All with you [Yumark]

Capitulo 1

El Alfa entra a la habitación de su pequeña niña, abriendo las cortinas para que la luz del sol entrara por estas; la pequeña Ningning comenzó a removerse en su cama, dándose la media vuelta para que la luz dejara de pegarle en sus ojitos y pudiera seguir durmiendo plácidamente, mientras abrazaba fuertemente a su pingüino de peluche.

-Ning...- habla suavemente el Alfa, tratando de despertar a su pequeña hija para ir al jardín de niños.

-Papi...- Siseo la pequeña Nakamoto, dándose la media vuelta, comenzando a tallar sus ojitos para que se acostumbrara a la luz del día, para después sentarse en su cama, mirando a su papá aun medio adormilada y aun abrazando a su pingüino "Honey" como lo había llamado.

El rubio se acercó hasta la cama de su niña, sentándose en la orilla, tratando de arreglar los rebeldes cabellos de Ningning que caían por su frente y algo alborotados.

-¡Buenos días, princesa!- Yuta sonrió, acercándose a su hija para dejar un sonoro beso en la cabellera negra de la menor.

La pequeña con el ceño levemente fruncido se volvió a acostar, acomodándose de nuevo en su calentita y cómoda cama, cubriéndose con su cobertor de MooMin que su papá le había regalado para su cumpleaños, escondiendo su cabeza para poder dormir tranquilamente sin que la luz la molestara, otra vez.

Yuta negó con su cabeza, mientras una sonrisa salía de sus labios, acercando su mano hasta el cobertor de su hija, tomándolo y tirando levemente de el para hacer que su pequeña se despertara de nuevo y pueda arreglarse para ir al kínder.

-Levántate, pequeña floja, no iras a la escuela a ver a tu príncipe azul, el señor Lee-dijo, haciendo que su hija inmediatamente se destapara y se levantara, empezando a saltar en su cama rosada con una sonrisa y sus ojitos algo brillosos al hacer mención del Omega.

Yuta sabia cuanto su hija quería a su profesor del kínder, con decirse que hasta le pidió que se casara con ella cuando fuera más grande, cosa que al señor Lee le causo mucha ternura que incluso acepto la propuesta de matrimonio que su hija le pidió.

Ningning es muy tierna que incluso cuando fue por primera vez al jardín de niños, el señor Lee quedo más que fascinado con su pequeña niña, y no podía decirse lo mismo de su pequeña, con solo mirarla se podía notar lo mucho que admiraba y apreciaba al Omega.

-Papi, date prisa- dijo, bajándose de la cama y tomando la mano de su padre, tirando de ella para que se levantara y la siguiera - Tengo que ponerme bonita para el señor Lee.

-Sí, pero antes de eso - dijo - Hay que desayunar Ning _ El Alfa se levanta y abraza a su hija mientras la pelinegra rodea el cuello de su papá con sus brazos.

-¡Hot Cakes! - chila la menor y Yuta asiente con una sonrisa, caminando en brazos con su pequeña hasta la cocina.

Después de un rico desayuno, Yuta y Ningning se dan un baño.

Yuta carga a su niña hasta el baño, ya que siempre le dice que es muy peligroso para ella porque es muy pequeña y puede resbalarse y lastimarse.

El Alfa le ha enseñado a su pequeña a que no debe avergonzarse de su cuerpo como mujer. También que a su edad nadie puede tocarla sin su consentimiento en partes donde no se debe, incluso que solo papá Sicheng, el, tía Karina y tía Winter pueden verla.

Ningning se pasa un patito de hule por sus brazos, mientras su papá Yu le aplica su shampoo con brillantinas y olor a chicle en su largo cabello negro.

Yuta le cepilla el cabello a su hija, para hacerle dos coletas, haciéndole en forma de trenza, poniéndole unas cintas verdes para amarrarlo y que se vea más bonito.

Ningning tararea una canción que el día anterior el señor Lee le había enseñado, mientras papá Yu la hacía verse más linda.

Ningning escoge su ropa, aprendiendo cada día a vestirse por sí sola, sin la ayuda de papá, Yuta le ata los cordones de sus zapatos, una vez que Ningning termina de vestirse y colocarse sus zapatos.

Camino al kínder, Yuta y Ningning se la pasan todo el transcurso del viaje, cantando y haciendo unas que otras locuras mientras padre e hija ríen de cada locura y cosa que se les ocurría.

Llegando a su destino, Yuta es el primero en bajar para rodear su auto y abrirle la puerta trasera a su hija, y ayudarla a bajar del auto, la pequeña acomoda su mochila en sus hombros y sacude su falda de color negro que hace juego con su blusa verde con un estampado de letras que no es capaz de entender porque está escrito en inglés, sin embargo aun así le gusta mucho su blusa que papá le compro, con muchas flores de colores y letras.

Caminan tomados de las manos hasta la entrada del lugar, Yuta se pone de cuclillas para despedirse de su hija, Yuta abulta sus labios en un puchero porque después de dejar a Ningning ya no la vera hasta la noche, cuando terminara de trabajar, era lo malo de que trabajara de todo el día y dejara a Ningning en su escuela, prácticamente todo el día, y si lo hacia así, era para darle lo mejor a Ningning y pudiera alimentarla todos los días con el poco dinero que conseguía trabajando.

Era difícil, sí, pero debía de salir adelante, no solo por el sino que también por Ningning.

Deja un beso en su frente, la menor sonríe, acercándose a la mejilla de su padre, dejando un besito, la campana suena, entonces la pelinegra debe irse.

Yuta mira como su hija corre hacia la entrada de la escuela, donde el señor Lee la espera con su típica sonrisa, Ningning toma su mano y antes de entrar, se gira, lanzándole un beso volado a su padre, quien lo toma y simula guardarlo en su corazón, la menor sonríe, despidiéndose con un gesto de manos.

Yuta desvía su mirada a Lee, quien solo sonríe y al igual que su hija, hace un gesto de manos, despidiéndose de él.

Yuta siente su corazón estremecerse pero aun así es capaz de regresarle el saludo al Omega, antes de que entrara y cerrara la puerta, perdiéndolos de vista.

El Alfa se da media vuelta, regresando a su auto para después iniciar su camino hacia su trabajo.

Espero les guste esta adaptación, estoy muy emocionada ya que es la primer historia que adapto 🥺 Intentaré actualizar todas las semanas. Saludos🌺