesitará, lo sé.

_ Anakin, por si lo has olvidado, Obi-Wan es un maestro Jedi, lo ha sido durante toda su vida. No es una damisela en apuros que necesita ser salvada por ti.

_ Tú no entiendes, Padmé.

_ No, no entiendo _ la paciencia de la dama estaba al límite _ Hemos estado casados por dos años. ¡Dos! Y nunca te he tenido realmente para mí. Pasas más tiempo con Obi-Wan que conmigo, he sido paciente, comprensiva, pero esto supera todo mi autocontrol. Tal vez, que Obi-Wan nos haya descubierto, sea una señal para por fin ser felices. Quiero a mi marido, Ani. Te necesito.

_ Y yo te necesito a ti. Pero mi maestro...

_ Dijiste que él se alegró por nosotros y que te ofreció su apoyo. No te está abandonando, al contrario, quiere que seas feliz.

_ Yo no puedo seguir mi vida sin él.

_ ¿Osea que de eso se trata? _ Padmé sintió las lágrimas en sus ojos _ Ni siquiera estás eligiendo ser un Jedi, no, lo estás eligiendo a él. Tienes razón, Anakin. No puedes dejarlo, así que lo mejor es que nos demos un tiempo.

_ Padmé yo te amo _ dijo mientras tomaba la delicada mano de la mujer.

_ Si, Ani, lo sé. Pero a veces el amor no es suficiente.

Horas más tarde, cuando Anakin se recostó en su recámara, se dio cuenta que la ruptura no había dolido tanto, no como él imaginó. Fuerza, acaba de perder a su ángel y lo único que siente es alivio. La puerta de su dormitorio se deslizó revelando la silueta de Kenobi. Había decidido darle la clave de acceso para casos de emergencia, pero al parecer, su maestro, no tenía ningún respeto por la privacidad de su ex padawan.

_ Aquí estás. Necesitamos hablar, Anakin.

El joven de rizos dorados se sentó en su cama, el cobrizo en cambio, tomó asiento en el sillón cercano.

_ ¿Está decepcionado, no es así? _ la nariz roja del muchacho revelaba que llevaba rato llorando.

_ ¿Porqué me ocultaste algo tan importante, Anakin? Debiste decirme la verdad, yo pude ayudarte con el Consejo, persuadirlos a dejarte ir y ser feliz con Padmé.

_ Nos vamos a divorciar.

_ ¿Porqué? _ el rostro de Obi-Wan mostraba confusión.

Oculto en la galaxia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora