Officer Friendly (Rick Grimes)

XXIV

- ¡NO ME VAS A VOLVER A TOCAR EN TU PUTA VIDA! - grité mientras Maggie me indicaba cómo respirar.

Durante estos últimos tres meses Maggie y Hershel me habían preparado para el parto, pero el dolor que estaba sintiendo hacía que descargase mi frustración en Rick. Estaba tan guapo como siempre, sus rizos estaban más largos al igual que su barba, parecía un mendigo, pero era mi mendigo. Aunque le odiase por haberme metido su pene y haberme dejado embarazada.

Después de que saliese nuestro secreto a la luz, las cosas se calmaron, Carl aún no nos había perdonado, pero al menos me soportaba en la misma habitación sin tener que huir. Lori tampoco me dirigía la palabra, tampoco hacía falta, ahora se hacía la víctima al estar embarazada y que su marido se fuese con otra, o sea, yo.

Por lo demás, el resto seguía como siempre.

- Vale, Louise, es hora de empujar. - indicó Hershel y seguí sus instrucciones - Respira. - Si no sale ya creo que me voy a desmayar - ¡Empuja! ¡Vamos Louise, ya está casi fuera!.

Podía ver a Rick llorando al ver a nuestro bebé salir. "Es una niña" escuché decir a Maggie.

- ¿Por qué no llora? - pregunté débil, la vista empezó a nublarse - ¿Por qué no llora? - Rick estaba junto a nuestro bebé, llorando cada vez más. Hershel le pidió espacio y comencé a temerme lo peor - mi bebé - susurré.

Cuando creí que iba a perder la consciencia, escuché el sonido que más estaba esperando. El llanto de mi bebé. Rick se acercó con ella en brazos " es preciosa" dijo y la colocó sobre mi pecho. Ambos besamos su cabecita, era como su padre había dicho, preciosa y muy pequeña.

- Ashe - murmuré antes de que todo se hiciese negro.

Desperté con algo de dolor de cabeza al escuchar a mi bebé llorar. Me incorporé y encontré a Rick meciendo a la niña.

- ¿Bebé? - pregunté pidiendo implícitamente que me la entregara.

La sostuve en mis brazos e intenté por primera vez darle el pecho que aceptó ansiosamente.

- Parece que Ashe tenía hambre - rió Rick al ver cómo se había agarrado a mi. Después nuestros ojos se conectaron, no habíamos pensado en un nombre anteriormente, pero habíamos estado de acuerdo en que ese sería su nombre. - ¿Lo elegiste por algo en específico?

- Mi hermana se llamaba Ashelyn - musité, no me gustaba mucho hablar de ello pero quizá era hora. - Era mi hermana gemela, nos parecíamos tanto físicamente que hasta nuestros padres se equivocaban. Sin embargo, éramos totalmente distintas, yo siempre había sido más reservada y ella más extrovertida. - Rick asentía siguiendo cómo recordaba la razón por la que vine a Estados Unidos y dejé Bristol atrás - no hablo de ella porque una parte murió con ella y es demasiado doloroso verbalizarlo. - comenté notando cómo mi corazón se estrujaba - Cuando tenía 17 años empecé a salir con un hombre... mucho mayor que yo. Mantuvimos nuestra relación en secreto, la única persona que lo sabía era Ashelyn, era imposible ocultarle nada. Era... él era mi profesor de Ciencias. - miré a el rostro contrariado de Rick.

- Sea lo que sea, ese hombre no debería haber puesto una mano encima tuya.

- La cosa es que dejamos de vernos cuando me fui a la universidad, no podía mantener esa relación. Me di cuenta de que me controlaba más de lo que debería. No fue de la noche a la mañana, empezó siendo con que prefería que pasase todos los sábados con él y no con mis amigas. Acabé perdiendo mis amistades, hasta Ashelyn estaba molesta. Me gradué a los 21, y empecé a trabajar en una escuela de educación infantil. Un día me llamaron mis padres para decirme que Ashelyn ya no estaba - mi voz se rompió, haciendo casi imposible que pudiese continuar si no fuese porque Rick se colocó en la cama detrás de mi, sus piernas protegían mi cuerpo mientras una de sus manos acariciaba la pequeña mano de nuestra hija y la otra masajeaba mi hombro. Dejó un beso en mi cabello y retomé el hilo de mi historia. - Había sido él, no sabemos si fue porque se pensaba que había sido yo o porque sabía que era lo que más quería en mi vida. No aguanté mucho más tiempo allí sabiendo que no le habían encontrado. Así que decidí empezar de nuevo aquí. El resto ya lo sabes.

No hizo falta más. Dejé a Ashe en la cuna y me refugié en nuestras sábanas y el abrazo de Rick. Como siempre, su simple aroma conseguía calmarme.

Shane se estaba comportando de manera muy extraña y un tanto errática. Demasiado para mi gusto. Ahora tenía que proteger a Ashe, ya no era yo sola. Rick también se había dado cuenta, pero no quería causar problemas en la convivencia. Este tema nos había llevado a discutir varias veces. Debía preocuparse por el bien de nuestra hija, no digo que le echen, pero que al menos hable con él para que cambie de actitud. No sé si Hershel va a aguantar mucho más y sé que Rick no dejaría a Lori y Carl irse sin él ¿y yo? Los Greene eran mi familia, pero Rick también.

Me frustraba ver que la única que se sacrificaba era yo. Al menos hasta ahora, anteponía a Rick a mi vida, pero con Ashe ahora no sabía si seguiría tomando las mismas decisiones.

"El granero está lleno de caminantes". Sí, lo habían dicho. El secreto salió, secreto que ni yo sabía. Me enfadaba haber puesto a mi hija en peligro porque Hershel no puede procesar que esos ya no son las personas que solíamos conocer.

Ahí fue cuando Shane perdió completamente la cabeza y abrió la puerta del granero. Fue una masacre total. El olor a podrido era vomitivo.

¿Qué pasó después? Parecía que no paraban de ponernos en peligro una vez después de otra. La última fue traerse a un preso en la última expedición.

Estaba en la cama, después de haber dejado a Ashe dormida en su cuna. Rick entró a media noche después de haber hecho su guardia y se tumbó a mi lado, envolviendo mis caderas con sus brazos. El calor de su cuerpo me relajó. Estábamos pasando por un mal momento en nuestra relación, pero mi amor por él no cambiaba. Tenía la capacidad de hacer un pequeño gesto y cambiar completamente mi estado de ánimo. Hoy había sido el abrazo, una vez ahí, me volvía a sentir segura. Volvía a sentir que todo podía ir bien. Que lucharíamos juntos, pero aún no sabía cómo iban a cambiar las cosas y cómo nuestras vidas se pusiera patas arriba.