𝐿𝑜𝑣𝑒 𝐿𝑒𝑒 (𝐿𝑜𝑣𝑒𝑙𝑦) / 𝐻𝑎𝑒𝑟𝑖𝑛 - 𝐻𝑦𝑒𝑖𝑛/𝐹𝑖𝑛𝑎𝑙𝑖𝑧𝑎𝑑𝑎/

사 - 4

—Capitulo Cuatro—

La joven alfa miró por décima vez el reloj que yacía aferrado a su muñeca diestra, y soltó un suspiro al ver que las manecillas del mismo solo se habían movido para marcar el avance de cinco minutos.

Su corazon detuvo por un par de segundos su latir ante la llegada del aroma perteneciente a la castaña-rubia, al tiempo en que los nervios empezaron a hacer que sus manos temblasen aun mas por los aromas que acompañaban de cerca a su mayor, y mordió el interior de su mejilla izquierda al oir los pasos acercarse a ella.

La intensidad con la que llego la mezcla de olores le hizo levantar la vista nada más los sintio en su espacio personal, su ceño se frunció al ver como Haerin le miraba.

—¿Estas bien? — Fue lo que su mayor le dijo pasados unos segundos.

—Si, ¿Por qué no lo estaría? — La duda era genuina, ella no sabia la razón del porqué la adversa le cuestiono aquello.

—Tus manos están temblando. — Señaló Haerin.

—Es por los nervios.—Mencionó la menor con un tono de voz bajo.

—¿Segura que estas bien?. — Murmuró la omega sin estar del todo calmada por la respuesta.

—Estoy bien Unnie, no hay de que preocuparse. — Aquellas palabras lograron calmar un poco a la mas baja. — Por cierto, hola. —

—Ellas son Danielle-ah y Hanni-yah. — Presentó Haerin a sus amigas mientras tomaba la mano de la menor. — Y ella es Hyein-ah. —

—Creo que es momento de ir a otro lugar, asi podremos conocer a la alfa de Haerin-ie. — Los rostros de las menores se tornaron rosas al oir las palabras de Hanni.— Son tan adorables. —

Hyein sonrió, las amigas de su omega le habían caído bien, y sabía bien que las burlas serían parte del ambiente cada vez que ella estuviese ahí.

Durante poco más de una hora, Hyein pudo observar la forma en que las mayores trataban y cuidaban de la castaña-rubia, le hizo sonreír el saber que la de mirada felina tenía a un par de amigas realmente atentas.

—¡Danielle consigue ese para mi! —

El tono de voz junto al nombre a secas de la alfa de melena rojiza hizo que el ceño de la alfa menor se frunciera, tanto así que no pudo evitar dirigir su mirada a Haerin.

—Son de Australia. — Mencionó la omega esperando que su menor entendiese lo que quiso dar a entender. — Su cultura es diferente, por lo que aun les cuesta ceñirse a la nuestra. — Dijo despues de ver la confusión aun en el rostro de la alfa.

—¡Por favor Dani! — Los pedidos de la omega mayor hicieron que la Australiana menor asintiera ante sus palabras. —¡Gracias! —

Hyein fue totalmente consciente de la forma en la que esas dos se miraban y por un momento creyó que Haerin lo sabría, sin embargo prefirió no decir nada por respeto a las mayores.

—¿Quieres que trate de conseguir uno de esos obsequios? — Preguntó observando como su mayor negaba. — De todas formas lo intentare. —

Kang rio al ver que la alfa corría hacia el lugar donde Danielle y Hanni se encontraban, sus orbes mieles observaron atentamente cada uno de los movimientos que Hyein hacía para poder ganar el tan ansiado premio.

Media hora despues una sonriente Hyein camino hacia la omega de brillantes orbes mieles, en sus manos yacía un tierno peluche de gato.

—Creo que Hanni Unnie podría casarse contigo si le consigues uno. — Susurró la omega abrazando al felpudito amigo, sus palabras hicieron reír a Hyein.

—Les he dicho si querían que les ayudase, lo que obtuve fue una mirada casi asesina por parte de Danielle-ah. —

—Déjala, esta celosa de que otra encantadora alfa llegase a la vida de Hanni. —

—¿Crees que soy encantadora? —

—Ahora mismo no. —

Hyein no pudo decir nada mas porque una Hanni feliz se habia lanzado a ellas.

—¡Mira lo que Danielle consiguió para mi! — Habló dejando ver al peluche en forma de conejito, este abrazaba una zanahoria.

Definitivamente Hyein podría acostumbrarse a la presencia de las otras dos en su vida.