Entre la razón y el corazón

10. Miedo

POV Tiago:

En cuanto llegue al colegio fui directo a buscar a la profesora encargada del concurso, la busque por todos lados hasta que la encontré caminando por el corredor hacia el salón

–Profesora, tengo que hablar con usted – dije mientras caminaba tras de ella

–¿Tiene que ser ahora? – dijo mientras seguía caminando con afán

–Si, ahora, es urgente – ella se paró

–¿Que pasa Tiago?

–¿Podemos hacer un dúo para el Cristóbal Colón tiene talento?

–¿Eso era lo urgente?

–Muy urgente – la profesora volteo los ojos y saco una lista de una libreta que tenía en la mano

–¿Vas a hacer duo con...?

–Eva García – dije y ella me miró extrañada

–¿Con Eva? Pensé que no se llevaban bien

–No, si nos llevamos bien, no somos mejores amigos exactamente pero...

–¿Cómo se que no me mientes? – me quedé un segundo pensando, en eso ví que Eva venía con Delaila del otro lado

–¡Eva! – dije y me acerque a ella, la tomé de la mano para acercarnos a la profesora –¿Cierto que ya escogimos la canción que cantaremos?

–Si, vamos a cantar "Rewrite the stars" – dijo, mire a la profesora y ella nos miró entrecerrando los ojos

–Esta bien... entonces los anoto acá ¿bueno? – dijo mientras se metía al salón

–Gracias – dije y luego mire a Eva, y ella me miraba algo extrañada

–¿Qué fue eso?

–¿Qué fue qué?

–La profesora nos miraba bastante raro

–Si, no creía que nos pusiéramos de acuerdo con la canción tan rápido

–Ah... – dijo y en eso Delaila se acercó

–Si no los veo, yo tampoco les hubiera creído – dijo y Eva rio

–Bueno, ¿ensayamos hoy en mi casa entonces?

–Si, seguro – dije y le sonreí, ella me sonrió también, luego los dos miramos a Delaila que nos miraba con una sonrisa que si la veías fijamente daba miedo

–¿Qué te pasa a ti? – dijo Eva

–No nada – dijo y camino un poco hasta que quedó en medio de los dos –¿Qué les pasa a ustedes que siguen agarrados de las manos?

Eva y yo miramos nuestras manos y nos soltamos al segundo, Delaila volteo los ojos mientras reía un poco

–¡Tiago! – dijo Rubén que llegó corriendo hacia donde estábamos –Tengo que hablar contigo

–Hola – dijo Delaila, Rubén la miro y le sonrió mientras saludaba con la mano

–¿Qué me quieres decir? – Rubén miró a Eva, luego me miró de nuevo

–El 1-9-5-7 está en el colegio, y no está solo

–¿Quién? – dijo Eva, la mire algo preocupado y luego mire a Rubén de nuevo

–Tenemos que decirle – dije y Rubén nego

–No, ¿estás loco?

–¿Dónde estaba?