Cuatro de diciembre

2K 245 16
                                    


"Draco..." Fue un balbuceo suave, apenas audible.

"Mmm..." Aunque aquello sonó más como gruñido fue una señal de que lo estaba escuchando.

"Draco..." Reiteró picando leve el bícep del alfa.

"¿Mmm?" Está vez fue el alfa quién repitió el mismo ruido.

"Dragón, hazme caso..." De nuevo picó el hombro del mayor logrando que entreabriera uno de sus ojos para mirarlo apenas.

"¿Harry?" La voz grave y adormilada hicieron sentir mal al omega. "¿Qué hora es?" Despacio se rodó en el nido para quedar boca arriba.

"Faltan quince para las cuatro." Se mordió los labios dudoso de haber despertado al mayor. Era una tontería y al día siguiente día tenía trabajo.

Tonto. Se recriminó.

"¿Qué pasó, Harry? ¿Está todo bien?" Lo miró fijamente durante unos segundos; el azabache completamente avergonzado se cubrió con las cobijas. "Todavía te veo, león." Se rió el rubio tirando suavemente de las mantas.

"Es que hice algo malo..." Farfullo todavía debajo de las mantas, Draco se sentó frente al omega todavía cubierto.

"¿Qué sucedió?" Pelearon unos segundos hasta que las mantas desaparecieron.

"Me vas a regañar..." Apenas su bebé se movio empezó a acariciar su vientre. "y es muy tonto."

"Venga, Harry, dime ya, me estoy preocupando." Tomó una de sus manos entre las suyas haciéndola desaparecer prácticamente.

"Es que dijiste que no lo hiciera pero me comí tu pastel de chocolate porque tenía hambre..." Hipo tratando de contener las lágrimas.

Malditos sentimientos que lo hacían llorar por todo.

"Oh, mi vida..." lo atrajo hasta su regazo y llenó su rostro de besos cálidos.

"No quería, pero pecesito tenía hambre y ahora la culpa no nos deja dormir." Explicó Potter haciendo reír al alfa.

"No te preocupes, Harry, después compraré otro, ¿si?" Lo tomó de las mejillas para plantar un último beso en sus labios.

"Pero tú querías..." Si bien era algo que Draco era reacio aún a las cosas muggles él podría atesorar con su vida el pastel de chocolate y tener varias semanas con antojo, no podía enojarse.

No cuando tenía al omega más bonito delante de él mirándolo con ojos brillantes y una expresión de preocupación en el rostro.

"Está bien, querido, conseguiré más pastel después, jamás pondría un pastel sobre ti, ¿bien?" Rozó sus narices en un beso esquimal.

"¿Entonces no estás enojado?" Sonrió dulce.

"Por supuesto que no, mi amor." Nuevamente dejo que la risa escapara de sus labios.

"¿Viste, pecesito? Papá no está enojado." Se picó el vientre, en respuesta tuvo una pequeña patada haciéndolo reír.

"Es que bebé no me dejaba dormir por la culpa." Confesó mirándolo.

Los dos se sonrieron totalmente enamorados.

"Tengo que volver a dormir, omega, mañana hay que trabajar." Harry asintió rápidamente.

"¿Me puedes abrazar?" Apenas se acomodaron en el nido lleno de ropa, almohadas y cobijas Draco lo abrazo.

"Puedo hacer todo lo que me pidas, mi vida." Dejó un pequeño beso en la marca del lazo antes de acurrucarse junto al amor de su vida y caer en un profundo sueño.

Christmas day - DrarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora