II

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✧UN ACOSADOR Y LADY GAGA

—¿Y qué pretendes que haga? —inquirí levantando una ceja.

—¡No sé! —se estresó—. Pero cómo vea el jarrón roto...

—Ya, ya —no para de decirme que el jefe me despedirá, que cansina—. Me tiro al buenazo de su hijo, nos enamoramos y me perdona la vida, ¿Qué te parece? Así ya no me despiden...

Le hice una sonrisa tan falsa que nos reímos.

—Ahora enserio: ese jarrón es importante para ellos. ¿Qué haras?

—Nada. Diré que la culpa es de Azami —mi compañera del servicio que limpiaba la mansión—. Así, con un poco de suerte, nos libramos de ella.

Nada, personal, solo que a veces me ponía histérica

—Que malvada... —echó alcohol en la sartén, y salió una llamarada de fuego de un tamaño descomunal. Amaba el fuego.

—La que más —sonreí malvadamente y toque las puntas de mis dedos de forma malvada.

Resulta que mientras estaba limpiando la habitación más grande de la casa (que no es la principal) rompí el jarrón que contenía las cenizas de la mujer de William, el jefe. Le había contado a Izzy, mi mejor amiga y primera cocinera de la casa, para que me ayudara, pero no ayudaba que entrara en un bucle de repetir que he de hacer algo o me despedirán. Y mi increíble idea era culpar a Azami. Maravilloso ¿Verdad?

—Isobel, Liam quiere que le hagas algo para comer.

Esa era Mila, la puta personal de Liam, el mediano de los hermanos Walker. Bueno, no puta, pero si se acostaban juntos. Además, ella trabajaba ahi como secretaria de Wiliam, y tenía y siempre tendrá nueve años más que Liam, y solo por eso se creía que era la dueña de la casa.

—¿Por qué no te come a ti?

—¿No has de trabajar? —me miró con odio.

Siempre nos habíamos odiado. Mila era la mejor amiga de mis hermanastras, y como buena mejor amiga también le gustaba hacerme la vida imposible y humillarme.

—Claro, pero siento informarte que estoy de descanso. No como otras... que haces horas extras y no te las pagan.

—Es la envidia.

Envidia la tuya saco de patatas andante.

En eso, entró Liam, el único de los dos hijos machos que solía habitar en la casa. Iba sin camiseta enseñando su trabajado abdomen y la V tan atractiva de los hombres. Los dos hijos Walker la tienen, y del padre ni quiero saberlo. Y un dato curioso es que iba MUY despeinado, como siempre.

—¿Qué desea señor ? —pregunto Izzy, poniéndose recta y seria.

No era ningún secreto entre nosotros (yo, Azami, Izzy, Susy y Dixon) que a Izy le gustaba Liam, aunque fuera menor.

Le lancé una mirada picara y ella se sonrojo mientras mordía una manzana, apoyada en la encimera de la isleta.

—Algo para comer, lo que sea, por favor... —tenía modales. Mi mejor amiga asintió antes de ponerse a trabajar, y la mirada de Liam recayó en mí—. El jarrón de la quinta habitación está roto, ¿sabes quién ha limpiado esa habitación hoy?

Miré a Izzy, y ella me miró de reojo.

—Quien sabe que irresponsable lo habrá roto... —me encogí de hombros y le sonreí divertida antes de volver al trabajo.

Me puse los auriculares, y le di al play a la última canción que estaba escuchando antes.

Rehab de Amy Winehouse retumbó en mis oídos. Coji la aspiradora, y mientras limpiaba el despacho de William iba moviendo las caderas al ritmo de la música.

Era libre, Will no estaba ahí ese día.

De un momento a otro, agarre el mando del pequeño televisor y lo utilice de microfono.

You'll know, know, know —hice varias poses ridiculas— I ain't got the time. And if my daddy thinks I'm fine —bae sexy hasta el suelo, como te enseñan en Legally Blond—. Just try to make me go to rehab. I won't go, go, go...

Cuando me tropecé con el aspirador y caí al suelo y mis audífonos salieron disparados, me di cuenta de que había alguien espiándome cuando oí sus aplausos. Era Nick.

El chico es un espécimen de otra galaxia. A quien no le guste, que le miren la cabeza, porque no hay más que verlo para que se te mojen las bragas.

Pelo azabache, medio largo, y casi siempre que lo veo lo tiene despeinado. Su barba incipiente de tres días, como si no hubiera salido de la cama en semanas, pero en este caso es muy atractiva, le da un toque varonil a su cara aniñada.

Y del cuerpo ya ni hablamos.

—No sabía que te paguen por dar espectáculos... —comentó divertido.

Hacía dos años que ya no vivía ahí, y cuando se largó definitivamente, entre los empleados, hicimos una fiesta para celebrarlo. Este chico era un completo estupido. Siempre nos hacía la vida imposible a todos, y lo disfrutaba como el que más.

—No sabía que acosaras gente —ladeó la cabeza y yo entrecerré los ojos.

—Hace años que no lo hago —niegue entre divertida e incrédula—. Igualmente, no llevo el suficiente tiempo como para que se llame acosar.

—Claro, y yo soy Lady Gaga.

Lo que viene siendo que no me lo creía, pero el ya entendio la referencia al sonreir por mi sarcástica ocurrencia.

—Eres libre de creer lo que quieras.

—Dios no quiera que me obligueis a pensar lo que vosotros queráis solo porque me pagáis —puse mi mano en mi frente, haciéndome la dramática.

Se rió de mi sarcasmo. Señor dame paciencia. Su sonrisa era perfectamente blanca. Que envidia de chico. Y cuando sonreía se le marcaban los hoyuelos. Si no fuera tan insoportable, arrogante y no tuviera un ego del tamaño de esta mansión, hasta me hubiera gustado desde hace mucho.

—Bueno, yo solo venia a por unos documentos de la empresa... —se acercó a los cajones del escritorio de roble del señor William, y después de abrir dos cajones más, agarró una carpeta con una gran cantidad de papeles—. te dejo con el concierto...

—Aja... —me sonroje un poco, y me gire a la aspiradora para disimularlo—. Adiós Nick.

En aquel momento, me daban igual los formalismos, el nos los merecía, el no me paga, esa era mi excusa.

—Adios... —maravilloso, no se sabía mi nombre.

—Eve —le recordé por si no se acordaba, o si ni siquiera lo sabía.

—Adios Eve —le sonreí, y él cerró la puerta, no sin antes devolverme la sonrisa.

Era mono, pero muy arrogante, y en ese momento, yo no sabia que seria mi perdición, pero ahora, ya me daba igual.


HOLAAAA

Bueno, por aqui el capítulo 2.

He decidico 1 cosa. 

Mas menos mi idea era que tuviera unos veintitantos caps + el epilogo. Y aproximadamente, si voy publicando uno cada dia, creo que puedo llegar a acabarla antes de fin de año.

 Aunque, aviso, solo intentare hacerlo. NO ASEGURO NADA.

Nos leemos<3.

L.

Una Cenicienta DiferenteWhere stories live. Discover now