[👻] Día cuatro: Perspectiva de un fantasma/muerto

9 1 0
                                    

¿Creían estos dos que iban a burlarse de mi muerte de semejante forma?

No, queridos.

Bruja, viva o muerta, para dar guerra.

Claro que la causa de esa hechicera fui yo. Por supuesto que el tormento del cementerio fue mi culpa. ¿Y que quedaba? Todavía mucho por llover... Ese chico se había metido con la bruja equivocada y mientras mi alma rondase por la tierra iba a atormentarlo.

Lo del cementerio fue fácil, era un chico asustadizo que se quería hacer el valiente. Pero lo más divertido, sin duda, fue cuando se despertó en su habitación sabiendo que no había sido una pesadilla.

—¿Quién anda ahí? —preguntó, poniéndose a la defensiva.

Mi primera reacción fue hacerle cosquillas en la nuca para que se volteara asustado. Una pena que no pudiera escuchar mi risa burlándome de él.

Le siguió el truco de abrir las ventanas y acto seguido que algo cayera al suelo.

Estaba acojonado.

Así, día tras día, noche tras noche. Volviéndolo loco hasta el extremo de perder el juicio.

—¡Ya basta! —el desgarrador grito que soltó se escuchó en toda la casa.

Se tiraba del cuero cabelludo como si eso fuera a sacarme de allí.

Se rasguñaba hasta el punto de hacerse sangrar a sí mismo.

Y yo disfrutaba de cada acción de sufrimiento.

Las luces de los relámpagos que se colaban por la ventana lo llenaban de terror.

Era ahora o nunca... Y fue ahora.

Aprovechó que yo le había abierto la ventana y se tiró por esta sin pensárselo dos veces, la caída dejó un gran charlo de sangre a su alrededor y una muerte segura.

Feliz muerte, corazón.

Retos de escritura Where stories live. Discover now