Virus,Apocalipsis (Chandler Riggs)

Capitulo 10

Los gruñidos de aquellos caminantes incrementaban su sonido conforme nos acercábamos.
Estábamos a solo unos pocos metros de ellos. Algunos caminantes giraron al notar nuestra presencia.

La moto de Daryl paro en seco al igual que el automóvil.
Un caminante caminó hacia Daryl, quien le disparó una flecha en la cabeza, haciendo que este cayera en la tierra. Los caminantes lo comenzaban a rodear y este los golpeaba con su ballesta en la cabeza.

Bajamos de el auto y tome una pistola. Comencé a disparar y escuchaba a Maggie quejarse y maldecir mientras los caminantes se avecinaban contra ella.

Michonne los mutilaba y Carol tenía un rifle en la mano disparando.
En ese momento note la gran ausencia de Glenn. Ellos habían vuelto de la búsqueda sin Glenn.

Mis manos comenzaron a sudar al notar que las balas de la pistola se habían agotado, maldije por lo bajo y golpee al caminante con el arma.

Mi corazón latía a mil por hora. Sentía la sangre de ésos mordedores salpicar mi cara. Su pudrido aroma infestaba mis fosas nasales. Y sus gruñidos eran mas audibles y fuertes que nunca.

Cada minuto que pasaba había mas cuerpos de caminantes tirados en la tierra. La tierra que antes era cafe, ahora se encontraba color guinda, casi negro.

El sonido de un motor me hizo girar. Glenn venía hacía nosotros en un auto negro cubierto de polvo. Mire a Glenn reír mientras salía de el auto con armas, pero su sonrisa se borró en un instante.

Sentí como unas manos me tomaban de los hombros, luego escuche el gruñido, el maldito gruñido.
Gire forcejeando con aquel feo caminante, le faltaban dientes y era tan feo como una cucaracha. Empuje al caminante pero resultó inútil, este era demasiado pesado.

Escuche un disparo y mire al caminante caer. Los sonidos parecieron disminuir, el sonido de el disparo me había aturdido totalmente. Escuchaba solo un poco, escuchaba todo como una interferencia. Como un radio sin estación, sin señal. Mire a Maggie y mire sus labios moverse preguntándome si estaba bien.
Asentí aturdida y saqué un pequeño cuchillo de mi pantalón, empuje a un caminante con la pierna y clave el cuchillo en su cabeza varías veces, causando que la sangre manchara mi cuerpo.

El camión se encontraba rodeado por unos pocos caminantes.
Maggie caminó decidida hacía donde se encontraban. Todos la siguieron, incluyéndome.
Me encontraba caminando lento, estaba muy aturdida. Mi cabeza daba vueltas, pero caminé sin mirar atrás.

Me quedé sin moverme y sin matar a ningún caminante.
Mi sistema auditivo estaba regresando poco a poco. Podía escuchar la cosas un poco mas claras, pero no totalmente.

Alcé la vista y el sol me cegó, divisaba las tres figuras masculinas sobre el camión, pero no los divisaba bien.

Fije la vista en el suelo, el sol me había cegado.
Los caminantes yacían en el suelo tirados.

- Vamos bajen de ahí!- gritó Daryl.

Las personas saltaron de el camión y cayeron de pie en el suelo. Fue cuando divisé a ellos. Rick, Chandler y un hombre de piel oscura.

- Cual es tu nombre?- cuestionó Glenn.

- Bob- respondió el hombre sacudiendo su pantalón.

Gire la vista y pude notar que Chandler tenía la vista agachada. Pero al sentir la mirada sobre él alzó la cabeza y sonrío levemente.
Sus ojos se veían mas azules que nunca y su cara estaba cubierta de sangre al igual que su ropa.

Maggie fue la primera en romper aquel silencio incómodo yendo a abrazar a Rick y luego a Chandler. Eso causo que todos nos uniéramos en un gran abrazo.

- Basta de dramas- comenzó Daryl- tenemos que buscar un lugar para dormir.

Michonne se montó en un auto junto con Rick, Chandler y yo fui la última en subir.

Escuchamos la moto de Daryl encenderse, era hora de comenzar el viaje. Chandler miro el sombrero y alzó una ceja interrogándome.

- Daryl lo encontró- respondí al ver su cara de duda.

El asintió y río por lo bajo colocando su sombrero en la cabeza.

...

Después de horas de un agotador viaje, la motocicleta de Daryl paró en una casa, rodeada por unas frágiles cercas de metal. Había grandes árboles y un pozo. Parecía ser seguro.