Sweet Little Creatures [L.S] (Trilogía SLC I) [M.Preg]

Valiente

Louis llegó con muchas bolsas en mano, Harry salió de prisa para ayudarlo y no dejar que cayeran nada de las compras. Al parecer Janet tenía una gran idea con la nueva habitación de Thommy.

—Muy bien, está todo afuera. Hijo, ¿puedes subir todo esto y sacarlo de sus bolsas en la habitación?

Louis asintió.

—Puedo ayudarle también, tres pares de manos son mejor que dos.— sonrió.

—Tienes toda la razón, cariño. Gracias.

Louis tomó cuatro bolsas, dispuesto a subirlas a la habitación, Harry tomó las otras cuatro que sobraban. Subieron por las escaleras con sumo cuidado, un mal paso y tiraban todas las compras.

Ya en la habitación, y comenzando a sacar todo, Harry pensó en contarle a Louis sobre su siguiente encuentro con Nathan. Sabía que no le parecería del todo que Nathan siguiera de insistente con él. Ya era algo cansado tanto como para él, como para Louis.

—Cariño.

Louis elevó sus cejas, diciéndole con ese simple gesto que tenía su atención aunque su mirada estaba fija en un lindo juguete que compró su mamá para el pequeño.

—Nathan me llamó.

Y ahí se perdió la atención de Louis en el juguete, mirando a Harry con un ligero semblante molesto.

—¿Qué quería aquel tipo?

—Quiere hablar conmigo de nuevo. Dice que necesita arreglar bien todo conmigo, también me llamó para saber si tuve algo que ver con lo de Zayn.— mordió su labio.

—Parece que no se rinde, eh.— rio con careza de humor. —¿Y lo verás?

—Sabemos que si me niego seguirá insistiendo.

Louis pasó su lengua por sus labios.

—No sé qué tiene en mente, pero no me agrada nada todo esto.— hizo de lado su boca. —Ten cuidado, amor. No quiero que te haga daño de nuevo.

—Estará Niall en la casa, lo cité en horario de trabajo para que no pasara algo malo, puedes estar tranquilo, Lou.— dio una caricia sobre la mejilla del castaño.

No le gustaba que estuviera tan preocupado, de verdad no le gustaba que Nathan se le acercara.

—No quiero que te haga nada, si necesitas algo puedes llamarme, lo sabes.

—Lo sé, cariño.— asintió. —Sólo serán unas palabras y lo echaré de la casa.— causó una risa en el ojiazul.

—Está bien, amor.

Niall lo seguía por todas partes de la casa, los niños estaban dormidos, era hora de su siesta.

El castaño acababa de escuchar la historia de Harry que olvidó decírsela, todo sobre Nathan. Ahora entendía porqué se le hacía conocido el nombre, Harry lo mencionó hace tiempo y del enojo lo olvidó. Estaba del mismo lado de Louis, del lado de odiar a Nathan a pesar de que este siguiera empeñado en disculparse.